Silver spoon (Yoonmin, Vkook Y Namjin)

Que curioso

    A pesar del tranquilo silencio que en la habitación reinaba Jimin no podía dormir. Desde lo sucedido el día de la bienvenida del director cada vez que cerraba los ojos podía ver y hasta sentir el hierro quemarle la piel que yacía casi curada. Podía oír sus tortuosos gritos de dolor y ver la cara de satisfacción de la nefasta mujer que lo dejó marcado de por vida.

    Desde entonces, esa era su rutina. Dar vueltas en la cama, luego observar a Nina dormir a ver si le entraba sueño y al no conseguirlo se levantaba en silencio para dirigirse a la cama de Yoongi y adentrarse en las sabanas sin despertarlo. Solo que esta vez, sí lo hizo.

- ¿Jimin?.- dijo entre dormido y despierto el dueño de la cama. Se acomodaba mejor para darle mas espacio al intruso.- ¿No puedes dormir de nuevo?.

-No...yo...solo tengo frío y estas sábanas son muy delgadas.- dijo como excusa. Siempre era así. Cuando Yoongi en las mañanas despertaba con el a su lado y le preguntaba si le sucedía algo, el menor siempre inventaba algo diferente. Lo que menos quería era parecer débil o llorón, ya no quería serlo. Quería probarse a sí mismo que podía ser fuerte.

-De acuerdo...- Yoongi lo miró con duda. Sabía que le sucedía algo, que le estaba ocultando algo pero no quería presionarlo después de lo que pasó. Entendía que debía sentirse indefenso a veces y por eso no insistía.- Acércate más.- Esta siempre era su parte favorita. Cuando Yoongi, inconscientemente y en su profundo sueño lo acercaba hacia sí mismo en un acogedor abrazo y el que esta vez lo hiciera estando despierto lo hacía todo aún mejor. 

- Yoongi....- Lo llamó Jimin de nuevo. Su voz sonando amortiguada al tener su rostro metido en el cuello del mayor. Recibió un leve gesto en respuesta y continuó.- ¿Cuando salgamos de aquí...que será de nosotros?

-¿A que te refieres? .- Claro que lo sabía. Era claro que cuando lo hicieran tendrían caminos separados. Ambos eran incluso de ciudades diferentes. El silencio fue su única respuesta, Jimin se quedó en silencio y al comprobar la suavidad de su respiración comprobó que se había quedado dormido.- No quiero pensar en eso aún.

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    Para los próximos días, los intentos de Jungkook por entablar una mínima conversación con Taehyung eran fallidos. El muchacho ni siquiera dirigía su mirada a el. Lo trataba como si no existiera. Y eso era lo que mas le dolía. Saber que no pudo depositar un poco de confianza en el a pesar de que se la pidió lo hizo sentir culpable. Pero en realidad, ¿Realmente era su culpa?. Todas las pruebas estaban en su contra, era inevitable pensar así. Si Tae estuviera en su lugar ¿no hubiera reaccionado de la misma manera?. La respuesta lo hizo sentir aún peor.

     Llevaba aproximadamente media hora vagando por las instalaciones. Tenía ese período libre y realmente no tenía ánimos para volver a la habitación y encontrarse con la ausencia del causante de su miseria. Quien, al parecer, invocado por sus pensamientos, cruzó por el pasillo frente a el.

   Sus pies se movieron por su cuenta para tratar de alcanzarlo. No estaba pensando en nada realmente, solo quería hablar con el. Quería dejar varios puntos claro en cuanto a lo sucedido en los últimos días y lo que sea que hubo entre ellos antes de eso. Cuando lo alcanzo tiró de su camisa para detenerlo y este solo lo miro sin expresión.

– ¿Se te ofrece algo?.– su tono de voz era tan nimio y frío que le causó mas dolor. No pensaba rendirse tan fácil de todos modos, así que lo intentaría una y otra vez.

– Tae, por favor, quiero que hablemos. Que hablemos de verdad.– la duda en la mirada del pelinaranja le otorgo un poco de esperanza. Tenia fe en que esta vez si pudieran conversar.– Necesitamos hablar sobre lo que estaba pasando entre nosotros. Se que debí confiar en ti y otorgarte al menos el beneficio de la duda. Pero estaba demasiado frustrado y...–