Capítulo 53: Miembro Cerdo en el Grupo Ataca Otra Vez

678 115 27
                                    

—Nosotros... Nosotros... ¡No podemos vencerlo! —en el grupo, ya había personas con intenciones de retirarse. Dos practicantes femeninas ya habían convocado sus espadas voladoras, se giraron y planearon huir.

—¡No se muevan! —Chen Yi planeaba detenerlas, pero, al final, no lo logró a tiempo. La bestia demoníaca saltó, y al instante, desapareció una vez más. Un momento después, apareció justo al frente de las dos practicantes que estaban huyendo y les arrojó una bola de llamas por su boca.

Los dos practicantes ni siquiera tuvieron tiempo de gritar, y ya se habían convertido en cenizas.

Al parecer esta bestia madre estaba verdaderamente enfurecida, y no perdonaría a nadie de aquí. Zhu Yao apretó sus puños e hizo todo lo posible para reprimir el miedo en su corazón. Usando la abertura que hizo la bestia demoniaca después de que disparó las llamas, ella lanzó un arte místico de madera, invocando innumerables enredaderas, restringiendo así sus cuatro extremidades. La bestia demoníaca fue atrapada inconsciente por ese momento y cayó al suelo.

—¡Ahora! —Zhu Yao dijo en voz alta—. No permitan que se teletransporte a otro lugar otra vez—. El pequeño grupo que inicialmente estaba formado por diez personas, ahora solo le quedaba a Zhu Yao, Wang Xuzhi, Lu Cha, Xiao Yi y el herido pequeño gordo Zhao.

Las dos veces anteriores fueron extremadamente rápidas, y con solo mirar, pareciera como si hubiera corrido a cada ubicación. Sin embargo, Zhu Yao se dio cuenta, que no tenía una postura de esprint en cada ocasión. No era que su velocidad fuera especialmente rápida, más bien, esa Bestia Alzallamas sabía cómo teletransportarse.

Wang Xuzhi y Xiao Yi fueron los primeros en reaccionar, e invocaron su Intención de Espada, atacando a la bestia demoníaca. Solo en la etapa Núcleo Azoth los practicantes podrían comprender la Intención de Espada. En comparación con las espadas espirituales, la Intención de Espada llevaba la fuerte voluntad del lanzador, y aparentemente con un solo corte, la Bestia del Alzallamas sangró.

La Bestia parecía haberse enfadado aún más y comenzó a luchar con todo su poder. Zhu Yao sintió que su fuerza se desvanecía lentamente, después de todo, ¿cómo podían unas pocas enredaderas restringir a una bestia demoníaca de séptimo rango durante un largo período de tiempo?

—¡Lu Cha! —gritó Zhu Yao a la persona que estaba a su lado, todavía aturdida—. ¡Date prisa y ayuda!

Lu Cha se sobresaltó por un momento, y luego, alzó su mano apresuradamente e invocó un carámbano.

—¡Diablos! ¡No uses hielo! —Zhu Yao casi no pudo contenerse de regañar a su madre. Esta dama debe haberse olvidado de llevar consigo su cerebro cuando salió de su casa, ¿¡verdad!?

Desafortunadamente, ya era demasiado tarde, ese carámbano ya había golpeado directamente a la bestia demoníaca. En el momento en que entró en contacto con su cuerpo, las llamas de la Bestia Alzallamas al instante aumentaron de forma explosiva, y las enredaderas que invocó con tanto dolor se quemaron por completo. La figura de la Bestia Alzallamas brilló, y ya se había teletransportado detrás de Lu Cha mientras escupía una bola de fuego.

Lu Cha al instante abrió los ojos, su rostro ya se había vuelto pálido cuando la muerte se le acercaba, sus ojos estaban llenos de desesperación.

La Bestia Alzallamas ya había abierto su boca hacia ella, y de repente, una figura del color de la sangre salió disparada, haciendo a un lado a Lu Cha, y tomó su lugar para que la mordiera.

¡Era el pequeño gordo Zhao!

Incluso Zhu Yao estaba sorprendida, sin embargo, este no era el momento de quedarse aturdida, así que Zhu Yao voló a su máxima velocidad. Levantando a Lu Cha, quien yacía asustada tontamente en el suelo, ella rápidamente se distanció de la Bestia Alzallamas. Antes de que el pequeño gordo Zhao pudiera ver a Lu Cha, fue mordido en dos pedazos.

Mi Discípulo murió una vez másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora