capítulo 50 - Epílogo

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Vendo sus ojos, y lo guió como puedo, el pesa y mucho, y es mucho más grande que Yo, torpemente caminamos por la entrada el se ríe, haciéndome reír a mi.

-Colabora, no es fácil guiar a alguien tan grande – le digo.

-Grande, yo soy grande – me dice riendo.

-Muy grande – le digo en doble sentido y el se ríe a carcajadas, lo amo tanto.

Tenía una semana, una semana para armar todo, una semana para darle el  día de su cumpleaños la mejor sorpresa de todas, casarnos en la playa y finalmente mudarnos a nuestra casa, con ayuda de Amelia, Adel y Esperanza amoblé completamente la casa, así que luego de casarnos, celebrar con nuestra familia, lo rapte para mostrarle la otra parte de su regalo.

A pesar de estar vendado su sonrisa me dice todo, está muy Feliz, tan feliz que desde que me vio en la playa no ha dejado de sonreír, hasta le dijo a Adel que lo quería, puedo imaginarse la cara de Adel en ese momento.

Todos nos reímos a carcajadas, abro la puerta como puedo y lo llevo dentro de la casa, todo está perfectamente arreglado tal como lo quería.

Lo guió hasta la sala, me pongo de puntillas y Quito la venda de sus ojos, en cuanto los abre lleva sus manos a su pecho.

-Nuestras casa… - me dice.

-Si, nuestra casa – le digo. 

El observa todo con asombro y camina detallando todo…

-¿te gusta? – le pregunto nerviosa. – Si algo no te gusta, lo cambiamos. – le digo viéndolo fijamente.

-¿en que momento hiciste esto? – me pregunta.

-Bueno, hice malabares… entre todo me ayudaron. – le digo.

-Esto es maravilloso amor, esto… esto es demasiado, esto – me dice mirándome a los ojos sorprendido.

-Te mereces esto y mucho más amor – le digo acariciando su mejilla. – me salvaste, me cuidaste, la vida no me alcanzará para decirte y demostrarte lo mucho que te amo.

-Yo te amo Maia. – me dice. – este ha sido el mejor cumpleaños de mi vida, nuestra boda y  ahora nuestra casa.

Se acerca  a mi y toma mi rostro en sus manos, me mira detalladamente a los ojos y poco a poco se acerca a mi y me besa como sólo él sabe hacerlo, llenando mi cuerpo de vida, haciéndome feliz, haciéndome soñar.

-¿Estrenamos nuestra habitación? – me pregunta pegado a mis labios.

-Tenemos 40 minutos, todos vendrán y celebraremos acá. – le digo señalando el jardín lleno de mesas, flores.

El sonríe y se separa de mi para ver hacia el jardín, todo está organizado, tenemos mesas, dulces, Mesonero…

-Nuestra fiesta de boda…

-Si, y tu cumpleaños.. – le digo.  

-Nadie había hecho esto por mi.. – me dice.

-Pues ahora me tienes a mi, y siempre haremos algo, siempre… - le digo acercándome a el para abrazarlo.

-Vamos a nuestra habitación… - me carga en su hombro y sube las escaleras conmigo a cuestas, haciéndome reír.

Mi vida cambio desde que el llegó, mi vida se llenó de felicidad gracias a el, y por el haré lo que sea, lo amo tanto, el Lucho por mi, el soporto por mi, y el mee protegió!

¿cómo no amarlo?  Por el resto de mi vida lo amaré, se que tendremos días Buenos, como días no tan Buenos, pero el amor es fuerte y es real, no  existe una relación perfecta y nosotros no somos la excepción, pero creceremos juntos, y nos haremos fuertes juntos..

Me deja en la cama, y poco a poco se va introduciendo dentro de mi, haciéndome gemir de placer.

-Te amo más que a mi vida Maia – me dice ronco lleno de placer.

-Yo te amo más que a la mía. – le digo, Perdiéndome en sus besos y en sus embestidas.

Hacemos el amor con mucha pasión y deseo, sentirlo tan mío, me hace Feliz, verlo lleno de placer, me llena como mujer…

El futuro que nos espera es incierto, tal vez nos depare cosas buenas o cosas no tan buenas pero lucharé por el, lucharé por lo nuestro.

Soy Maia Habbak, y mi vida junto a el está por comenzar…

ZEIT HABBAK EL ADONIS Where stories live. Discover now