Nadie advierte a las niñas pequeñas cómo los muchachos con ojos hermosos que huelen a humo, que saben como la lluvia, que hablan como la plata, son las razones detrás de las almohadas empapadas de lágrimas, los poemas a medio terminar y varios sueños tristes
-Nikita Gill
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Doble Error.
Ficción GeneralConocerlos no fue un error, dejarse seducir por ellos sí. Uno es el aire que necesitas para vivir, el otro es el fuego que te mantiene existiendo. La sonrisa que te agita el corazón o la mirada que te hace temblar las piernas. El que te roba el cor...
