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16 | Debe estar con nosotros.

Capítulo dieciséis.

   En dos semanas, el rumor sobre la estadía de un vampiro espejo con los Cullen se habían esparcido con todo el continente.

   A dos semanas de la llegada de los Volturis, vampiros de Brasil, España, Inglaterra incluso Venezuela se habían presentado ante los Cullen, todos se enteraron de la verdad, todos apoyaron a Camila.

   A dias del enfrentamiento con los Volturis, veinticinco vampiros de todo el mundo se encontraban dispuestos a luchar a su lado.

   La relación entre Edward y Camila era asombrosa, cada día entrenaban juntos con  Rosalie y Emmett.
  Y gran parte del día la pasaban juntos en la pequeña casa que Alice y Esme les habían regalado, ya sea platicando sobre ellos o simplemente demostrando el gran amor que se tenían, haciéndose cada vez más inseparables.

   Mientras tanto, Kate y Garrett; quiénes ahora son pareja, habían creado una gran amistad con Camila, las chicas practicaban gran parte del día junto a Alice.
  La rubia ayudaba a Camila, a mejorar y conocer más su don, siendo una completa caja de sorpresas para todos, haciendo sentir orgulloso a Edward.

   Kate, Alice, Carmen, Eleazar, Jasper, Edward y Camila acababan de llegar de cacería, borrando las sonrisas de sus rostros al ver a Rosie salir de la casa furiosa.

—Rose ¿Que pasa?—pregunta Kate al tenerla frente a ellos, los últimos se miran confundidos, leyendo sus mentes.

   Rosalie sin embargo, responde volteando hacia la mansión, donde se podía apreciar como a una mujer sentada de espaldas a ellos, escuchando a Esme.

—¿Que sucede?—pregunta Eleazar—No la reconozco.

  Por el destello de su cabello pudo darse una idea de quién podría ser, y en el fondo suplico por equivocarse.

—Es mejor que lo vean por ustedes mismos.

  Edward entrelaza sus manos mientras avanzaban tras el resto de los chicos.

   Los vampiros suben las gradas hacia la sala, sintiendo las miradas de todos caer en ellos, especialmente en Camila.
  Le ceden el paso dejando a la vista a Bella voltear a verlos, pero esta vez con sus ojos de un color rojo intenso, un color de neófito.

   Camila se detiene con sorpresa, chocando con el pecho de Edward, sintiendo sus manos acariciar sus brazos.

¿Como es que Isabella era un vampiro?

   La neófita sonríe con inocencia a los vampiros, quienes comparten una mirada llena de confusión.

—No entiendo nada—dice Kate mirando a la pareja, quienes parecian haber entrado en shock—¿Como es que eres un vampiro?

—No lo se, estaba en el bosque y cuando desperté me sentía diferente, tuve la necesidad cazar, simplemente sucedió—se encoge de hombros.

  Cómo si fuera lo más natural del mundo.

—¿En verdad intentas engañarnos con esto? A vampiros de cientos de años, esas no son cosas que ocurren de repente, uno no despierta siendo vampiro milagrosamente—Dice Camila con el ceño fruncido, sintiendo como Edward frotaba sus brazos, intentando tranquilizarla.

— Pues a mi me sucedió.

—¿Eso que significa?—Edward voltea a ver a sus padres.

—Bella debe estar con nosotros—Dice Carlisle haciendo que los murmullos de los testigos llenen le habitación.

   Los Denali al igual que algunos vampiros optaron por salir de la casa, dando un poco de privacidad a los Cullen, mirando con un toque de lastima a la castaña, nadie querría estar en su situación en ese momento.

—¿Por qué? Eso no fue lo que dijeron.

—Rosalie, ella es nuestra responsabilidad, nosotros metimos a Bella en todo esto, el hecho que Bella conozca sobre nosotros, sobre la existencia de los vampiros es nuestra responsabilidad, Edward la adentro en este mundo, esta escrito en nuestras leyes, si hacemos que un humano conozca de nosotros, debemos convertirlo y hacerlo uno de nuestro clan, o simplemente la matarán.

—Dejen que la maten.

—¡Rosalie! 

—Escuchen, no me agrada Isabella, y todos lo saben, no quiero compartir la eternidad con ella además, ¿Sabes como se sentirá Camila al respecto? 

—Rose, esta decidido, debe estar con nosotros, no podemos hacer nada.

—¿No tienen idea de quien la pudo haber transformado?

— No hijo, en ese caso Bella pertenecería a su clan, pero desconocemos esa información.

—Por lo tanto es nuestra responsabilidad.

—Yo no estaré con ella—miran a la rubia sorprendidos—Se queda ella y yo me voy.

—Rose por favor—comienza Alice en los brazos de Jasper

—¿Y que le piensan decir a Charlie, que su hija se ira a vivir con su ex-novio y su actual pareja? Nos creerá perfectamente Carlisle.

—Buscaremos la manera.

—Solo nos creerá si le decimos que esta junto a Edward de nuevo y quieren casarse—responde Esme.

—¿No quieres que tengan hijos de una vez?

—Rosalie por favor deja de decir estas cosas, sabemos que la odias, pero basta deja de hablarle así a Esme y a Carlisle.

—Bueno a mi nadie me a preguntado que es lo que quiero—Dice la neófita parándose de su lugar.

—No nos interesa—Responden Camila, Rose y Alice al mismo tiempo volteando hacia ella.

—¿Y cuando piensan hablar con su padre?

—Lo antes posible, Bella no puede estar cerca de él, aun no puede controlar su sed, ni su velocidad, mucho menos esconder sus ojos.

—Esto es un asco—dice Rosalie furiosa.

— Carlisle, estoy en deuda con ustedes y lo saben, no he opinado del tema por respeto a ustedes —dice Camila, separándose de Edward dando un paso al frente—¿Pero esto? Yo no estoy de acuerdo, simplemente digamosle a su padre que se irá a otro país, yo no estoy de acuerdo en incluir a Edward.

—Camila...

—Lo siento Esme, no viviré con ella.

  La analiza de pies a cabeza, girando sobre sus pies hacia la salida, necesitaba salir de ahí ahora mismo.

—¡Ahora si podré golpearte!—grita Bella desde la sala.

—¡Cuando quieras!— fueron sus últimas palabras antes de salir de la mansión y adentrarse al bosque.

   Edward cierra los ojos unos segundos intentando controlar sus emociones, sabía que Jasper estaría demasiado aturdido con la presencia de todos para sumar esa carga.

Tenía menos de dos semanas de haber solucionado las cosas con su compañera, y ahora nuevamente algo se estaba interponiendo entre ellos.

—Yo no participaré en esto Carlisle—susurra hacia el líder, dando su respuesta definitiva.

  Dió una mirada rápida a Bella antes de seguir los pasos de Camila.

   Los Denali notaron la tensión en el ambiente, y si en ese momento no odiaban a la neófita, ahora lo hacían.

   Camila Hale estaba furiosa con lo sucedido, sin embargo, no se sentía con el derecho a reclamar, los Cullen le habían ayudado demasíado, sentía una gran deuda con ellos.

   Pero Edward no pensaba igual, y el haría todo para luchar y estar junto a su compañera.