❝ Tu inocencia fue lo que más me atrajo y no temo corromperte al máximo, Jeon. ❞
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➪ En esta obra no se busca sexualizar u ofender a ningún idol, esto es solo con fines de entretener. Si no te gusta este tipo de contenido te invito a...
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En la perspectiva de Jungkook, Taemin aparentaba ser un buen abogado y por lo poco que han podido convivir estos días, no le desagrada en lo absoluto; no podía comprender el por qué el señor Kim no le agradaba.
No había pasado mucho desde esa incómoda comida que tuvo con Taemin y Taehyung, desde ahí solo ha platicado a solas con su abogado una sola vez y la conversación no duró más de 10 minutos ya que el señor Kim no se lo permitió.
Jungkook no lo podía negar, sentía cierto gusto de saber que el mayor lo celaba y tenía cierta posesión sobre él, claramente comprendía que estaba mal y que no debía de aceptar esos comportamientos, pero era un gusto muy culposo, lo hacía sentir importante para su mayor y eso se le hacía lindo.
(...)
Era un lunes por la mañana, el pelirrojo se estaba terminando de arreglar para ir a la universidad. El clima era cálido, por lo cual decidió colocarse unos shorts junto con una playera oversize blanca con sus característicos tenis Converse rojos.
Salió de la habitación con dirección al comedor para poder desayunar. Estando ahí se encontró con el pelirrubio, el cual estaba concentrado tomando su café y viendo su tablet leyendo el periódico digital.
—Buenos días, señor Kim —. Saludo con tranquilidad sabiendo que esté no le iba responder como de costumbre.
Empezó a desayunar en silencio, disfrutando cada bocado ya que ese día se había levantado temprano y podía comer con tranquilidad.
Observó disimuladamente al mayor —, guapo — era la palabra que definía a la perfección al mayor cuando utilizaba sus lentes y fruncía el entrecejo cuando estaba concentrado.
—¿Quieres más jugo, corazón? —. No había notado la presencia de la pelinegra.
—¿Eh? ¡Ah! No, gracias —. Negó rápidamente —. Así estoy bien —. Sonrió.
—¿Usted desea más café? —. Se dirigió al mayor.
—No, gracias.
La señora Jung empezó a recoger los platos donde anteriormente estaba el desayuno del mayor, creándose de nuevo el silencio entre ellos dos.
—Llegando de la escuela te quiero en mi despacho —. Habló por primera vez sin despegar la mirada de aquel aparato.
—¿Daniel irá por mí? —. Preguntó ya que Taehyung había tomado la costumbre de ir por él.
—No, él está ocupado en algunas cosas que le encargue.
—¿Y por qué no irá usted por mí? —. Mordió su labio inferior.
