EDWARD : Te quiero hasta las estrellas.

Capítulo 14 : Lo que comienza bien acaba mal.

Capítulo 14 : Lo que comienza bien acaba mal.

"Cuando la adversidad llama a tu puerta , todo los amigos están durmiendo" -Proverbio Polaco.

Despierto gracias al sentir una cosquillas en mi rostro. Abro los ojos lentamente y ahí me llevo un susto. Lo había olvidado completamente. Ahí estaba Edward sonriendo.

-¡Hola! - dice muy animado mientras con la yema de sus dedos juega con mis mejillas y mi nariz.

-Hola. - susurro y le regalo una pequeña sonrisa. -¿Como amaneciste? - levanto mis manos hasta su rostro y ahí dejo una que otra caricia.

-¡Bien! - me rodea con sus brazos y me da un fuerte abrazo. -¿Y tu? - dice a mi oído.

-Bien. - le contesto el abrazo. Nos separamos y me pongo de pie. Veo el reloj en la mesita de noche y suspiro. Apenas sale es sol , es demasiado de muy temprano para mi. -¿Desde cuando estás despierto? - vuelvo a acomodarme en la cama.

Arruga su frente y supongo que está pensando. Resopla y me ve a los ojos. Puedo ver la frustración en sus hermosos ojos verdes. Acaricio su rostro y sonrío.

-No lo recuerdo. - dice en cierto tono triste y comienza a jugar con sus manos. -Lo siento. - se disculpa.

Sacudo la cabeza y lo abrazo fuerte. -No , esta bien. - dejo un beso en la punta de su nariz y el ríe mientras sus mejillas se vuelven rojas.

-Tenemos que ir a casa. - me levanto y extiendo mi mano. El sacude la cabeza y se esconde debajo de las sábanas. -Edward vamos   , tienes que ir , Javiera tiene que estar preocupada. - saco las sábanas y ahí puedo ver que cubre su rostro. -Nos vamos a ver más tarde. - susurro y hago un desorden su cabello. -Vamos. - insisto y el comienza a moverse poco a poco hasta que toma asiento en la orilla de la cama. -Buen chico , ahora vamos a poner tus zapatos. - lo ayudo y al terminar el busca el libro de anoche y vuelve a tomar asiento en la cama.

Aprovecho que está entretenido y voy a ver si todo esta en orden afuera. Voy a la habitación de mi madre y sigue dormida así que vuelvo a mi habitación y ahí veo que aún el sigue sometido en el libro. Sonrío y me le acerco.

-Ya es hora. Nos vamos.

-Pero aún no lo termino. - dice serio.

-Te lo puedes llevar y luego me lo devuelves. - sugiero y el acepta encantado.

Ya afuera , salimos en silencio y todo el camino hasta su casa va contando del uno al diez y vuelve a repetir.

Cuando vamos llegando el se detiene. -¿Todo bien? - aprieto su mano y el sacude la cabeza.

-¿Edward puede quedarse otra vez? - dice mientras me ve fijo a los ojos.

Mi corazón se acelera y no se porque pero una enorme sonrisa se dibuja en mis labios.

-Si.- digo y el sonríe feliz.

Seguimos caminando hasta que ya no demoramos más y llegamos. Toco la puerta y ahí luego de unos segundos esta se abre y ahí aparece el hombre de la otra vez. 

Me ve de arriba a abajo y luego ve a Edward.  Sonríe y extiende su mano hacia Edward.

Edward aprieta mi mano y yo me volteo a verlo. -Te veo luego ¿Esta bien? - susurro y el asiente. -Te quiero. - añado pero en voz muy baja. No quiero que el hombre escuche y luego vayamos a tener problemas.

-Gracias. - dice el hombre. Me volteo a verlo y sonrío.

-No es nada. - contesto y lentamente me voy alejando. Edward entra y ya cuando no veo a ninguno de los dos salgo de ahí.