Sentencia de amor.

Luna de miel.

—¡No te acerques!—lo empujo y corro a la habitación en la cual me encierro.

—Sol, abre la puerta—hablo queriéndola abrir, tono es grave, duro y ronco.

—¡No! ¡Deja me sola! ¡No me acostare contigo nunca, no te conozco ni quiero hacerlo, y en cuanto antes quiero  divorciarme de ti!— mis ojos se cristalizaron.

No lo conocía, sabia muy poco de el, me case a la fuerza y me quede sola en el mundo, no me acostaría con el, aunque me guste. De tan sola recordar como el me tocaba -me dan ganas de matarlo- En las noches mi padre se metía a mi habitación y me tocaba, a su propia hija la intento violar cosa que mi hermano detuvo, el me salvo por eso mi padre lo corrió y aunque mi padre ya no intentara tocarme eso no cambiaba las cosas.

—¡Sol, tu no te divorciarás de mi!¡Eres mía y siempre lo serás,tarde que temprano lo aras conmigo por qué eres mi esposa!— gritó— ¡ahora preparate que perderemos el avión a cancún, no me hagas derribar la maldita puerta, mujer!_ la patio y se fue.

No quiero ir a ningún lugar con el sólo quiero ver a tom, mi tom.
Tom era mi mejor amigo desde hace cinco años, aunque desde hace un año no lo he visto ya que el se fue de viaje y no supe nada de el.

Alex:

Cuando Sol me rechazo me sentí furioso, yo solo la quería a ella y tarde que temprano la aria mía, pero no la quería forzar, solo quiero que ella me ame.

Baje por las llaves de la habitación, ya que ella solo estaba haciendo berrinche y el avión salia en una hora, el avión que nos llevaría a la luna de miel, ahí la aria mía si o si.

Al abrir la puerta me sorprendí, Sol estaba sentada en un rincón llorando, abrazando sus hermosas piernas, su cabello se veía despeinado y sus pequeñas manos estaban sobre la pulsera, la misma pulsera que ayude a elegir a su hermano aquel día.

—No me hagas daño por favor, te juro que sere buena, te lo juro, no volverá a suceder are lo qje quieras— hablo poniendo las manos para detenerme. Claro que no ka golpearía, pero el echo que ella estuviera así de rota y con miedo me enojó, no con ella si no con su maldito padre, el cual se encargo de romperla.

—Sol, no te are daño,si no quieres esta bien, hay que conocernos, pero no vuelvas a pensar que te golpearé, por que eso nunca pasará y mucho menos el divorcio— la levante y la abrace

—¡Te odio! Te odio a ti! Por comprarme odio a mi padre por todo lo que me hizo y odio a Sal por abandonar me!— me alejo y cruzo los brazos abrazándose a su misma.

—Sol, lo siento. Tu padre no volverá a tocarte eso ten lo por seguro, yo te cuidare lo prometo.— la abracé de nuevo, ahora no se resistió solo me abrazo fuerte y siguio llorando. Ya que se calmo, nos dirijimos al aeropuerto a tomar el vuelo asia cancún.

Al llegar a la habitación Sol estaba tan feliz que eso me hacia a mi aun mas feliz, la abrace por detrás y le di un cálido beso en la mejilla

—Es precioso gracias—hablo la chica hermosa delante de mi maravillada

—Eso y mas te mereces muñeca— Sonreí ladino

Nos dirijimos a la alberca ya de tarde, se veía tan hermosa y tan deseable con ese biquini que le quedaba como guante. Pero alguien arruino la tarde

Se acerco un chico de mi misma confección pero este tenía los ojos grises, al ver a Sol, mi Sol la abrazo y la giro le dio muchos besos en la cara y rieron juntos.

Lo cual hizo que me hirviera ma sangre del enojo.

—¡¡Muñeca!! ¡¡Mi Sol!¿ Como estas?¡ Hace cuanto! ¡Estas mas hermosa que nunca que haces aquí preciosa!—hablo el pelinegro tomándola de la cintura

—¡Tom! ¡Te extrañe mucho! ¡Gracias! Vengó con—la interrumpi , la jale hacía mi tomándola de cintura.

—Viene conmigo— Sonreí hipócrita

—¿Quien es el muñeca?—hablo el pelinegro confundido

—Soy su esposo—hable victorioso.

—¿¡Tu que!?—Abre los ojos como platos.

—Tom, el es Alex, mi esposo—dijo Sol cabizbaja

—¿Por que te casaste? Te dije que yo iría por ti!—dijo el pelinegro con furia

—Yo no, me case por qué— la cortó.

—Nos amamos así que no te metas—lo mire serio

—Quiero que ella me lo diga, ¿y Sal?¿Esta de acuerdo con esto?,¿haz hablado con el?— preguntó

—No nos amamos, me case por mi padre, tom— dijo ella soltándose de mi agarre— y Sal murió, nunca volvió por mí, mi padre me vendió —tom me da un puñetazo haciéndome reaccionar peor.

—¡Maldito infeliz!¡ Ella es mía idiota, crees que me la robaras así como así!— cuando le di un golpe en la nariz a tom, Sol, sus ojos se veía la preocupación, pero ella es mía así que no importa.

—¡Muy tarde idiota!¡Ella es mi esposa y es nuestra luna de miel , la are mía y no puedes hacer nada al respecto!— le grite, carge a Sol en mi hombro y me la lleve a la habitación

—¡Alex qué te pasa!¡Sueltame el es mi amigo!¡Dejame hablar con el!—suplicó

—¡No quiero que lo vuelvas a ver!¡Oíste, si se te vuelve a acercar te lo juro que lo mato Sol!— golpeo la pared de la frustración.

—¡No me puedes prohibir nada!— habló con los ojos cristalizados

—¡Claro que puedo!— grité

—¡¡Te odio!!—grito esta, salió corriendo de la habitación emoujandome.

—¡Sol ven acá!¡ Ven acá maldita sea!—desapareció de mi vista y me puse a tomar, estaba tan enojado y encelado que no sabia de que era capaz.