✾Capítulo 25: No te volveré a ver.

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Según Corban poseer información sobre la Deep Web es algo terrible y mortal, él tiene seguimiento y por ende las personas que se enteren de lo que es están muertas, más por qué es un miembro importante del FBI y también porque hace parte de un movimiento ilegal, que asesina gente, tiene sicarios para contratar y hace más cosas de las que no quiero nombrar.

Intenté bajar del auto, debía decirle a Jacobo que la amenaza de Cynara era verdad, su padre la estaba buscando como loco, y no solo su padre, su hermano Cyril sabía y más que eso... Corban.

Otra razón fue porque Corban ahora podía asesinarme por saber quien era y a qué se dedicaba, así que temía por mi vida.

Pensando en todo un poco también tenía que quedar muy bien escondido el cuerpo de Cynara, era primordial mentiras intentábamos pasar desapercibidos, aunque si vieron a Jacobo con Cynara por última vez saliendo de los salones del sótano, ya está más que comprobado que Jacobo será interrogado, esto tiene que ser muy bien planeado y controlado, nadie se puede enterar, nadie puede saber que Jacobo y yo la asesinamos, sería la perdición.

Jacobo tiene una inteligencia extrema, sabrá librarse del interrogatorio y saldrá victorioso, pero yo aún no puedo, sé que me pondría nerviosa si me preguntan algo sobre Cynara.

—¿Qué haré contigo?—Corban me saca de mis pensamientos.

Tengo varias ideas en mente, como lanzarme encima de él y hacer que pare el auto, no quiero ir a donde sea que me lleva, que será una muerte segura, pero estoy algo relajada, tengo varios trucos bajo la manga, y si planea esto, no moriré sola, me lo llevaré conmigo.

La sed de muerte se está apoderando de mi, es algo que no se puede controlar fácil, y quiera o no, tarde o temprano tendré que volver a hacerlo, es una excitación que no puedo describir, es algo que quieres hacer constante, es algo que es tan adicto como las drogas... Cómo el sexo, pero su placer es único, así que Corban puede ser la segunda persona que asesine, si no cuida de lo que hace, ni dudaré en enterrarle lo que encuentre en el pecho.

—No trates de hacer nada, Jacobo te encontrará y asesinará.—Advierto.

Corban se queda procesando un poco mis palabras, la forma en la que aprieta sus labios me hace saber que es consciente de que Jacobo estará toda su vida tras él tratando de asesinarlo si me hace algo.

—Él no quiere a nadie ni nada... Solo a ti, pero ¿Sabes?—Hace una pausa.

Estoy preparada para lo que tenga que pasar, pero no seré yo la que ataque primero, prefiero esperar. El que ataca de segundo, ataca dos veces, hay que ser controlador en esto.

—No puedo asesinarte, lo que pregunté en el Supermercado... Yo si se qué Jacobo te secuestró—Confesó.

No sabía que decir, y mi mirada lo expresó, cómo explicar que me había enamorado perdidamente del psicópata que me secuestró, cómo explicar que no quería su ayuda y que sólo quería volver en brazos de él. De Jacobo.

—Anastasia, conocí a alguien a quien le importas bastante, ese hombre no dejó de buscarte ningún segundo, estuvo acosando la policía para tener respuestas sobre ti, siempre quiso que volvieras, estaba sufriendo, y tú aquí, pasándola bien con Jacobo.—Habló deteniendo el auto, en una desolada y llamativa vista al bosque.

Quedé en shock, a quien se refería el, ¿Juan? ¿A caso era Juan?, ¿Él había dejado de verse con su amante y quería encontrarme?

—¿Juan?—Pregunté sin titubear.

Él solo se dispuso a mirarme y bajar del auto, hice lo mismo, quería respuestas, y quería hacer más cosas respecto a ello... Si pudiera.

—Nunca conocí a ningún Juan en tu caso—Respondió seco—Ese hombre era Fernando Dallas, un doctor psiquiátrico, lo recuerdo tanto, también recuerdo que era el mejor amigo de Jacobo, eso nunca lo podré olvidar.

Mi estómago dio un vuelco, al fin y al cabo Juan si se me había olvidado, al fin y al cabo Juan si me había reemplazado. Pero todo esto era mi culpa, nunca volví, nunca di señales de vida. 

Fernando nunca me olvidó, nunca lo hizo.

Pero...

¿Por que no puedo sentir lástima?

Fernando pasó meses buscándome sin parar, su clínica estaba destruida, tenía que empezar de cero pero pausó todo solo para buscarme.

—¿Él está ahora mismo bien? ¿Qué ha pasado?—Pregunté acercándome.

El solo me miró un milisegundo y luego su vista fue al horizonte.

—No lo sé, hace un año tú búsqueda se estancó, nadie dio contigo, así que archivaron tu caso... Tú madre se fue sin saber de ti—Respondió—Fernando sigue con la esperanza, pero sabe en el fondo que tiene que seguir y olvidarte, aún paga varios dólares para que en la televisión pongan tu anuncio, pero sabe que es en vano.

Mi mirada quedó perdida.

Lo siento tanto Fer...Lo siento tanto.

Pero algo si quedó rondándome la cabeza.

Mi madre.

—¿A dónde se fue? ¿De nuevo de viaje con sus amigas?—Era usual que madre saliera mucho de viaje, siempre estaba en diferentes ciudades o países.

Corban me miró a los ojos, una expresión de ¿Lástima?

—No sé cómo decirlo Anastasia, es algo que no me correspondía a mí—Habló preocupado.

Yo solo quería saber, quería saberlo.

—Solo dilo—Inmuté en un hilo de voz.

El volteó todo su cuerpo justo en frente mío, me tomó de los hombros y me dio una sonrisa fingida.

—Tu madre murió hace un año, justo dos meses después de que tu caso se archivara.

Obsesionado por ti ©️Where stories live. Discover now