PROHIBIDO ▪2 Temporada▪

-Capítulo 72- [Narrado]

7 de noviembre de 2018.

Victoria Rivero.

Me encontraba en New York para festejar el cumpleaños de Mariah. Y también había mucha gente más, entre ellos estaban Candelaria, Sebastián, que al fin volvieron a estar juntos, la familia de Mariah, y eso incluye también a Gianluca.
Faltaban Neymar y Paulo. Neymar y Mariah no andan muy bien que digamos, y Paulo tenía que jugar con la selección, así que vine sola.

–Bueno Mariah, como todos los años... te toca hablar –rió Carlos, una vez que Mariah sopló la vela.

–Sí sí –respondió Mariah con una sonrisa en su rostro y suspiró– Ay ya quiero llorar –rió– Bueno ¿Qué decirles a ustedes? Son mi todo, aunque falte la mayoría de mi familia, doy gracias a Dios por ponerme a cada uno de ustedes en mi camino, por haberme soportado desde siempre y sobre todo en este último tiempo que anduve re maricona sentimentalmente, pero nada –sonrió de lado– Este es un año más en el que mis dos ángeles no están pero sé que deben estar orgullosos de lo que mi hermano y yo estamos logrando

–Te amo bebé de la tía

Dijo Natalia al ver que Mariah había terminado, ambas se dieron un fuerte abrazo y era algo emocionante. Desde que Mariah perdió a sus papás a los doce años, Natalia y Diego se hicieron cargo de ella y Román, fue un proceso largo y duro para ambos el aceptar que sus papás ya no están más, pero con ayuda psicológica y el amor del resto de la familia, pudieron salir adelante.

–A alguien hay que cambiarle el pañal –dije meciendo a Salvador– Las cosas están en  tu pieza, no?

–Sí –respondió Cande– ¿Vas a practicar? –preguntó con una corta risa.

– Ay no me jodas-me puse un poco a la defensiva, y reí un poco.- Si lo habré cambiado a este chancho un montón de veces.

Noté la mirada de Gialuca puesta en mí, y fue algo incómodo.
Por un lado me alegro de que no esté Paulo acá porque sé que sería el triple de incómodo de lo que ya es.

Fui a la habitación donde se estaban quedando Cande y Sebas y cambié a Salvador. La verdad es que no se me da nada mal cambiar pañales.
Salvador rió cuando le pasé la toallita húmeda por la colita, y esa risa me provocó una ternura que no había sentido hasta ahora al mirarlo.
Me mordí el labio intentando esconder una sonrisa, tal vez sí tengo instinto materno ahora.

Terminé de dejar limpito a mí ahijado y volví a donde estaban los demás, llevándome otra vez un incómodo momento.

-¿Y vos, Vicky?- preguntó el papá de Cande.- ¿Para cuándo el mini Dybala?

¿A qué se debe esta pregunta?
Gian me miró, claramente, y escuché la risita de Candelaria. La odio.

-Vicky! No te mostré el mensaje que me mandó Cristian - dijo Mariah salvándome. A ella la amo.

[...]

Esa misma noche estaba tirada en la cama muy inquieta. Paulo me había mandado un mensaje de buenas noches y ya se había ido a dormir.
Había algo en esa habitación que me estaba inquietando. Exactamente estaba dentro de mí cartera.

Intenté calmarme y respirar repetidas veces pero eso no funcionó.
Suspiré con pesadez y me levanté.
Me puse mís pantuflas y salí de mí habitación en busca de Candelaria y Mariah. Las necesitaba.

Toqué la puerta de Candelaria primero, porque estaba más cerca. Tardó un rato en abrir, más o menos lo que se tarda en volver a vestirse cuando estás acostada con tu novio.

-¿Qué querés?- preguntó.- ¿Para esto querías que vuelva con Seba?¿Para cortarme el mambo?- ironizó.

-Me pregunto lo mismo - dijo Sebastián desde adentro.

-Callense los dos y vení conmigo -le supliqué a Cande con la mirada.

-¿Pasó algo?

-Vos vení!

Prácticamente la arrastré hasta que llegamos a la puerta de Mariah. Ella sí que abrió rápido... Y dormida.

-¿Qué?- bostezó.-¿Ya es de día?

-Uh hoy están más boludas que de costumbre - bromeé.- Vengan conmigo.

Las dos me acompañaron hasta mí pieza y yo cerré la puerta una vez que entramos las tres.

-Espero que sea importante -bostezó nuevamente Mariah.

-Te apuesto un euro que es porque extraña a Paulo - ironizó la mamá de Salvador.

-Eh, no. Sí es importante, y también lo extraño pero no viene al caso. -expliqué.

-¿Entonces? Hablá de una vez - me apuró Mariah.

Agarré mí bolso y saqué de él lo que tanto me tenía como loca.

-Wow -dijo Candelaria.- Yo sí que sé lo que es esto ahre

-Ayudenme - supliqué.

-Bueno, Vicky, es hora de que hagas pipí - comentó Mariah.

Candelaria agarró el test en sus manos y me obligó a agarrarlo.

-Si no lo hacés, nunca vas a saber...

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Lo sé, lo sé.. Me tardé pero el capítulo vale la pena amigas ❤ Opinennnn porque se terminaaaa !!