Estrella observaba el vuelo del águila desde su posición en lo alto de la montaña. Le encantaría saber volar, la sensación de libertad tenía que ser grandiosa y poder observar todo desde las alturas.
El ave captó un movimiento en la zona más alta de aquella zona, sin dudar, se lanzó hacia su presa. Estrella al ver que el pájaro se acercaba cada vez más rápido hacia donde estaba ella, comenzó a correr tan veloz como sus pequeñas patas le permitían, o encontraba pronto un escondrijo o sería el próximo aperitivo de aquella águila. Pronto encontró un pequeño agujero entre dos rocas que le permitirían esconderse de aquel animal de momento, tendría que estar más atenta la próxima vez y no quedarse ensimismada observando a sus posibles cazadores.
