The Savior's Daughter

¿Me quieres?

Pov Hope
Habían pasado ya varias horas desde que el vómito no me dejaba en paz. Estuve un par de horas durmiendo pero la nauseas y dolor de cabeza me despertaron y el vómito no tardó en aparecer. Esto generalmente me pasaba después de las crisis por estrés; cada vez que devolvía el estómago, mes sentía más mareada y sin fuerzas. 

-¿Cómo estás Hope?-preguntó Verónica mientras revisaba el suero.

-He estado mejor-contesté sin ánimos

-¿Has vomitado?

-No ya no

-Que bueno, ya tiene veinte minutos de la última así que no creo que regrese. De todos formas, te traeré un medicamento y unas vitaminas para que te sientas mejor ¿ok?

–Sí, muchas gracias.

En ese momento entró a la recamara Amelia dejando a dos personas en la puerta.
-Hola Hope-dijo sentándose a mi lado.

–Hola–contesté con una voz algo débil

–¿Cómo te sientes?

–Mejor que hace unas horas–confesé–¿Ellos son mis padres?–

-Sí...pero si te sientes un poco débil, puedes descansar y después verlos. No tienes que presionarte...

-Está bien, ya me estoy sintiendo mucho mejor. Deja que pasen.

-Claro pequeña-dijo mientras le hacía unas señas a mis padres para que pasaran–los dejaré solos, si necesitan algo, estaré aquí afuera

–Claro–contestó la mujer rubia–gracias–parecía muy amigable. 

-Hola–dije con un poco de duda

-Hola...yo soy Emma y él es Killian-tartamudeo, haciendo que mi padre saliera de sus pensamientos

-Eres hermosa
-Gracias-creo que me sonroje un poco

-¿Podemos darte un abrazo?-preguntó Emma con un poco de duda

-Claro-dije mientras me sentaba en la cama.

Pude ver cómo lágrimas brotaban del rostro de Emma mientras que Killian me admiraba de pies a cabeza. Yo no sabía cómo reaccionar, nunca había sentido un abrazo tan sincero.
-Siento interrumpir–dijo el Doctor–Hope, los análisis que te hicimos hace un rato salieron muy bien pero aún así nos gustaría que te quedaras esta noche para poder tenerte en observación. Si todo sale bien, podrán irse en la mañana después de unos segundos análisis para que comprobemos que ya no estés deshidratada. Con permiso–en cuanto salió de la habitación, Amelia entró diciendo que necesitaba ayuda con el papeleo y la prueba de ADN. 
-Yo iré–contestó Killian saliendo del cuarto
-Y...¿Cómo te sientes?-preguntó mi madre mientras se limpiaba las lágrimas que habían corrido en sus mejillas
-Mucho mejor...-silencio incómodo- Y ¿Dónde viven?
-En Maine, por eso hemos tardado varias horas.
-Amelia me dijo que fui robada...¿es verdad?
-Sí, una vieja enemiga de tu padre te ha raptado el día de tu nacimiento...nunca dejamos de buscarte, hicimos todo lo que estaba en nuestras manos...y creo que dio frutos–concluyó–  ¿Sabes cuándo es tu cumpleaños?
-Eso creo...3 de agosto, fue el día que llegue al orfanato pero no sé si sea la correcta...
-Sí, sí lo es

–¿Quieres ver la televisión?

–Claro–Emma me extendió el mando y seleccione un canal que tenía algo de caricaturas.

Al cabo de unos minutos, Emma tuve que irse para lo de la prueba de ADN y Verónica me trajo algo para que cenara junto con las medicinas. En cuanto fue un poco más tarde, Emma y Killian me avisaron que irían a dormir a un motel que estaba cerca pero que regresarían por la mañana. Realmente la noche no fue muy buena ya que me despertaba cada tanto por las rondas de las enfermeras y porque el suero en mi mano me incomodaba. En cuanto amaneció, el Doctor Toby me hizo la prueba y en lo que tenían los resultados me trajeron el desayuno, en ese momento llegaron Emma y Killian así que me acompañaron el lo que terminaba. 

-Todo listo–entró Verónica–puedes irte pequeña pero debes de seguir hidratándote bien.
-Sí muchísimas gracias–realmente no me gustaban los hospitales. 

Al cabo de unos minutos pude salir con mis padres y nos subimos al auto, realmente estaba feliz de no tener que volver al sistema y tener una familia...mi familia.