capítulo 5

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Despertar con el enemigo.

La noche anterior Jimin se durmió después de limpiar algunas lágrimas traicioneras que rodaron por sus mejillas, claro que según el rubio, las lágrimas no eran por Jeon, solo que saber que Jungkook tenía un amante le recordó que su relación con Yoongi termino por una infidelidad.

Y el imbécil de Jeon era un descarado al negar que "su niño" no era su amante, también te extraño, besos muchos besos, eso solo se le dice una persona que realmente es importante, Jimin no era ingenuo ni mucho menos un bobo, Jeon tenía a alguien más en su vida, estúpido Jeon mil veces estúpidos, con ese pensamiento logro caer en los brazos de Morfeo.

Despertar fue diferente a todos los días, Jimin ni siquiera se molestó en abrir los ojos, se sentía cómodo y muy cálido, una respiración calmada golpeaba su nuca, tenía un brazo fuerte que le rodeaba su cintura, y otro debajo de su cabeza haciendo de almohada, su espalda estaba contra un cálido y desnudo pecho haciéndolo sentir protegido, Jimin se apegó más al cuerpo a su lado con el que hacia cucharita buscando más calor pero....

La Boda...

La noche anterior...

El amante de Jeon...

Jimin estaba casado con Jeon Jungkook y quien estaba durmiendo a su lado era ese maldito, ¡Estaba haciendo cucharita el idiota de su peor enemigo! ¡Ese imbécil no respeto el muro de almohadas! Fue en lo primero que pensó.

Con un chillido para nada varonil salió de los brazos de Jeon de forma brusca, haciendo despertar a Jungkook.

- ¡Mierda enano! ¿Qué te pasa? -pregunto Jungkook aturdido y con voz ronca por el sueño.

- ¡Jungkook eres un estúpido! No respetaste el muro de almohadas te dije que no lo cruzaras y tu... tú me abrazaste como si... como si fuera tu jodido oso de peluche -se quejó indignado.

Jeon entrecerró los ojos acostumbrándose a la luz que se colaba por la ventana - ¿Yo soy estúpido? Tu eres un enano mal agradecido estabas temblando de frio anoche, por eso te abrace debí dejar que sufrieras hipotermia- se justificó Jungkook con un poco de burla en su voz.

Jimin lo miro con el ceño fruncido Jungkook no tenía camisa puesta, el infeliz tenía el abdomen tonificado, esos cuadritos... los ojos de Jimin se quedaron pegados en la V que se perdía en la cinturilla de los pantalones de chándal negro de Jeon.

-Yo no tenía frio -Chillo- ¿acaso no tienes un maldita camisa de pijama?- Gruño obligándose a desviar su mirada las de las sensuales abdominales de Jungkook

-Da gracias que use el pantalón de pijama suelo dormir sin nada -ronroneo Jungkook con una sonrisa de suficiencia- Aunque te daría una gran vista para disfrutar - Jungkook se acomodó boca arriba con ambos brazos detrás de su cabeza para irritar más a Jimin, que ya lo estaba fulminando con la mirada - puedes mirar todo lo que quieras somos esposos una sola carne -arqueo una ceja.

Jimin respondió de la manera más educada posible con un grito-¡¡una sola carne tu culo!! Sal de mi habitación Jungkook-

Jungkook solo sonrió, nada impresionado por el vocabulario de su esposo pues así se habían tratado los últimos años -Nuestra habitación -se atrevió a corregir-somos esposos Jimin y no pienso salir-

-Eres.... Eres... Un... ¡Ah! -Chillo Jimin frustrado sin saber que otro insulto decirle pues los había agotado todos, tomo una almohada y se la lanzo a Jeon en la cara, y este solo soltó una típica carcajada.

- Esa no es la forma de tratar a tu esposo Jiminnie, es nuestro primer día de casados- Jungkook amaba hacer enojar a Jimin.

- ¡Jodete! -le grito saliendo de la habitación con un poco de ropa en sus manos estrello la puerta al cerrarla.

