Colors {Camren}

~Capítulo 25~

Una y otra vez me preguntaba si había hecho lo correcto, una y otra vez me contestaba que aquello tenía que pasar en algún momento. No podía posponerlo eternamente, pero... ¿Acaso me había precipitado? O ¿Había dejado pasar demasiado tiempo?

A pesar de todas esas dudas ya no podía dar marcha atrás, ya estaba hecho.

Di una respiración honda antes de ver por última vez el mensaje, dejé el celular sobre la mesita de noche y al girarme en la cama, su rostro, bañado apenas por la luz de la luna, me hizo olvidar todas esas preocupaciones.

Sólo tenía que encontrar esa felicidad de unas horas atrás.

~Flashback~

- ¿Quieres ser mi novia?

-Cielos... -juro que su sonrisa podía matarme de un infarto- No sabes cuánto deseo gritar que sí, pero...

- ¿Pero...? -si mis manos temblaron mientras le ponía el anillo, la incertidumbre estaba a punto de provocarme Parkinson.

-Hey... Te amo -dijo y besó mis manos- Y he esperado que estés lista para esto desde hace tanto... Pero ¿Sabes? al oficializarlo, dejamos de ser un secreto...

- ¡Joder Jauregui! ¿Crees que no lo sé? ¡Maldición! ¿Crees que no le he dado vueltas al asunto cada día que siento que cualquiera puede reclamarte porque no tengo los ovarios suficientes para salir del closet?

-Camz...

- ¡Sé que dejamos de ser un secreto! ¡Sé que debo dejar de lado mi temor y que todo será diferente ahora!

-Camila...

- ¡Estoy consciente de todo! ¡Te estoy pidiendo que dejes de ser mi pequeño secreto y te conviertas en mi novia! ¡¿Crees que no sé lo que eso significa?!

- ¿Puedo decir algo?

- ¡¿Qué?!

-Deja de gritar y sí... Quiero ser tu novia.

- ¡Eres una idiota Lauren! -ella rió como una pequeña bebé- ¡Arruinaste probablemente la mejor declaración de amor de la historia!

-Puedes repetirla -ella tomó mis manos de nuevo, tratando de acercarme a su cuerpo- Y yo diré que sí sin rodeos.

-Jódete -rió con más ganas.

-Yo también te amo -ella estaba más cerca, mi enojo no iba a durar mucho tiempo más.

-Tendrás que esforzarte cuando quieras que me case contigo.

Su risa cesó, una estúpida y perfecta sonrisa la reemplazó.

"Karla, apenas llevan un minuto siendo novias y ya estás hablando de matrimonio... Cierra las puertas antes de que se escape" me dije.

- ¿Cómo sabes que voy a querer casarme contigo? -gracias al cielo ella no podía ver el tomate en que me había convertido.

-Creo que deberíamos estarnos besando, ¿Sabes? -tragué saliva con fuerza- Es lo que se acostumbra cuando aceptas ser novia de alguien...

Ella asintió un par de veces con esa maldita sonrisa. Se humedeció los labios, mi aliento quedó atrapado detrás de mi garganta. Joder... Me sentí nerviosa, como si fuera nuestro primer beso... Como si fuera mi primer beso.

Todo mi berrinche se consumió en el olvido al sentir sus labios contra los míos, no era un beso profundo aún y, sin embargo, yo ya estaba sonriendo como ella. Era estúpido, hace segundos quería golpearla. Seguimos a ese ritmo inocente, entre roces y ligeras presiones.