𝑶𝒃𝒆𝒅𝒆𝒄𝒆[𝒀𝒖𝒓𝒊/𝑳𝒆𝒔𝒃𝒊𝒂𝒏]

《Miradas que matan》

☆Nueva York☆

-¡Por favor espera!- Insistió la mujer castaña nuevamente tratando de llegar a la menor, Stace no le quedaba claro que Candy le necesitaba lejos de ella para evitar "Cosas malas" Aunque aveces sentia un poco mal pero tenia que obedecer.

La hora marcaba las 7:05 PM lo que significaba que el tiempo escolar y tortura para unos alumnos habia terminado pero de igual manera el dia siguiente seria la misma rutina. Candy por suerte se encontraba Solá a punto de llegar a la puerta de salida, Sus amigos aun se encontraban adentro atendiendo unos compromisos que incluian el deporte.

-Stace baja la voz por favor- Murmuró entre dientes la menor pero no volteó hacia atras, Sabiendo que estaba atras suyo la sensual mujer, Escuchaba sus jadeos por el cansancio que le tomo correr desde el primer edificio hasta aproximarse a Candy.

-¡NO!- Tomó su hombro sorpresivamente y le obligó a mirarle, Su rostro impactaba un color rosado por la vergüenza que estaba presenciando, Los alumnos a su alrededor no cesaban de mirar el espectáculo entre ambas señoritas muy reconocidas en la escuela.

-Hay dios- Desvío la mirada otro lado, Pero le fue mala idea porque su mirada de oceano la conectó con otros estudiantes que admiraban la comprometedora ecena- Y-Ya basta Stace, Ella puede E-Estat Aqui.

-¡No me importa! Por favor no me expulses de tu vida, No me hagas hacer lo imposible- Stace se aferró a la menor como si fuera un objetó tan preciado y delicado de no quebrarle por su necesidad.

-N-No te estoy expulsando S-Stace, Solo que---

En un innesperado arranqué pero no violento se safo de la mayor dandole la espalda y hullendo literalmente de la escuela sin esperar a los caballeros que sin remordimiento alguno continuaban en su aula donde conversaban el cuando seria el próximo partido y planear las jugadas. Stace se resistió a perseguirle de nuevo; Pensó que si lo hacía arruinaria su imagen y reputación ante los demas. Ellos malpensarian su relación pero prácticamente es la realidad asi que no había por que negarse.

-¿Otra vez acosando a la niña Stace?- Escucho burlonamente al lado suyo, Su mejor amiga le habia visto para su mala suerte.

-No la estoy acosando- Trató de sonar lo mas creíble posible cruzandose de brazos y soltar una risa fingida.

-¿Que es lo que te sucede chica?- Pregunto otro miembro del grupo donde Stace solía juntarse normalmente, Miro de reojo a sus lados y cayó en cuenta que el grupo de 9 personas si habian apreciado tal ecena dramática.

-Nada.

-Como puedes decir eso si escuchamos, Bueno toda la estupida escuela escucho que no querías que te "Expulsara de su vida"- Trago saliva al escuchar la observación de otro, Ya no tenía escapatoria o al menos no tenia escapatoria cuando valla a parar a prisión por acoso a menor.

-Es que yo, ¡Estoy ebria amigos mios!- Volteó a mirar a sus amigos mal influenciados ganandose risas por la tonteria que acababa de decir intercambiando miradas dudando un poco, Stace tambien comenzó a reir para hacer mas creíble la insólita mentira.

-¿Y para desahogarte lo haces con Candy Esther? ¿Aqui en la escuela con estos corruptos? ¿Cuándo bebiste que no invitaste? Te pasas MCurdy- Uno apuntó a la salida señalando el lugar por donde la mencionada habia huido, Mientras fruncia el seño por las demas preguntas que habia hecho sin pensar.