15. Nat, la alfa instintiva

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Al siguiente día, Steve, había dejado a Tony en la cama sin despedirse, y al despertarse y verse solo en su habitación se puso de mal humor. Recordando lo dicho la noche anterior, se suponía que su alfa había partido para comandar la misión de la intrusión en la base de Hydra haciéndose cargo de la legión de hierro que Tony había puesto a su mando. Sus amigos lo siguieron de cerca, solo Nat y Clint se quedaron en la torre para cuidar de él.

Ese día se sentía muy molesto, aunque Nat no le permitió permanecer encerrado haciendo rabieta cuando lo atrajo a la cocina con un apetitoso almuerzo, el cual, devoró mientras sus amigos lo observaban con atención.

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—Algo en Tony provoca una extraña atmósfera. Es como si todos quisiéramos estar cerca de él —mencionó Barton con voz reflexiva.

—Es un amor —musitó Natasha acariciando el cabello de su amigo embarazado.

—Es un ególatra —la corrigió Barton ganándose una mirada molesta por parte de Tony quien daba las últimas mordidas a su comida—, pero estando embarazado provoca una atmósfera tranquilizante. No sé, es extraño.

Natasha solo sonrió y acarició el gran estómago de su amigo con su mano libre.

—No sé los demás, pero yo desde niña siempre tuve mucha preferencia por Tony y Bruce. Siempre fueron los niños más lindos de la clase y las cosas aún no han cambiado —lo halagó dándole un golpecito juguetón en la nariz a su amigo que no quitaba su cara de enojado— ¿jugo?

Su amigo negó y recargó la cabeza en su hombro escondiéndola de Barton. Al parecer todavía no se sentía a gusto del todo con los nuevos miembros del grupo, también solía alejarse de Thor cuando estaba alrededor.

—Debe ser genial ser un alfa y tener un omega —dijo Barton con una extraña voz entristecida—, ustedes se ven tan hipnotizados por ellos, tan felices.

Natasha acarició el cabello de su amigo quien se movió un poco para abrazarla por la cintura.

—Tú también podrías tener una pareja —mencionó con una sonrisa de lado—, si salieras un poco podrías encontrar a un omega para ti.

Barton resopló.

— ¿Para qué? ¿Para que venga un estúpido alfa y me lo quite?

Natasha frunció el ceño, Barton nunca había expresado esa inseguridad antes. Quiso averiguar más, pero su atención se vio desviada hacia Tony cuando lo sintió aflojar su abrazo, al parecer se estaba quedando dormido.

— ¿Por qué no vas a dormir a tu nido? —Preguntó con voz suave besando su cabello.

—No —masculló Tony aferrándose más fuerte.

— ¿Extrañas a Steve?

—No —volvió a responder el omega con el mismo tono de una rabieta.

— ¿Qué te hizo? —Insistió intentado ocultar una imprudente risa.

Siempre le pareció muy gracioso que a pesar de ser todo un macho alfa protector de su omega; a veces Steve era un poco insensible y distraído, para después pagar los platos rotos con su enfurecido omega.

—No se despidió de mí.

Natasha entornó los ojos y vio que Clint también tenía la misma expresión. Definitivamente el embarazo lo había vuelto mucho más susceptible de lo que ya era.

—Cuando regrese podrás reclamarle, pero por el momento, ¿te gustaría una dona de chocolate?

Tony se enderezó sin soltarla asintiendo con una sonrisa triste y sus ojos llenos de lágrimas. Natasha le hizo una seña a Barton para que le pasara la bolsa ubicada del otro lado de la cocina. Cuando le extendió la enorme rosquilla, Tony hizo un ruidito sorprendido y comenzó a comerla despacio como si quisiera disfrutar cada milímetro del postre.

— ¿Siempre lo has consentido de esa forma? —Preguntó Barton con una sonrisa divertida.

—Sí —admitió—, siempre les di todo lo que querían tanto a Tony como a Bruce.

—Claro que no —reprochó Tony con la boca llena—, ¿recuerdas esa ocasión que intentamos robar el chocolate de la maestra?

No pudo evitar reírse a carcajadas y más cuando vio la expresión indignada de su amigo. Lo atrajo por la cintura a su asiento cuando lo vio intentar levantarse muy molesto.

—Esa ocasión —comenzó a explicarle a su confundido amigo beta—, Bruce y Tony intentaron robar el chocolate de la maestra y como no alcanzaban la estantería, intentaron treparse uno sobre el otro y se cayeron lastimándose. Los regañé por hacer la travesura.

—Pudiste habernos dado el chocolate y evitarnos el accidente —reclamó Tony antes de dar otra mordida a su rosquilla.

—Tal vez —aceptó con una gran sonrisa—, pero debían aprender que robar es malo —Tony se quedó callado terminando su rosquilla con los ojos entrecerrados—, ven.

Volvió a abrazarlo y expulso sus feromonas para consolarlo sin el temor de que Steve apareciera y provocar un problema territorial.

—Eso también es extraño —mencionó Clint señalándolos—, ¿no se supone que no debería reaccionar así con el aroma de otro alfa?

Tony volvió a abrazarla y se relajó contra ella.

—Crecimos juntos, mi aroma lo tranquiliza porque soy como su hermana. Últimamente estás muy gruñón, deja de preguntar y simplemente disfruta del momento.

Tony emitió una risa suave y lo abrazó con más fuerza, lo mantuvo de esa forma hasta que se quedó dormido, con mucho cuidado lo levantó en brazos y lo llevó a su nido. En cuanto dejó al omega, salió corriendo de aquel lugar por el fuerte aroma de Steve. Sentía un poco de rechazo a pesar de todos los años que habían compartido, siempre el aroma del alfa era algo que se debía respetar.

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Cada vez falta menos para que el bebé nazca ❤️, ¿qué será? ¿alfa, omega o beta?

Se me había olvidado por completo comentarles que ya estoy publicando una historia Thorki 😅. Está situada después de esta historia, pero no hay spoilers así que si gustan ir a leerla se llama "Te entrego mi vida"
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Nuestra gran familia (Stony mpreg)Where stories live. Discover now