The Secret of Queen Lou- Larry Stylinson

Capitulo XXIII

"¿Victoria?"

Louis sentia que el piso se le movió en aquel momento, todo le daba vueltas y sus manos estaban temblando, no sabía que hacer o que decir.

—¡Pobre de tu familia! —comento Catalina con media sonrisa—Tendrás el mismo destino que Felipe, pero antes de morir, harán que veas la muerte de los que amas—elevo las cejas—¿Eso te gustaría? ¿En qué demonios estabas pensando? ¿Creíste que nadie jamás sabría tu secretito? —se echó a reír descaradamente—Que estúpido.

La reina madre llevo una mano hacia el rostro de Louis y lo tomo de la barbilla.

—Ahora que lo pienso, no solamente tu esposo e hijo pagaran por tu imprudencia, también tus padres—negó con la cabeza—Ese será su castigo por haber escondido a un ser como tú y hacerlo pasar por una princesa.

Louis apretó sus puños y le quito la mano a Catalina de manera brusca.

—No se atreva a tocarme de nuevo ¿Entendido? Y veo que no ha comprendido que soy la reina de esta nación—elevo las cejas—Debería cuidar lo que dice—la miro a los ojos—No querrá que yo misma le corte la lengua tan asquerosa que tiene.

—Vaya, te refieres a ti mismo como mujer, a veces por decir tantas mentiras llegas a creértelo—asintió—Bien, querida reina el destino de su familia está en sus manos. Y tú veras como todo el reino de hunde, como el mismo pueblo derrumba al gobierno de tu querido esposo, veras la muerte de toda tu familia. Serás testigo de todo eso si sigues con tu actitud imprudente y egoísta.

La reina madre le hizo una reverencia para despues marcharse de aquel lugar.

El castaño se sentó en el primer escalón sintiéndose incapaz de dar un paso más, el omega trato de relajarse, respiro de manera profunda y trato de encontrar una salida, pero en efecto estaba acorralado, todo estaban hablando sobre su estado.

Sin poder impedirlo, las lágrimas de Louis comenzaron a salir de sus ojos, su llanto de hizo cada vez más fuerte en el solo pensar que todos podrían terminar muertos.

Louis escondió su rostro en sus manos y siguió llorando, era como si viera pasar su vida delante de sus ojos.

Minutos más tarde, Louis sintio dos manos tomarlo del brazo, el castaño reacciono de manera agresiva empujando con un poco de fuerza, pero se encontró con dos hermosas orbes verdes mirándolo fijamente.

—Harry—susurro Louis.

—¿Qué sucede? ¿Alguien te ha hecho algo? ¿Por qué estás aquí llorando? Es mejor que me digas. ¿Qué te paso?

—¡Oh Harry! —chillo el omega aferrándose al cuello de su alfa—Ellos lo saben—susurro—Saben que soy un omega, todo el palacio está hablando sobre eso, las sirvientas se atreven a mirarme a los ojos, Harry, lo saben.

El alfa se separó de inmediato y lo miro a los ojos.

—¿De qué estás hablando? —pregunto rápidamente.

—Todo el palacio está hablando sobre que soy un hombre omega. ¿Cómo lo saben?

Harry se quedó en silencio y miro a todos lados.

—No es el lugar para hablar de esto ¿De acuerdo? ¿Olvidas que las paredes escuchan? —elevo las cejas—Es mejor que nos vayamos a nuestra habitacion, me tienes que explicar qué demonios está pasando.

Louis asintió, ambos se fueron a su habitacion, le pidieron a Niall que por favor se llevara al pequeño príncipe a dar un paseo. Ellos debían hablar seriamente.