Loser Reddie (IT)

Capítulo 9

Es muy dificil asistir diariamente a la escuela, sobretodo cuando la compartes con un ser humano como tú o yo, en mi caso se trata de Henry Bowers.
Es como si tomarás el papel de un pecesito, pongámosle Nemo, ya han escuchado el dicho "Ahora sé como se siente un pez", es exactamente igual. Básicamente estar tensionado a cada momento por no saber en cual exactamente Henry hará algo que me lastime, es desagradable y también es una suerte verlo sólo en las salidas y recreos.
Es mucho mayor y cómo dijo Richie, un total abusador.

-Entonces... ¿Qué te parecieron mis amigos?

-No son lo que en un principio me imaginaba.

-Eso es un...

-Son agradables. Verás, le faltan algunos tornillos como tú y yo pero sí, son agradables. ¿Hay algún problema?

-Hhmm... Lo que dijiste ese día en casa de Bill, ya sabes...

-¿Jalarte el nepe?

-¿Eh?

-Jalarte niño, masturbarte. Ya lo dijo Bill, es de lo más normal así como tener lentes, ser gordito como Ben, ser alto como Bill, ser crespo como Stanley, ser moreno como Mike, y ser enano como tú. Como tú comprenderás, ¿ahora entiendes?

-Entiendo.

-Además, tu también los haces, ¿verdad?

-...

-¿Cual es tu parte menos favorita?

-Cuando ya voy a acabar, de hecho cuando ya terminé, mis manitas se ensucian y... Es extraño, pero pienso en mi mamá y siento que hice mal.

-Eres exactamente igual que yo. Pierde cuidado, un día te acostumbrarás y no te sentirás tan mal. Y por tus manitas sucias... Hazlo en la ducha y juega más con tu amiguito.

-Sí que eres idiota.

-¡Hey! Sin insultos.

-Vamos, entremos a clase rápido que hoy por reglas de la escuela salimos temprano, ¿no es esa una gran noticia? -finaliza Eddie queriendo lucir animado-.

-Llegó el momento de usar el cerebro.

Ya no era costumbre mencionar que para las clases del guapo no era necesario usar el cerebro, quizás sí, pero con el más mínimo esfuerzo. Los estudiantes ya se acomodaban a la rutina y generalmente los días eran iguales. Aunque, cada uno con su rollo, a veces entre compañeros y algunas otras más personales.
Las acusaciones de 'Profe, Fulanito me sacó la lengua, castíguelo o le digo a mi mamá que lo bote' ya no estaban a la altura del salón Águila, para comprender mejor, la gran mayoría ya tomaba el hecho de ser mayor, mientras que la otra minoría mostraba un equilibrio entre lo que era ser un adolescente y ser un pre-adolescente. No podemos generalizar, un pre aún mantiene ciertas características de infante, pastelito y espaguetti eran un claro ejemplo de ello.

-Entonces, a bases iguales...

-¡Exponentes se suman!

-Oh bravo señor Kaspbrak, me arrodillo ante usted su majestad. -el salón se adentró de risas-

-Cielos, no es para tanto. -sonrisa pícara que aprendió el estudiante del maestro, maestro a quien superó-

-¿Qué usted no lo pudo decir? -lanzó un alumno gruñón, mismo Stanley-

-¿Perdón?

-Usted es el profesor, debería enseñar y no dejar que un idiota le enseñe a usted.

-Ah no mi hermano, usted se va directamente a la dirección.

-De acuerdo, me voy. Me voy pero contento porque le dije la verdad, y ya veo que le dolió. -Y se fué-

El salón estaba en completo silencio, ni una sola palabra, ni si quiera un pequeño sollozo, nada. Todos boquiabiertos por aquella terrible escena, que rochesaso para Bill, sólo era una dinámica. O una de dos, en verdad Bill no la hacía de profesor, o ese alumno era el hermano perdido de Stanley que guardaba maldad en su corazón, digo, se mostraba un pedacito de rabia en su interior.
En fin, no es mi pedo así que continuemos.

12:00 pm

-¿Qué fue eso? -Richie abrió la conversación-

-¿Qué cosa?

-Eso, lo de hace un rato.

-Aya, un alumno siendo rebelde con el mejor profesor del mundo.

-Lo sé, sólo pienso en cómo debió estar sintiéndose el maestro, es una humillación, y de las grandes.

-Hay mejores cosas en qué pensar.

-...

-...

-A veces pienso que el Eddie que conocí el primer día fue devorado por un demogorgón.

-Idiota.

-Quedamos que sin insultos.

-¡Ahhhhhhhhhh!

-¿Te la metieron sin lubricante?

-Deja de molestarme.

-Es divertido trollearte. ¿Ves que soy mejor que tú en esto?

-Algún día tu también caerás.

-Estaré preparado.

El mediodía indicaba la finalización de las clases, un gran alivio del que no todos los días se puede gozar tranquilamente, sobretodo cuando la escuela está de patas arriba. Hasta para tirarse un pedo existen problemas, así uno qué va a poder. ¿Richie, Eddie? No creo que esten preparados.

-¿Por qué no estuviste la vez pasada? Te estuve buscando mi amor.

-Ay dios... -susurra el más bajito-

-Que lo dejes en paz Henry Bowers. Sabes que mi puño duele peor que cuando te la meten por atrás, ¿verdad? Y si no lo sabes pues ahora sí, así que ya deja de molestarlo.

-Veo que aceptaste ser su noviecito.

-Otra vez con esa mierda.

-Que feo expresarte de esa manera cuando para ese joto lo es todo en la vida.

-Basta, Bowers. Por... Por favor. -pidió Eddie-

-¡Puño revienta tontooos! -Richie aventó un gran golpe de boxeador al más alto, fue tanto el impacto que se le cayeron los lentes-

-Rápido Eddie, vámonos. -se dió un tiempo para recoger con prisa sus anteojos tirados en el suelo- Lo tengo.

-Eso es para que aprendas a no meterte con nosotros. Y a la próxima el puñetazo te la daré en el culo, imbécil.

Y se fueron sin más.