The Secret of Queen Lou- Larry Stylinson

Capitulo XXV

"Tercera oportunidad"

Un par de días despues.

—¡¿En dónde demonios esta?! —pregunto Harry con un tono exaltado.

—Lo siento majestad—respondió su guardia principal de nombre Marcus—Di órdenes precisas de que los llevaran al lugar que me indico, pero ahora no saben en dónde están, ni el carruaje se encontró. No sabemos que paso con ellos.

—¡MALDICION! —grito el rizado desesperado.

—Lo siento por esto majestad, ¿Quiere que siga buscando? —pregunto Marcus.

El rizado tenso la mandíbula.

—¡SI! —gruño el alfa—Por ahora ocúpate de tus obligaciones.

—Si majestad—respondió el hombre

Harry se quedó en silencio, tenía un horrible en la garganta, se preguntaba una y otra vez si Louis se encontraba bien, sabía que seguía vivo, de eso estaba seguro. Rezaba porque sobreviviera y por tener noticias de él ¿En dónde demonios se había metido?

(...)

Dos semanas despues.

Niall se encontraba hincado sobre el piso del carruaje limpiando con atención la herida que tenía Louis en el costado. Gracias a la generosidad de alguna gente habia logrado conseguir los materiales necesarios para tratar de que la herida no se infectara y que no se desangrara. Habia sido bastante difícil controlar el sangrado, pero al parecer estaba mejor.

—Debe resistir majestad—susurro el rubio con un nudo en la garganta.

Despues de limpiar la herida llevo su mano hacia el rostro de este y lo toco delicadamente, estaba ardiendo en fiebre.

—Por favor majestad, resista solamente un poco más. ¡Oh dios mío déjanos llegar por favor! —suplico el rubio bastante preocupado.

Despues de limpiar la herida el beta permaneció junto a ese omega tomándolo de la mano, claramente ya era consciente del "estado" de Louis, le habia tenido que quitar la ropa y descubrió la verdad, y a pesar de su educación, decidió permanecer junto a él, habia sido demasiado bueno y bondadoso y no era nadie para jugarlo, lo cuidaría hasta el final de sus días.

Varias horas despues, Niall sintio como el carruaje se detuvo, el beta se asomó por la ventana un par de guardias habían detenido el carruaje y estaban interrogando al conductor.

Niall salió rápidamente y cerró la puerta para que nadie pudiera ver las condiciones de aquel omega.

—¿Algún problema? —pregunto Niall acercándose a los guardias.

—Sí, no pueden pasar—dijo un gran alfa mirándolo fijamente—¿Quiénes son? ¿De dónde vienen?

—Lo siento, no nos presentemos, venimos de Francia—respondió Niall con tranquilidad—Necesito hablar con el Rey Arthur ¿Puede avisarle que la reina de Francia está aquí? Solamente dígale eso, si quiere esperare aquí ¿Si?

—¿La reina? ¿Aquí? —pregunto el hombre incrédulo al ver el carruaje tan insignificante.

—Por favor, se lo suplico, solamente dígale eso. No daremos un paso más, ¿Si? Es algo urgente—Niall miro fijamente a ese hombre esperando que lo ayudase.

El silencio se formó, aquel hombre miro aquel carruaje de arriba abajo, despues miro al rubio y soltó un gran suspiro.

—Quédense aquí—ordeno el guardia—Ahora vuelvo.