7. Trémulos

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Me robaste mi primer beso una tarde de invierno

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Me robaste mi primer beso una tarde de invierno. Tus labios eran suaves, frágiles, amargos. Sin duda bellos, lo mejor que había sentido en mí joven vida; y vacíos, secos de emoción.

—¿También te gusta la música tanto como a mí?— preguntaba Nino entusiasmado a Luka en camino a casa de Adrien

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—¿También te gusta la música tanto como a mí?— preguntaba Nino entusiasmado a Luka en camino a casa de Adrien.

—No lo sé. Quizás. Desde que deje de tocar guitarra he dejado de escucharla con la misma frecuencia.— comentó tranquilo y poco interesado en la conversación.

—¡¿Y por qué lo dejaste?!— exclamó preocupado el moreno.

—Es una corta y aburrida historia como para contarlo.— dijo con simpleza. Nino alzó una ceja algo confundido por el comportamiento del chico pero supuso que lo mejor era no seguir insistiendo. Alzó la mirada pensando un nuevo tema de conversación.

—Me alegra que hayas aceptado salir con Adrien y yo. En serio, presiento que serás un gran sujeto para llevarse.— decía con una gran sonrisa. Luka respondió su cumplido con una sonrisa.

—Depende de mi humor.— se limitó a decir. Las mentiras no iban a ser su primer recurso para manipularlos.

"Y tengo un ánimo del asco." Pensó sin dejar de observar la pulsera del chico.

Al fin el par de franceses llegaron a la puerta de la Mansión Agreste. Luka tenía que admitirlo, jamás se dejaba de asombrar con la majestuosidad del edificio. Era excesivamente grande para la cantidad de habitantes que tenía. Perfecta. Por ahora sólo se dedicaba a contemplar el enorme patio.

—Disculpe, señorita Nathalie ¿Puede decirle a Adrien que ya llegamos por él?— decía nervioso el moreno a través de la radio en una de las columnas de la entrada.

—Mejor retírense. El señor Agreste no le ha dado permiso.— se escuchó decir a la femina. Tras lo dicho Nino soltó un bufido molesto por no haber podido ver a su mejor amigo. Luka sonreía divertido viendo las actitudes del moreno. Sí, era simpático.

—¿Podemos pasar? Quiero intentar convencerlo.— miró con una sonrisa juguetona hacia la cámara que estaba arriba del radio.— Me parece de mala clase rechazar a los invitados así, y más cuando se pueden tener temas importantes de conversación, como una salida.— tiraba con cierto tono retador.

His name is LukaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora