10. ¿Y mi beso de despedida?

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10.

     Después de reírnos nos quedamos un momento hablando sobre nuestras vidas y cosas así, me enteré que es hijo único, lo que más aprecia es a su mascota llamada Demonio y que sus padres lo dejan solo mucho tiempo, tanto que ah podido hacer muchas fiestas en su casa y nunca se enteran, Wou, quisiera una vida así.

Suspiro —¿Y ahora qué?

Castiel bostezó, —Pues nos cambiamos y arreglamos todo, Alex vendrá mañana temprano antes de ir a clases.

¿Eh? —¿No venían en la noche?

—Sí, pero Alex me llamó diciéndome que su transporte se varó por una tormenta que se presentó de la nada, se tuvieron que quedar en un hotel para salir mañana temprano para llegar a clases.

—Oh, ya veo— Que raro, ¿por qué no me llamó a mi?

     Castiel se levantó de la cama y se fue a tomar una ducha, me da el tiempo necesario para pensar. Después de esto, ¿qué somos al final? Ó sea, ¿solo fue para "divertirnos"? No lo sé, no sé que me valla a decir si le pregunto. Castiel sale del baño con una toalla enrollada en su cintura, me armo de valor y le pregunto.

—Castiel..

—¿Si?

—Después de esto, nosotros,— hago una pausa, ash que difícil. —tú y yo somos,— no me sale, mierda.

Tuerce los ojos —Ashh.

     Castiel se acercó a mi a pasos rápidos, agarró mi barbilla e implantó un beso en mis labios, me sorprendí un poco pero le respondí, fue un beso dulce, sin lengua, solo nuestros labios húmedos. Luego de unos segundos se separó, dejando salir un suspiro y lamiéndose los labios.

Me mira a los ojos, —Ahora ten cuidado con quién andas o me pondré celoso y tendremos problemas,— me soltó la barbilla y se puso derecho. —Tú eres mío, de nadie más, ¿entendido?

Sonrío, —Si.

Castiel me devolvió una sonrisa de boca cerrada —Vete a bañar, tenemos que dormir.

     Lo obedecí, me di una ducha rápida y al salir vi a Castiel acostado nuevamente en la cama de Alex, con una camisilla negra y una sudadera larga de rallas rojas y negras. Me visto y al ponerme mi camisa Castiel me dice que me duerma a su lado y sin pensarlo dos veces me duermo junto a el.

""

     Al día siguiente me despierto sobre saltado viendo el reloj, ¡mi primera clase comienza a las 8 y son las 7:28! Volteo a ver a Castiel, sigue dormido y aprovecho para levantarme de la cama lo más rápido que pude y entro al baño, cuando salgo me visto lo más rápido posible y al terminar decido llevar mi reloj conmigo, no quiero perderme del tiempo, me acerco a la mesita de noche donde lo había dejado y la mano de Castiel sale de la nada agarrando mi muñeca, me lleva hacia el e implanta un beso corto en mis labios.

—Por lo menos despídete antes de irte.— Me regaña.

—¡Pero si estabas dormido! No podía despertarte.— Nunca había dicho algo tan encerio en mi vida.

—No importa, quiero verte cuando salgas.

—Está bien. Tengo que irme, llego tarde a mi clase.— Traté de soltarme pero me vuelve a atraer a el.

—¿Y mi beso de despedida?— Sonríe.

—Castiel por favor, seme hace tarde.— Me quejo.

—Solo uno.— Pide.

Suspiro. Pongo mi dedo índice bajo su barbilla para que alzarle la cabeza, me acerco y le doy un beso el cual el lo acepta, cuando me empieza a meter lengua es cuando me separo. —Tengo que irme. Nos vemos en educación física.— Salgo del dormitorio.

     Empiezo a correr bajando escaleras, atravieso pasillos, la cafetería, aula de ciencias y más y más pasillos. Veo la hora en mi reloj y faltaban 2 minutos para que sonara el timbre y cerraran las puertas, acelero más. Logro llegar, con el corazón en la garganta logro llegar, cansado pero lo logré. Apenas que llego me siento en la primera silla que veo, dejando salir un largo suspiro. Y hay estaba Lysandro al lado mío.

—Wou Nathaniel, casi llegas tarde— Me dijo, cerrando su libreta.

—Si, por poco.— Recupero un poco el aliento al reposar mi cabeza en el pupitre.

—Oye Nathaniel, ¿sabes si Castiel vendrá a clases hoy? No lo eh visto desde ayer.

—No lo sé, salí del dormitorio mientras el dormía.— Me rehuso a decirle lo que pasó.

—Si lo ves, ¿le podrías decir que necesito hablar con el? Por favor, es importante lo que le tengo que decir.

—Claro, no hay problema.— Si lo hay.

—Muchas gracias.

     Llega la profesora y empieza la clase, todos se sentaron para dar inicio.

     Después de hora y media suena el timbre, tengo que ir a mi próxima clase: Educación física. Regreso al dormitorio ya más relajado para cambiarme y ponerme el uniforme, al abrir la puerta me encuentro con Alex desempacando sus cosas.

—¡Alex!

—¡Nath!— Me abrazó.

—Que bueno que regresaste. ¿Cómo te fue con tus padres?

—Bien bien— Sonrío. —¿Y ustedes? ¿Que hicieron mientras no estaba?

Sabía que preguntaría eso, —Pues, en la tarde Castiel se emborrachó y me tocó cuidarlo, al final faltamos a clases.

—¿Como que "faltaron"?

—Si, como no estabas me quedé cuidándolo, luego iré donde la directora para que me de los informes que dieron ayer, bueno si no se me olvida después.

—Yo de suerte tengo excusa,— Se río. —bueno luego hablamos, tengo que ir a clases.

—Si, yo también.

—¡Hasta luego!— Se fue.


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Lo que dicta el Corazón  ✅ ~CastielxNathaniel~Where stories live. Discover now