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Capítulo 29

Capítulo : ♣Purasangre♣

[Ii de II]    

 

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Narrador.

— ... Yo mismo utilizé los poderes de Yato para que entraras a este castillo.

  Ahora que le confesaba gran parte de la historia en la que se encontraba involucrada ya podía estar mas en paz. No cambiaba nada, no le devolvía a Saori su vida pero se quitaba un peso de encima. Sin tener que cargar con esa culpa que lo llevó eliminar tantas personas de ese mundo para poder seguir y mantener mente ocupada. Ella seguía sentada frente a él con las piernas cruzadas preguntándole al vacio que debía hacer y como debía reaccionar. El sentía sus pensamientos, emociones y cada mínima artería de su cuerpo esperando a que esta decidiera que decir.

— ¿Viniste hasta aquí para decirme todo esto? — Al final de sus labios salieron mencionadas palabras en un tono neutro. Ni molesta ni triste, solo estaba ahí logrando con su frase abrir un tema nuevo que él debió afrontar.

— Yo vine a pedir la muerte de mi herma-.

  Un duro toque de piel contra piel lo dejó anonado y confundido con la mano de Saori grabada en su mejilla izquierda y su rostro mirando levemente al lado opuesto.  Volteo a verla, estaba levantada a poca distancia de su sofá con aun la extremidad atacante suspendida el el aire.

— ¡¿Estas idiota o qué?! — Exclamó molesta —. ¡Es tu gemela!.

— Saori, calmate, ¿Sabes a cuantos hemos exterminado en su nombre? Familias enteras, comunidades-

— No la recuerdo bien, por ende no soy nadie para defenderla.. ¡Pero es mi preciada familia! ¡No permitiré que ni tu ni ellos la lastimen..! — Se dirigió hasta la puerta donde se detuvo en el marco para oír lo que su primo se disponía a decir.

— ¡Ella va a matar a tu familia! — Se refirió a los Tsukinamis mientras se levanta yendo hacia ella y la tomaba de hombros evitando que saliera.

— ¡No voy a oírte! ¡Das asco! — Forcejeó ella —. ¡Sueltame!.

— ¡Saori mirame! — Obedeció a regañadientes —. Es mas complicado de lo que parece y no puedo resumirtelo, solo te pido que no hagas una tontería.. ¡Veo que terminaras muerta!.

— Tu no vez el futuro.. — Murmuró asustada.

— Yo no.. Pero tu si. La enfermedad a sellado ese don puedo verlo..

— Una vez Carla dijo que dió un castillo entero por algo muy preciado.. ¿Ese algo era yo? — Aquel no respondió, no desvió la mirada, solo mantuvo un perfil serio —. Tu silencio es suficiente — Había desaparecido delante de sus ojos. Maldecía el día en que aceptó esa propiedad ¿En su bruta mente no pudo pedir otra cosa? Claro el dinero nunca le falto pero ahora.. Su prima corría en libertad hacia su muerte.

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  Los tres que habían logrado escapar del calabozo junto con el Mukami ahora debían deshacerse de él. De un momento a otro este parecía no importarle nada mas que atacar a las dos damas y el Sakamaki. Incluso reapareciendo en otro lugar de la mansión eran encontrados por otro de los hermanos. Hasta el menor se movía diez veces mas rápidos de lo normal. ¡¿Ahora habían enloquecido?!.