SIXTEENTH

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Apuesto a que nunca te sentiste tan bien, tengo tu cuerpo temblando como debería. Nena, nunca serás la misma, una vez que haya terminado contigo.

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Junta sus muslos buscando una manera de crear fricción en su zona íntima. Sus bragas están húmedas gracias a la anticipación.

Bruno toma su mano fuertemente mientras el ascensor lleno de personas sube lentamente y abre sus puertas de vez en cuando en algún piso

Rossie esta ansiosa.

Quiere que de una buena vez todas las personas salgan del pequeño elevador, así ella quede sola con su padre y el pueda tocarla por todas partes.

Desea que Bruno la toqué.

Siente como su padre la mira y el agarre en su mano se vuelve más fuerte.

Siguen subiendo hasta que sólo una persona queda junto a ellos dentro del ascensor.

La chica peliroja que los acompaña mira a Bruno de una manera descarada. Obsevandolo desde la cabeza a los pies deteniendose más de lo debido en sus pantalones.

Pero Bruno sólo tiene ojos para su princesa. No le ha quitado la vista de encima y Rossie sonríe hacia su padre. Quiere besarlo, se muere por hacerlo. Pero no debe hacerlo con esa mujer mirandolos.

Para sorpresa de Ross Bruno se inclina y roza sus labios.

Ella se tensa.

"Aquí nadie nos conoce, podemos hacer lo que queramos". Murmura sobre sus labios antes de besarla profundamente.

Ross gime entre el beso, Bruno la toma de la barbilla y chupa su labio inferior. Las piernas de la muchacha se sienten como si estuvieran hechas de gelatina

El rizado chupa por unos segundos más su labio y al soltarlo hace un sonido parecido a un 'pop'.

Ross respira agitada. Su labio se siente inflamado y puede apostar a que ha quedado ligeramente rojo.

Baja la mirada un poco y mira  la entre pierna del moreno.

Joder, Bruno tiene una erección.

Sin dudas esto de tener espectadores lo excita de sobre manera.

El ascensor se detiene suavemente y marca el piso en el que ellos tienen sus habitaciones.

Las puertas se abren y Bruno tira de la mano de Rossie.

"Vamos amor, la suave cama nos espera". Sonríe de lado marcando ese hoyuelo que Rossie tanto ama y se inclina un poco hasta rozar sus labios con los de la chica.

Rossie contiene el aliento de nuevo. Es un efecto que sólo Bruno produce, es como si cada vez que la besa fuera la primera vez.

Hasta ahora era consiente de la compañía dentro del elevador. Por el rabillo del ojo mira a la mujer que esta con la boca ligeramente abierta y sorprendida.

Las mejillas de Rossie se colorean levemente de rosa dándole paso al sonrojo.  Pero se llena de enojo al ver como la chica de cabello rojo mira la erección de Bruno y se relame los labios.

Enreda sus brazos en el cuello de Bruno y este toma fuertemente su cintura.

Fácilmente la suspende.

Ross lucha con todas sus fuerzas para no enredar sus piernas en las caderas de Bruno.

La mujer aún los mira desde el interior del ascensor y antes de salir Ross le saca el dedo medio. Tratando de ser grosera y marcar un poco de territorio.

Daddy Brunz Onde as histórias ganham vida. Descobre agora