Mi Crush

Parte 47

A la mañana siguiente Sofía se fue temprano, no quería tener problemas con sus padres

Yo por otro lado tenía terapia hoy así que me alisté, mis terapias eran el las mañanas así que se me estaba haciendo un poco tarde.

  — Vamos Ariadna, que se nos hace tarde— dijo

— Sí sólo hay que ir por Sofía para que vaya con nosotras— dije tomando mi bolso

— Okay— dijo fuimos a la casa de Sofía y pedimos permiso, es increíble  todo lo que han cambiado los padres de Sofía.

  — Me complace anunciarte que solo nos veremos el otro mes y... estarás dada de alta— dijo la mujer que estaba en frente de mi, mi psicóloga, la persona que me ha ayudado en todo este tiempo

  — En serio?— dije, no pude contener las lágrimas

— Claro, tu estás perfectamente sana, te agendará una cita con la psiquiatra para que vea si te pueden quitar el medicamento, no veo por que seguir con el si tu estás más que sana.

  — Gracias, en serio— dije

— No es nada, este es mi trabajo— dijo sonriéndome— Ahora sal y dales la buena noticia

— Gracias— dije abrazándola, caminé por el pasillo que me dirigía  a la sala de espera y cuando llegué y me vieron me preguntaron ¿qué había pasado?

— Una terapia más y me dan de alta— dije en voz alta, ellas se dirigieron a mi y me abrazaron.

  — Felicidades— dijo la señora Daila junto a su...hijo, ni yo me la creí, su hijo era el chico que causó una de las peleas entre yo y Joel

  — Gracias — dije sonriéndole

La señora Daila notó como miré a su hijo—Ahh y él es mi hijo Olián—dijo acercando a Olián casi a la fuerza, se miraba muy apenado

  — Ya lo conocía— dije, él alzó su mano y no tuve de otra, estrechamos nuestros brazos, él me sonrió.

Despues de eso nos dirigimos a celebrar y de pasada compramos los vestidos que usaremos en la graduación, me complace mucho decir que gracias a Sofía soy de las mejores en mi clase.

Sofía escogió un vestido hermoso, debo aceptar que se le miraba más que bien cuando no lo probamos, y la verdad yo tampoco me miraba mal.

Despues de pasearnos un buen rato por la cuidad, nos dirigimos a casa, lo que quedó del día yo y Sofía nos dirigimos a su casa para terminar un proyecto final.

Al día siguiente yo casi convencí a Sofía de no presentar el proyecto, pensé que estaba muy mal hecho, pero Sofía insistió en que no estaba mal y una cosa llevó a la otra y terminamos apostando, la apuesta era que para  el baile unha conseguiría su cita y otro chico para la otra, si sacabamos 10 en el proyecto yo sería la que conseguiría dos chicos, y si no conseguimos esa calificación Sofía los conseguiría. Pero como siempre la suerte no está de mi lado, los demás proyectos eran un asco, comparados con el nuestro eso eran, y pues sí, sacamos 10, ahora no sé de dónde sacaré dos chicos, no he podido conseguir uno, menos dos.

  — Ahora qué haré?— dije

— Conseguir dos chicos— dijo riendo

— Que tal si consigo un chico y una chica?— dije dándole un codazo

— Estas loca— dijo— no quiero sufrir las consecuencias, no de nuevo— dijo

— Y si vamos las dos— dije. No tanto por querer ir con ella con intención de tener una cita, si no porque yo no quiero conseguir dos chicos y mucho menos tener una cita.

— No, así no cuenta, tú eres mi amiga, no será muy deprimente que no consiga una cita— dijo riendo

— Puedo ser tu cita—dije adoptando una pose "sexi" 

  — Menos mal que ya no viene mi padre— dijo volteando a todos lados

— Okay— dije alargando la palabra— no quiero asustarte pero ahí viene— dije

— No me dijo que vendría— dijo Sofía—Yo tampoco quiero asustarte, pero no será tan difícil conseguir dos chicos

  — ¿Por qué lo dices?— dije

— Detrás de ti— dijo

— ¿Quién? — dije asustada

  — No lo desperdicies, sólo quedan dos semanas — dijo alejándose

— Adiós— dije

Alguien tocó mi hombro

  — Oh, hola— dije a Olián

— Hola— dijo mirándome

Vi que la conversación no tenía sentido y decidí terminarla

— Adiós— dije alejándome

— No, espera— dijo acercándose a mi— Sólo quería...invitarte a Salir— dijo rápido

Suspiré— No lo sé 

— Por favor piensalo y... si no puedes o algo parecido, pues podemos ir juntos al baile de despedida— dijo sonrojado

Yo sólo asentí y me fui 

Al llegar a mi casa Sofía ya estaba ahí, me preguntó sobre cómo fue la conversación, se decepcionó al saber la calidad de la platica, me dio consejos sobre la primera cita, ya saben por si olvidaba como acercarme a alguien despues de tanto tiempo, me dio consejos de besos y hasta de... otras cosas.