PROHIBIDO ▪2 Temporada▪

▪Capítulo 30▪ [Narrado]

Victoria Rivero.

El desfile ya había terminado, pero el evento seguía con tragos y bocados.
Al terminar de modelar, todas nos fuimos a cambiarnos y arreglarnos para estar presentes después del show.
Había mucha gente, críticos de la moda, famosos y conocidos.
Busqué con la mirada a Candelaria pero me la encontré hablando muy entretenida con los presentes, así que decidí no molestar.

-Estabas muy linda..- escuché atrás mío, así que me di vuelta. Sonreí al ver a Gian con una copa de vino, creo, en su mano.

-Gracias, vos también estabas lindo ahí sentado -bromeé.

-Estoy acostumbrado- rió.

-Perdón por lo de hoy, no tengo que hablar tanto cuando no te importa -me disculpé.

-¿Cómo no me va a importar?

-Pero no te cae muy bien Paulo..

-Ah pero no tiene nada que ver, vos sí me importás- sonrió de lado.

Sonreí y miré para los costados. Sé que, en un lugar lleno así, alguien se va a dar cuenta de que acá hay algo, quiera o no.

En eso, Paulo pasó a nuestro lado y, como miró sin querer, se vio obligado a saludar. A mí sólo me dijo 'hola', a Gian le ofreció su mano. Fue demasiado incómodo, por suerte siguió su camino.
Y sí, una parte de mí esperaba que diga algo.

-No le prestes atención -me aconsejó Gian.- Estás en tu trabajo y tenés que estar feliz.

-Está difícil..

Gian llevó sus dedos a mís comisiras y las levantó formando una sonrisa en mí.

-Ahí -dijo.

Suspiré y lo miré. Lo analicé y, aunque no quiera, me vi en una situación de deseo impresionante.
Capaz estoy delirando solamente.

-Gian.. -llamé su atención.

-¿Qué?

Di un paso más hacia él para no decir lo que quería decir en voz alta.

-Sí estoy mal, pero no puedo evitar esto.. -hice un gesto entre nosotros dos.- No quiero confundir las cosas pero es la verdad.

Me sentí bien porque estoy haciendo algo que me hace sentir libre, decir lo que me está pasando y que el otro no me juzge, o al menos no me haga sentir juzgada.
Gianluca sonrió.

-Creo que puedo soportar ir poco a poco -dijo.

-Vení..

No le di la mano porque no sería tan obvia, pero hice que me siga por los pasillos ya deshabitadas del lugar del evento. Entramos al que fue mí camerín, y aseguré la puerta.

-Apa, sos rebelde -bromeó.

-No me hagas arrepentir -lo señalé con un dedo.

-Noo, conmigo no te vas a arrepentir -dijo muy seguro de sí mismo, en el mismo movimiento en que tomó mí cara y se atrevió a besarme. No niego que sí lo esperaba.

Me acomodé a su beso, a la velocidad y a la sensación. Llevé mís manos a su nuca y entrelacé mis dedos en su pelo.
Gian bajó sus manos por mí pecho hasta llevarlas y dejarlas en mí cola.
Mordí su labio con fuerza y sonreí ante su gemido de dolor. Por Dios. Sí tenía ganas.

Caminé hacia atrás sin despegarme de él y chocamos con la puerta. Gian me presionó con su cuerpo mientras el beso seguía con la misma intensidad.
Sentí la mano de Gian subir por mí espalda cuando la imagen de Paulo se cruza por mi mente. Separé a Gian rápidamente y al instante me sentí una tarada.

-Perdón -me tiré el pelo para atrás.

-¿Qué paso?- preguntó con sus labios hinchados.

-La culpa.

-Vicky, estás sola, sos libre de hacer lo que tenés ganas de hacer -explicó.

-Pero eso no evita que me sienta culpable..

-¿Por qué?¿Por lo que pueda decir Paulo?¿Que sabés vos si él no está haciendo lo mismo? -dijo. Su pregunta me descolocó.

-No sé..

Gian resopló y, con su pulgar, me acarició una mejilla. No dijo nada.

-¿No me odiás, no? -pregunté.

-Obvio que no -rió.

-Perdón otra vez.

-Basta de pedir perdón, Victoria!- me retó.- Yo te entiendo.

-Gracias.

-Pero vos entendeme a mí si te digo que quiero otro beso -sonrió.

Su actitud y la notable atracción que tengo me hicieron volver a aceptar su boca.

[...]

Paulo Dybala.

Saludé a Victoria y a Gian, quien estaba hablando con ella muy cómodamente. No sé qué onda entre ellos, pero sí que se tienen confianza.
Me alejé de ellos incómodo al no saber que hacer, por más que muera de ganas de estar un ratito con ella.

Me acerqué a Cande una vez que vi que se desocupó.

-¿Y esa cara de culo?- preguntó.

-Lo tengo montado en un huevo -me quejé.

-¿A Gian?- preguntó y yo asentí.- Y bue, según Mariah él está muy interesado en ella.

-¿Y ella?

-Sinceramente no creo que te haya superado, bah, es obvio que no. -comentó.

-¿Por qué?

-Ay, Paulo, sos tarado?- rió.- Te adora.

-Pero me dejó- contesté.

-Y obvio que te iba a dejar!

-Gracias..

-Perdón pero es la verdad..-dijo.- No es el mejor momento para este tema pero, Paulo, no supiste cuidarla ni un poquito.

-Odio que tengas razón.

Candelaria miró hacia todo el lugar e hizo una mueca. Yo seguí su mirada pero no encontré nada.

-¿Estás bien vos?- reí.

-Sí.. -dijo nerviosa.

-Parece que viste un fantasma.

Candelaria suspiró y señaló algo con su mentón. Miré y vi a Victoria de la mano de Gian, venían desde adentro, lugar donde supongo que estaban solos. Gian me vio y se apretó el labio de abajo, claro signo de que sí, lo tiene hinchado.
El corazón se me paró por un segundo.

-Perdón -escuché decir a Cande.

Capaz soy un celoso de mierda, pero no pude evitarlo. Tenía que ir con Victoria y hacer que se aleje de ese tipo.

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C O M E N T E N !!!
Hice este capítulo largo y bastaaaante entretenido, no digan que no, porque se lo merecen ❤ Porque comentan un montón y son re presentes y bueno. Se lo merecían 😏👯 Disfruten y opinen, y les pido una ayuda, si conocen canciones de amor/desamor lindas que puedan servir en esta fic o en algunas de las otras les agradecería muuucho que me las digan ❤❤❤