Epilogo

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500 años después...

-Mami despierta...- susurro una vocecita en mi oído y como lentamente algo se adentraba en las colchas a lo que yo le deje un poco de espacio para que se acurrucara en mi pecho y pude sentir un leve ronroneo de placer.

-Tranquilo cariño solo fue un sueño, un mal recuerdo del pasado- susurre en su oído mientras acariciaba su melena y lo apegaba a mi pecho, el pequeño bultito que creaba su forma animal entre mis mano de cierta forma me recordaba tanto a mi de joven que no pude evitar soltar una sonrisa de felicidad al sentirme mas conectada a mi cachorro.

A los segundos senti como alguien me apresaba mi cuerpo en sus brazos eh igualmente ronronee antes la delicada forma en que acariciaba mi piel. Su delicioso aroma inundo mi alfato y solo me quede quieta gosando de cada mimo que me proporcionaban... pero no podia comparar lo que el me proporcionaba con el amor que tenia a mi cachorro... era incapaz de corresponderle con un sentimiento tan grande como el que el me profesaba y en cierto momento a lo largo de nuestro contrato lo comprendi... yo no podia amar o apreciar a otro que no fuera mi pequeño, algo dentro de mi me lo repetia dia a dia y aun que yo me negara a aceptarlo en algunos momentos sabia muy en el fondo que ese lugar estaba ocupado con alguien mas... aun que no lo pudiera recordar yo sabia que estaba ahi, algo dentro de mi se negaba a saltar aquella extrana presencia que volvia todas las noches a mi mente y me susurraba al oido todo el amor que tenia hacia mi, mientras repartia dulces caricias en mi cabello.

Al recordar aquello el sueño desaparecio de mi mente y no pude evitar mantenerme conciente de las cosas a mi alrededor, mientras repartia caricias a mi pequeño, cuando senti flojo el abrazo en mi me desvanecí para poder salir de la cama y observer como el albino estaba dormido en la cama y en busca de contacto acuno a nuestro hijo entre sus brazos, aquello me parecio un tanto tierno, pero mientras miraba las facciones ahora maduras del albino no pude evitar compararlo y critica un par de cosas de el... como si esperara que fuera alguien mas y fue aquel pensamiento el cual me irrito un poco y no sabia la razon en realidad... que habia echo antes que me dejaba esta incomoda sensacion en la boca de mi estomago cada vez que le veia tan detalladamente.

Y como cada vez que aquello ocurria me alejaba de el y me aisala en la habitacion mas alejada del Castillo, por algun motivo aun que no recordaba nada de mi vida con mi contratista anterior conocia a la perfeccion los pasillo de este gran Castillo y siempre que alguna emocion me molestaba por alguna razon yo terminaba en esta habitacion, como si algo me llamara de esta, sin mucha energia me desplome en el colchón y atraje una de las tantas almohadas de la cama para llenarme del olor de esta, este lugar era como mi guarida, nadie podia entrar a perturbarme de aquella tranquilidad que tomaba mi cuerpo y por alguna razon a pesar de los años el olor de esta nunca cambiaba, era tan adicta a este aroma que por momentos olvidaba el olor de Subaru... esto era mil veces major, pero habeces llegaban a ser tan similares que me asustaba de mi misma.

Mire la habitacion por completo y de Nuevo aquella sensacion de que conocia todo este lugar lleno mi cabeza... me pregunto porque no pordia recordar a quien pertenecian mis horas de pensamientos

Karl....

Como un murmullo del viento aquel nombre llego a mis pensamientos y como si mi cuerpo tubiera vida propia me levanter de un salto y dirigui mi atencion debajo de la gran cama, palmeando el suelo en busca de algo que no tenia idea de que era, a los pocos segundos senti como la llama de mis dedos rozaba algo, asi que me adentra mas a aquella obscuridad y fue donde alcance a tomar una cajita de madera, sali con esta en mano y me dedique a contemplar los relieves que estaban decorando aquella matiz de obscuros tonos opacos, que facilmente se escondian en la obcuridad debajo de la cama, volvi a centarme en la cama y abri de manera lenta esta, quitando a su paso las capaz de polvo que se habian formado sobre ella, no era mas larga que dos de mis manos pegadas y tenia una altura baja.

De su interior salio una bella melodia que arrullo mi mente por meros segundos antes de percatarme que la mitad de la caja tenia un mecanismo de musica, mientras que la otra era tapisada con un forro gris y sobre este una peineta con un diseno peculiar de cuerbos en 3D y dos anillos de u bello color plata con detalles negros y dentro llevaba grabados las iniciales

"K & K Contract of Life"

Entonces todo fue claro...

Incluso dentro de mi nunca podre olvidarte Karlheinz

Fin.

Diavolik Lovers/Demon Eyes/Where stories live. Discover now