Capítulo 14. (Extra 3)

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Calum Hood era el único estudiante que se sentaba en la última fila hasta el último asiento. Donde era casi imposible adivinar lo que la pizarra decía, donde no se escuchaba con claridad las palabras de la profesora.

Y más en aquella clase de Literatura, la profesora Danielle Shepard lo había colocado ahí.

-Las mentiras son deplorables, joven Hood- dijo ella aquel día que lo ubicó en ese asiento.

Calum evitaba soltar lágrimas, de impotencia, de frustración, creyó ingenuamente que contárselo a la profesora de literatura, que por un tiempo también había sido orientadora, le ayudaría, le creería. Pero no fue así.

Por supuesto que había hecho las investigaciones correspondientes, pero por alguna razón, John se encargó de que nadie le creyera a Calum.

La clase de ese día había concluido y ningún apunte tenía en su cuaderno, ninguna actividad.

-Espero que esto le enseñé a no decir mentiras- mencionó la profesora cuando Calum estaba por salir de aquella aula. Había sido la última clase del día y prefirió correr a los baños a liberar el llanto, pues no quería que su hermana lo viera de esa forma.

«Nos vemos por la tarde, te tengo una sorpresa» fue el mensaje que Mali le mandó por la mañana. Calum no estaba para sorpresas en ese momento.

⚜⚜⚜

Ashton estaba nervioso, Mali lo había convencido de que era una buena idea ir por su hermano, no era correcto, no lo sentía así, porque ni siquiera eran amigos, no como tal.

Sí, había conseguido el número de Calum, sí, lo había ayudado a respirar cuando tenía una crisis.

Ashton no sabía por qué aquella profesora odiaba a Calum, según lo que Mali le contó, esa profesora tenía un severo problema con los hombres y no en general, "los raritos" y Ashton supo a qué se refería.

Esperó el tiempo necesario, hasta que vio como unos tipos tomaban a alguien y lo llevaban a otro lugar, pronto los demás se comenzaban a acercar para ver lo que sucedía y Ashton no fue la excepción.

Gritos e insultos se escuchaban, Ashton era un poco más alto que los que estaban ahí, pero aun así tuvo que mover el cuerpo de unos cuantos para ver mejor. El coraje lo inundó cuando se dio cuenta de que era a Calum a quien tenían acorralado.

Empujo a los que fueron necesarios para llegar a defenderlo.

-¿Creíste que te haría caso? Ella es mi tía, estúpido, no le creería a alguien como tú- decía un chico rubio poco más alto que Calum, pero no tanto como Ashton, algunos de sus amigos reían y grababan la expresión de Calum, que no faltaba mucho para que comenzara a tener una de esas tantas crisis-. Entiende que...

John no terminó la frase, porque Ashton lo tomó del hombro separándolo del cuerpo de Calum y soltándole un golpe en el rostro, aunque Ashton no había aplicado la fuerza suficiente como para noquearlo, si provocó que John llegará al suelo.

Ashton ignoró a los demás, que no se atrevieron a atacarlo, retrocedieron, sin dejar de grabar.

-¿Estás bien?- murmuró a Calum, asintió débilmente, sorprendido.

John se puso de pie, dispuesto a defenderse, pero las manos de Ashton fueron más rápidas, tomando el cuello del suéter a John y estampándolo contra la pared.

-Por tu bien, no lo volverás a tocar... Y si no quieres otro golpe en ese rostro, no dirás nada de lo ocurrido- Ashton era un hombre de pocas palabras cuando estaba enojado, así que no esperó respuesta del tal John, porque no la había, el chico estaba asustado al ver en los ojos de Ashton el coraje.

En cuanto Ashton lo soltó, fue con Calum.

-Tu hermana dijo que era buena idea- medio sonrió. Toda esa valentía que tenía frente a los otros se evaporaba con sólo estar cerca de Calum.

-Se lo agradeceré toda la vida- contestó Calum sonrojado.

Caminaron hombro con hombro hacia la casa de Calum, platicando de otras cosas, a Ashton le encantaba escuchar esa voz más animada.

Fue en ese momento cuando Calum supo que amaría como fuese a Ashton, no era un enamoramiento fugaz.

Quién estuviera dispuesto a defenderlo de esa forma, se merecía amarlo.

La mayoría de las veces, era Ashton quién pensaba en Calum antes de dormir, pero esa vez fue diferente, Calum daba vueltas en su cama tratando de dormir, pero a su mente sólo llegaba el recuerdo de Ashton ese día, defendiéndolo.

Fue la primera vez que suspiró realmente por alguien. Estaría para él en lo que necesitara.

Y así fue, durante los siguientes meses se ofrecieron una amistad, que pronto se convertiría en una relación.

Se apoyaron, se defendieron, se animaron cuando sentían que nada tenía sentido, en fin, se amaron.

Y se seguirían amando.

Algunas cosas nunca cambian, y el amor que se tenían, era una de ellas.













Want You Back ✨ Cashton ✨Where stories live. Discover now