Capítulo 13

1.8K 151 2
                                    

-¡No me lo puedo creer! ¿Tu y Gajeel en el consejo? Bueno, lo tuyo lo puedo entender pero ¿Gajeel? ¿ley? ¿En que mundo estoy?

-No te olvides de Lily-murmuró incómoda la pequeña maga. Prácticamente la arrastré hacia el bar para hablar. Aunque hasta ahora la que hablaba era yo.

-Es que no sabíamos aue hacer, y a otro gremio no había ganas.

-Madre mia-bebí un poco mi batido preferido. Tenía que parar ya de tomarlos tanto. Aunque parece que no he engordado pero el top de mi traje ya me quedaba justo. Y a mi me gustaba demasiado esta ropa. Era cómoda y con estilo.

-Te toca-anunció-Cuando te ví casi ni te reconozco. ¿Como es que te cortaste el pelo loca?

Sonreí un poco-¿Quieres resumido o historia completa?

-Lo siento, será resumen. Todavía me quedan dos gremios-suspiró cansada-y todavía quedan mogollones de reuniones.

-¿Mal momento?

-El peor, todo ese cambio de magos...es un infierno. Pero por lo menos ahora el consejo no es tan snob, son muy majos la verdad. Menos algunos.

La observé mientras ella fruncía el ceño a su bebida y parecía que quería romper el vaso sobre alguna cabeza.

-Si oyes en algún lado Serena, huye por tu vida-dijo de repente-o mátalo mejor, es un idiota engreído.

Subí un poco las cejas. ¿Serena? Suena afeminado. Maldición ¿siempre tengo que pensar en Natsu?
Y eso que me había arreglado en no pensar casi nada en el gremio.

-Y al final no me contaste tu resumen -de repente un codo choca en mis costillas sacándome de mis pensamientos.

-Minerva, Sting y Roug estaban de misión y pasaban por Magnolia a saludar a los de Fairy Tail. Creo que se perdieron y acabaron cerca de mi casa. Casi peleaban. Los invité a mi casa y hablamos-mi mano empieza a jugar con los mechones más largos de mi pelo rizado, curvándolo alrededor del dedo y sola dolo otra vez,  para repetir el proceso una y otra vez-Supongo que tenía pintas penosas así que me invitaron al gremio.

Al decirlo ambas nos subimos en un silencio. No era incómodo, simplemente un silencio para pensar.

La primera en interrumpirlo fue Levy:

-Me alegro mucho. Con todo lo que pasó este era un duro golpe. ¿Se sabe algo de Natsu?

Suspiré y me desplomé en la barra sin importarme todos los modales.

-Nada, solo aquella carta donde decía que volvería en un año. Lo juro, si no vuelve yo misma lo buscaré para pagarle su imbécil tracero.

Con eso conseguí que Levy riera-Oh, no dudo que el te lo permitirá con gusto.

La empujé en broma riendo mientras un leve sonrojo cubría mis mejillas-No seas idiota, es mi amigo.

-Claaro-entolló la lengua y casi podía predecir que iba a decir la palabra de Happy.

No, no iba a permitirlo. Yo también tenía ases en el manga.

-Mira quien habla, la que trabaja junto a su...

-¡No! ¡Ni se te ocurra decirlo! -chilló desesperada. Incluso a mi le asustó. Que decir del gremio por completo.

Fruncí el ceño intentando comprender su reacción cuando la respuesta apareció en la entrada, escaneando todo el lugar con los filosos ojos rojos. Sus ojos no tardaron en caer sobre nosotras y pude ver pequeña sorpresa al verme, pero al rato cambiaron a Levy volviéndose todo hombre rudo.

Algún Dia...[1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora