Isla De Sirenas

🌊4. Como pez fuera del agua🌊

Marina

Las paredes de aquella cueva luminosa, es decir, “edificio” eran tan translúcidas que se podía ver a través de ellas los peces nadando como si estuvieran en el mar. Era definitivamente el océano en la tierra.

—Vamos, vamos deben estar por aquí —escuché decir a un grupo de humanos vestidos de azul.

Pasaron corriendo por el pasillo mientras hablaban, creo que son los centinelas, guardianes o policía como les dicen los humanos.
En resumen se encargan de mantener el orden aunque pensé que hacían mucho alboroto en ese modo. No sabía lo que pasaba pero supuse que hubo algún problema.

Lee Shin

Les dije que no levantaran sospechas; pero ahora había medio millón de reporteros preguntándose que pasa y si es algo serio.

—¿Hay noticias? —pregunté impaciente al el sujeto de seguridad, pero este solo ladeo la cabeza sin saber que decir.

—Aún nada —respondió temeroso por mi reacción.

Es suficiente lo haré por mi cuenta, me levanté para salir a buscar información de lo que ocurrió.
Una vez en la sala de seguridad pedí ver la cámara del pasillo del supuesto robo, no sé porque pero pienso que algo interesante estaba por suceder.

Muchas veces he escuchado de casos donde no ocurre ningún robo y todo es armado para generar problemas con falsos rumores. Y si me enteraba de que eso fue lo que sucedió, no perdonaría a quien lo planeó.

—Es aquí, esta es la sala donde ocurrió el robo —señaló al monitor mostrando lo que la cámara había captado.

Efectivamente hubo un robo, pero con muchas personas cerca no se podía señalar culpables con certeza, aún así se veía el momento exacto cuando el tridente desapareció.

—¿Hace cuánto fue? —pregunté.

—Casi una hora, probablemente cuarentena y cinco minutos.

Calculé la distancia de esa sala con la salida, teniendo en cuenta que los caminos estaban abarrotados de gente. No debían estar lejos, aún había tiempo así que salí con rumbo a los pasillos del norte.

🌊🌊🌊

Marina había encontrado a las líderes y las observaba, desde lejos logró ver que llevaban algo cubierto en una manta, se pregunto si tendría que ver con el artefacto perdido que mencionaron antes.

—¡Alto allí! —se escuchó un grito.

Eran los hombres de traje azul,  se dirigen a las líderes, ella entró en pánico por temor a que la notarán ya que de ser así se metería problemas;  pero aún tenía dudas ¿Por qué los humanos buscan a las líderes?
Se propuso salir del lugar para no levantar sospechas, era su oportunidad para esconderse y escapar; sin embargo la suerte no estaba de su lado, en ese instante su ropa rozó el mantel de una mesa de buffet tirando todo lo que había al suelo, los policías también tropezaron con la comida que cayó.
Todo se convirtió en un desastre en sólo un minuto.

Bien hecho mala suerte, de nuevo me ganaste la partida—pensó Marina.

Por otro lado las líderes no la vieron y ahora podía regresar al océano sin preocupaciones.

—¡Tú espera! —alguien la detuvo.

Fingió no oírlo y siguió caminando cuando el chico se acercó y tomó su mano para voltearla hacia él e impedir que se vaya.

—¡Dije que esperes! —repitió haciéndola retroceder hacia él.

Otra vez su corazón se aceleró, era él a quien había visto en la pantalla de cristal. Y era mucho más lindo de lo que jamás hubiera podido imaginar; pero algo estaba mal su mirada parecía ser de enojo y desesperación.

Continuará…