Aprendiz de Elementos

Capítulo 16

Después de una charla entre Ramsés y Julia el maestro Mehmud les llamó para comenzar la cena, los dos chicos quedaron en que la plática sería más tarde, le comentó Ramsés a Julia que lo mejor sería hablarlo en una caminata por la noche, Julia accedió aunque no sabía muy bien el motivo, lo notaba un poco extraño, ella seguía pensando en que ese tema sería delicado para el búho. Parece ser que no ha olvidado la plática del otro día en la cual dijeron que saldrían por la noche, la diferencia es que esta velada no saldrán con la compañía de Sebastián, un tema complejo y es obvio que serán solo ellos, él le dijo que sería la primera persona a la que se lo diría y Julia le cree, sabe que es cierto, lo vio en sus ojos marrones.

Para Julia Ramsés es un excelente amigo y sabe que es muy importante este tema. Quiere escuchar su historia y hoy en Friston Rige es la noche es la indicada.

Julia fue la primera que llegó a la mesa, ahí estaba el maestro Mehmud en la parte del extremo izquierdo, esperando a todos los nuevos chicos que ya habitan en esta casa, Ramsés fue el segundo en llegar, después entraron los gemelos al comedor y por último fue Sebastián junto con Mavis, el chico popular se veía incomodo, Mavis sonreía de una manera muy exagerada, Julia sintió un poco de celos al verlos entrar juntos, aunque notó la gran diferencia en las expresiones del rostro de cada uno.

—Vaya que se han tardado, son los últimos en llegar. —comenta el maestro Mehmud a Mavis y Sebastián.

—Lo siento maestro. —solo contesta Sebastián.

—No hay cuidado, tomen sus asientos. —indica el maestro Mehmud.

—Ojalá sirvan hamburguesas. —dice Leo en voz alta a Luis.

—Joder, no seas inmaduro. —le contesta Leo.

Todos las demás personas en la mesa los miran divertidos.

—Siento decepcionarte Leo, pero lo que he hecho es una ensalada acompañada con carne.

El maestro Mehmud entra en el comedor con una gran charola con varios platos, en la mesa ya estaba una jarra con agua de sabor limón, algo poco común para una cena, pero para estas personas y más para Julia no han tenido nada normales sus días.

—No se preocupe maestro, a Leo le encanta la carne. —comenta Luis.
Leo asiente con la cabeza.

— ¿Usted lo ha hecho? —pregunta Julia con intriga.

—Claro, después de que los aprendices se fueron de la mansión, la gente de limpieza, los cocineros y toda la gente de servicio se fue, comencé a cocinar yo.

—Es increíble maestro, además de poder controlar un elemento es cocinero, lástima que no maneja el fuego como yo, le sería de gran ayuda. —comenta Julia y el maestro sonríe.

—La tierra es tan bien un muy buen elemento. —comenta Mavis.

Todos han tomado asiento mientras el maestro Mehmud comienza a repartir los platos. Julia y Ramsés enfrente de Mavis y Sebastián, Luis junto a Sebastián y Leo junto a Julia. El maestro Mehmud en un extremo de la inmensa mesa en la cual aún quedan muchos asientos.

—Nunca dije que no a eso. —le contesta Julia.

—Es que yo así lo sentí, aunque no maneje ese elemento tengo la percepción que no hay que menospreciarlo.

—Jamás hice eso.

El maestro Mehmud ha terminado de repartir los platos y toma asiento, todos los demás solo escuchaban la charla un poco calurosa entre las dos chicas, todos comienzan a darse cuenta de que tal vez no se llevaban tan bien.

—Ya basta chicas, es una discusión sin sentido.

El maestro Mehmud interrumpe y todos ya sentados guardan silencio.