Obsesionado por ti ©️

✾Capítulo 35: FINAL

Amo Hawái.

Amo la tranquilidad que me da estar aquí.

Lo que no amo tanto es que los cuerpos de Corban y Jacobo llamen tanto la atención de esas perras.

—Corban—Llamo.

Corban sale de la piscina y queda justo a mi lado; estamos en un hermoso resort. Lo miro y sus ojos brillantes se acercan a mi, me besa y le devuelvo ese delicioso beso hambriento. Mientras lo beso abro los ojos y miro las chicas que ahora susurran entre sí y esquivan mi mirada.

Alguien aparece tras de mi y me ofrece una copa de vino.

—Jacobo, creí que te encantaba ser el centro de atención de esas chicas—Hablo sarcástica.

Jacobo hace un puchero y se acerca a mí, besándome con la intensidad que solo él tiene.

Pero algo nos saca de nuestros pensamientos.

—¿Agente Scott?—Mi conector suena.

Mierda, olvidé que no estamos de vacaciones, estamos trabajando.

—Aquí estoy—Respondo llevando el micrófono a mis labios.

Corban se levanta y observa que nada esté fuera de lugar.

—Estamos cerca, en pocos minutos vamos a aterrizar, no se descuiden, ese resort podría volar en pedazos.—Me comunica mi jefe.

Apago el conector y me dirijo a mi habitación, seguida por dos hombres. Al llegar me quito la ropa quedando desnuda y miro el traje que espera ser usado, la placa brilla con mi apellido en ella.

Agente Scott.

Siento que alguien me acaricia la parte baja del abdomen y me hace gemir inconsciente.

Giro y me encuentro con la mirada penetrante de Jacobo, él ya tiene puesto su uniforme, le queda tan bien, me mojo de solo acordarme las veces que lo he tomado fuerte de ese chaleco antibalas.

—No coordino cuando te veo desnuda—Susurra en mi cuello.

Lo tomo del cabello y bajo su cabeza hasta que su cara queda a mi altura, un beso apasionado nos envuelve y siento unas grandes manos acariciar mi espalda, bajando por mis nalgas; despego los labios de Jacobo y me giro en dirección a Corban, quien también tiene su traje puesto; lo beso y él mete su mano en mi intimidad mientras Jacobo se concentra en mis senos, iba a bajar la bragueta del pantalón de Jacobo cuando de nuevo el conector suena.

¡Mierda!

Olvidé que aún estamos trabajando.

Empujo los dos chicos lejos y aún desnuda contesto.

—Agente Scott, aquí—Digo tratando de regular mi respiración.

Escucho una interferencia pero luego mi jefe habla.

—Aterrizamos, esperamos por ustedes en la cubierta.

Me visto lo más rápido que puedo y salgo junto a los dos hombres escoltando mis pasos, antes de poder girar hacia la cubierta disparos se empiezan a escuchar cerca.

Los tres nos miramos y corrimos en esa dirección.

—Jacobo—Lo llamé—Tienes que adelantarte y subir por el cuarto de servicio, no te puedes quedar aquí, Corban y yo lo solucionaremos.

Jacobo negó.

¿Qué estábamos haciendo?

Fácil.

Corban nos ofreció protección luego de que Jacobo quiso negociar con la policía.