Jeon se quedó mirando la puerta por donde salió el enano hecho una furia, no pudo evitar sonreír, él había estado consciente anoche cuando quito el muro de almohadas, estaba haciendo mucho frio Jimin temblaba y además le había encantado tener el pequeño y delicado cuerpo de Jimin entre sus brazos, se sentía bien, correcto como si allí perteneciera.

Jungkook había leído el informe económico de la empresa de su familia, La Compañía Jeon en realidad no estaba tan mal, con su astucia y habilidad para los negocios se habrían recuperado en un par de meses.

Pero los Park, eran otra historia, su compañía si estaba a punto de ir la quiebra, y su padre le pidió que se casara con el enano como un favor a su mejor amigo Park Ji Hyun padre de Jimin, y para que negarlo sus padres habían querido toda su vida verlos casados y unir sus empresas.

Jungkook pudo haberse negado, el no acepto solo por ayudar a los Park, lo hizo específicamente por Jimin, porque en el fondo aunque le doliera admitirlo, Jungkook quería a Jimin lo había querido siempre, pero ese era un secreto de Jeon, uno que se guardaría para sí mismo, Jimin no debía enterarse pues el castaño estaba seguro que si lo descubría se burlaría de él, le dijeron al rubio que ambas empresas estaban realmente mal para que no se negara y se llevó a cabo dicho matrimonio.

Después de un rato acostado, Jungkook se fue a la ducha se vistió con un pulcro traje negro y bajo a la cocina Jimin estaba usando la licuadora parecía más calmado, pero el enano le estaba echando un montón de cosas raras para hacer el licuado. "Huevos, pepino, piña, espinaca, lechuga, arroz integral, ricota y algunas semillas de chía"

Jungkook lo miro como si Jimin hubiera perdido la cabeza - ¿Tú te tomaras eso? - una mueca de asco que se formó en su rostro.

-Claro, es saludable- respondió Jimin sin mirarlo toda su atención estaba en su saludable preparación, encendió la licuadora y todo empezó a mezclarse formando un viscoso liquido verde.

-Pues parece que vas a tomar moco-

-Cállate Jeon, eres un asqueroso, esto para mantenerme en forma-

Jungkook lo miro con un una sonrisa maliciosa en su rostro-Es bueno que quieras mantenerte en forma y saludable para mí, amorcito, porque si dejas que tu trasero se ponga gordo te dejare antes de que cumplamos el año de casados -dijo engreído Jeon, esperando una lluvia de insultos por parte de Park, pero lo que vio no le gusto para nada, el labio inferior de Jimin temblaba y sus ojos se cristalizaron.

Esa frase hizo a Jimin sentirse mareado, era lo mismo que Yoongi le había dicho el día que terminaron.

"Lo siento Jimin para ser un bailarín profesional, tú estás muy gordo, dejaste de ser sexy, fue tu culpa no tuve más remedio que buscar a una persona que estuviera a mi altura"

Eso era una completa mentira, Jimin si se había descuidado un poquito con las comidas, pero no estaba tan gordo a tal punto de verse feo y dejar de ser sexy... claro que la zorra con la que encontró al bastardo de Yoongi era un palillo, más bien una escoba vestida.

Pero Jimin no dejaría que Jungkook lo viera afectado y destruido por sus palabras, Jeon era su enemigo si lloraba frente a él, el imbécil solo se reiría, con un suspiro corrió a las escaleras.

- ¡Vete a la mierda! -grito a la mitad de los escalones pero su voz se escuchó más quebrada de lo que esperaba.

Jungkook solo miro a las escaleras y vio a Jimin perderse cuando doblo en el pasillo, no pensó que su estúpido comentario, que además era una broma afectara tanto al enano, y en el momento que vio el rostro de Jimin lleno de dolor y sus ojos a punto de derramar lágrimas supo que la había cagado.

Y la había cagado en grande.

Jiminnie es lo más hermoso que existe en el universo
Gracias por leer.

𝕮𝖆𝖘𝖆𝖉𝖔 𝕮𝖔𝖓 𝕰𝖑 𝕰𝖓𝖊𝖒𝖎𝖌𝖔 ♡KookMin♡Where stories live. Discover now