Criminal (Jainico)

51.-

POV Omnisciente

El pequeño moreno compró mucha ropa para Dom, también varios juguetes para este, claro que para su edad, y puede que le haya comprado un celular, provocando si no supiera si estuviera bien o no, pero si Dominik necesitaba algo, así se podía contactar con él. Ahora esperaba que su novio pensara en lo mismo.

Sus trabajadores lo estaban ayudando con las bolsas, porque era posible que se había pasado un poco comprándole ropa a su "hijo". Sin embargo, en realidad preferiría que Dom tuviera mucha variedad para usar a que no tuviera qué usar.

En el momento que volvió al departamento de su detective favorito, encontró que su hijo ya estaba bañado y que el señor Navarro estaba completamente mojado, causando que riera.

-Qué pasó?.-Preguntó Nicolás, intentando no reír más de lo que ya había hecho.

-Alguien no quería bañarse.-Dijo Jaime, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Y no encontró nada mejor que también "bañarme".

El mismo Dom rió sólo por unos pocos segundos para finalmente colocarse serio y tener una expresión inocente.

-No es mi culpa.-Dijo Dominik, logrando que el pequeño moreno lo observara y sonriera ligeramente.-Accidentalmente lo pasé a mojar.

-Claro, esas cosas pueden pasar.-Dijo el moreno, con una pausa.-Te traje muchas cosas, Dom.

El mafioso hizo un gesto a sus hombres, ocasionando que estos entraran sólo a dejar las bolsas en el piso, ni siquiera mirando por un segundo a Dominik ni mucho menos a Jaime.

-Cariño, tiene más ropa que yo ahora.-Dijo Jaime, observando todas las bolsas en el piso, haciendo que el moreno cerrara la puerta finalmente en el momento que dejaron las últimas bolsas ahí. Notó una distinta a las otras, y justo fue esa la que Dom abrió.-Le compraste un celular?

-Por si necesita algo.-Dijo Nicolás, intentando excusarse de inmediato.-Le puede servir bastante.

El señor Navarro lo contempló y simplemente asintió, logrando que el pequeño moreno volviera a sonreír.

Dom observó el celular por unos segundos para posteriormente ver la ropa que el moreno le había regalado.

-Qué tal, Dom, si vas a cambiarte de ropa a la que más te guste mientras yo hablo con Nicolás?.-Preguntó Jaime, provocando que Dominik lo mirara y asintiera. Se demoró un par de segundos en elegir su ropa y luego fue a la habitación del señor Navarro. Apenas la puerta de esta se cerró, el detective admiró a su novio.

-No me mires así, un celular era una buena idea.-Dijo Nicolás, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Esta puede ser nuestra primera discusión como padres?

-Cariño...

-No encuentro que haya algo malo en...

El detective lo calló con un beso, haciendo que el mafioso no lo pensara mucho y le correspondiera el gesto.

-También eres una buena persona, Nicolás.-Dijo Jaime, ya que se había separado a los pocos segundos.-Lo digo en serio.

-Tu definición de buena persona debe ser algo rara.-Dijo el moreno, todavía algo confuso, realmente creyendo que su novio pensaba que era mala idea que le hubiera comprado un celular a Dom.

El señor Navarro sonrió un poco y acarició la mejilla de su mafioso para posteriormente darle un beso en la frente.

-Lo único que me podría molestar, y que no es así, es que tendré que hacer mucho espacio para su ropa pero no importa realmente.-Dijo el enojón, logrando que su novio se riera.

-Tal vez me pasé un poco pero no me arrepiento.-Dijo el pequeño moreno, siendo honesto con su detective.-Dejaría que se quedara en mi casa pero sabes que eso es algo complicado, y posiblemente podría preguntar por qué hay tantos guardias y cosas así, y eso no terminaría bien.

-Lo entiendo.-Dijo el señor Navarro, con una pausa.-Pero estaremos bien acá.

El moreno asintió, y en el momento que lo hizo, se pudo escuchar como abrían la puerta del cuarto de Jaime, ocasionando que ahora estuviera concentrado en Dom, y el señor Navarro igual.

-Te queda muy bien la ropa.-Dijo Nicolás, quien tuvo que adivinar la talla realmente.-Es cómoda?

-Sí.-Respondió Dominik, siendo honesto con el pequeño moreno.

-Bien, Jaime, ahora tú debes cambiarte de ropa, o bañarte bien, pero si sigues con esa ropa mojada te vas a enfermar.-Dijo el moreno con un tono demandante, causando que el señor Navarro lo observara.

-Está bien, mamá.-Dijo el enojón, provocando que el mafioso abriera un poco más los ojos y que Dominik riera.

-Oye! No soy... Jaime, no intentes evadir esta conversación!.-Dijo el pequeño moreno, viendo como su novio se iba rápidamente a su pieza, logrando que el moreno no lo siguiera en realidad, quedándose con su hijo.-No tiene respeto por nadie, no sigas sus pasos.

Dominik asintió, pero el moreno sabía que de alguna manera el primero en ser nombrado admiraba a su detective favorito. Y claramente no lo podía culpar, porque él mismo admiraba mucho a su novio, a lo que hacía y cómo era.

-Te gustó la ropa y el celular?.-Preguntó Nicolás, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Ya coloqué mi número y el de Jaime en el celular por si acaso.

-Me gustó la ropa.-Dijo Dominik, siendo sincero con el pequeño moreno.-Tendré que aprender cómo se usa un celular.

-Vas a aprender rápidamente.-Dijo el moreno, observándolo por un tiempo.-Eres inteligente.

-Recién me conoces, cómo podrías saber que...

-Por como actúas en diferentes situaciones.-Dijo el pequeño moreno, interrumpiéndolo y ya sabiendo a lo que se refería.-Eres diferente, Dom, y eso no es malo, lo entiendes, cierto?

Dominik se quedó quieto por un tiempo y asintió, originando que Nicolás lo volviera a admirar.

-Yo también soy diferente en ciertos sentidos, al igual que Jaime.-Dijo Nicolás, siendo honesto con él, teniendo en cuenta que su hijo le gustaba cuando hablaba del señor Navarro y de sí mismo.-Jaime es muy serio, aunque no lo has visto así, y yo a veces puedo ser muy... infantil y no debería serlo teniendo un trabajo bastante serio.

-En qué trabajas?.-Preguntó Dominik, ahora teniendo curiosidad.-Eres detective también?

-No, aunque se parece un poco.-Dijo el moreno, intentando pensar en qué podría decirle.-Yo tengo como una empresa y también tengo varias propiedades.

-Oh.-Dijo Dom, pareciendo sorprendido al saber eso.-Con razón pudiste comprar tantas cosas.

-El dinero, a este punto, no importa.-Dijo el pequeño moreno, con una pausa.-Me gustó comprarte cosas, así que si necesitas algo más, me lo pides.

Dominik se volvió a quedar quieto y lo abrazó, ocasionando que el moreno le correspondiera el gesto, bastante enternecido.