Después de desayunar Abby y Alice llegaron al gran salón encontrándose a Bruce y otro hombre discutiendo mientras Duncan los miraba ceñudo.- Buenos días! - saludaron haciendo callar a los hombres.
Duncan sonrió al ver a su descendiente y pensó que iba a ser divertido ver como reaccionaría ante lo ocurrido.
- Abby, puedes venir a mi lado?
Ella lo miró confusa pero se puso a su lado.
- A pasado algo? Algo relacionado con... - insinuó en tema del traidor.
- Oh, no - dijo él comprendiendo - es una cuestión más complicada.
- Complicada?
- Verás... este hombre de aquí - dijo Duncan señalando al que estaba al lado de Bruce - me acaba de pedir tu mano en matrimonio.
Alice se quedó boquiabierta, Abby no daba crédito a lo que había oído.
- Es broma?
- Yo nunca bromeo!
- Deberías hacerlo - dijo Abby sonriendo - te verías más juvenil.
- Me estás llamando viejo? - dijo Duncan divertido.
- Ni me atrevería - dijo con las manos levantadas y volviendo su mirada al hombre continuó - me siento halagada señor pero voy a declinar su petición.
- Eso a sido muy amable - dijo Alice sonriendo en español - incluso para ser tú.
Abby la ignoró.
- Entonces es cierto que se va a casar con el laird Sinclair? Por eso me rechaza?
- De que hablas? - dijo Abby con el ceño fruncido - quien a dicho eso?
- Yo - dijo Bruce arrogante - no voy a dejar que seas la mujer de otro; tú te casarás conmigo!
- Veo que tu arrogancia es más grande que tu ego - dijo Abby cruzándose de brazos - pero no pienso casarme contigo.
- Ahora sí puedo irme - dijo el hombre sonriendo - a sido un momento inolvidable - y salió del salón.
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Linaje
Historical FictionUn contrato matrimonial, dos almas enamoradas, familias enfrentadas y una maldición que afecta a todos los descendientes de ese amor. La única solución de salvar a la última descendiente sería encontrar a la persona que echó la maldición. Que pasará...