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-No lo puedo creer ¿te imaginas? Una cita con él! - la pelinegra dijo emocionada mientras sacaba ropa de su armario.
-Me alegro que lo haya conseguido señorita.- Sonrió dulcemente Sam mientras veia la ropa salir volando por todos lados.
-Estoy muy emocionada ¿se nota? Si, creo que se nota, no se que usar!- Sam no pudo evitar reír ante las acciones de la menor y empezó a ayudarla a encontrar algo para la cita.

Mientras un nervioso Dylan hablaba por telefono, caminaba de un lado al otro por su habitación tantas veces que empezaba a marcar un camino.
-No se a donde llevarla! ¿ y si primero vamos a comer?, pero no se que le gusta, ¿ o vamos al cine?.- del otro lado de la linea estaba un Charly muerto de la risa.
-Tranquilo hombre, relajate, le gustara donde la lleves- dijo entre risas.
-No te rias! aish no ayudas, ya se!! iremos al parque de diversiones.- dijo emocionado con una gran sonrisa en el rostro, ni si quiera sabia si podria dormir esa noche.

-Sam este esta bien?.- hace mas de una hora que Lulu se probaba ropa y se la enseñaba a Sam.
-Ese es muy bonito!.- sonrio la mayor, lulu se miro en el espejo, era un vestido color celeste que combinaba con sus ojos, era de hombros descubiertos y le llegaba apenas bajo la rodilla, estaba adornado en la cintura con un listón blanco que terminaba en un moño pequeño por detrás, Sonrió satisfecha.
-Es perfecto.-

El castaño se removia en su cama, queria dormir para ir descansado pero estaba demasiado emocionado para lograr conciliar el sueño.
Ya quiero ver a mi Alfa!
-Aun no es nuestra...- le dijo a su lobo.
Mañana sera perfecto, sera nuestra y nos marcará.
Sacudió la cabeza y quedo sorprendido de lo que su lobo pedía, marca..., se sonrojo de solo pensar en ser marcado por su pareja, bueno, aun no eran pareja pero aun así eso seria perfecto penso Dylan.

¤¤¤¤

-Sam... sam... ya es sabado...-
-ya seee- dijo Sam sonriendo mientras hacia el desayuno.
-aaaahh! no puedo esperar, estoy muy nerviosa.-
-son las 8 de la mañana señorita, aun falta.- dijo la omega colocando el desayuno en la mesa, aquel comentario le saco un puchero a la menor.
-¿porque el tiempo no avanza rápido?.- la Alfa dijo aun con el puchero y empezo a comer.

Parecía que el tiempo pasaba mas lento de lo normal, o eso pensaba lulu que se encontraba sentada en la sala ya arreglada con el vestido azul, unas sandalias blancas, su cabello recogido en una coleta dejando ver unos pequeños aretes blancos, cada 5 minutos miraba su celular como si eso pudiera adelantar el tiempo, suspiraba al no ver mucho avance en el reloj y volvia a esperar.

3:30 vio en el reloj y se levanto rápidamente, agarro una bolsita y corrio hasta la entrada de su casa justo para cuando sam abrio la puerta.
-oh!.- dijo la mayor sorprendida.
-ya es hora~.- la pequeña Alfa le sonrió a la contraria y esta dejo salir una pequeña risa.
-si, el carro la esta esperando afuera, pero no es todavia muy pron....- No pudo acabar de decirle ya que lulu habia corrido hacia el auto y se había metido en el.

4:25 pm

Dylan se encontraba caminando hacia el lugar donde se reuniria con la Alfa, llevaba dos boletos en la mano para el parque de diversiones mientras sonreía feliz, estaba a dos cuadras por llegar y el semáforo se puso en rojo, lo único que pudo alcanzar a sentir fue un empujón fuerte junto con el aroma a rosas antes de caer en la carretera y que el auto impactara contra él.

4:25 pm

Lulu estaba esperando ya en el puente sonriendo, le había dicho al chofer que esperaria sola y que lo llamaría cuando la cita terminara, miro al cielo y notó que estaba nublado, no habia traído paraguas pero había una tienda cerca y fue a comprar uno.

Estaba apunto de pagar cuando sintio dolor, dolor en el pecho, algo no estaba bien pero no sabía que era, sacudió su cabeza y compro el paraguas, justo a tiempo porque había empezado a llover, lo abrió y regreso al lugar del encuentro.

5:30 pm

la lluvia era mas fuerte, hacia frio pero no le importaba, siguió parada esperando a que llegara su Omega, sus pies estaban mojados, sus piernas empezaban a doler de estar parada.
Una ráfaga fuerte le arrebató el paraguas de las manos, corrio al alcanzarlo pero resbaló y termino en el suelo mojada pero no se levantó, se quedo viendo un rato como la lluvia seguía y seguía, su cara estaba empapada y ya no sabia si era la lluvia o sus lágrimas.
Omega ¿donde estas?

Eres mi Omega?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora