Capitulo XXXIX. La duda

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Linkanesan85 SandraCruzGomez Nadiia_Valdivia

Sakura se encontraba plácidamente dormida, mientras el moreno que estaba a su lado delineaba el contorno de su bello rostro, ella lo volvía loco de una y mil maneras, le había hecho el amor 3 veces esa noche, así como practicado sexo oral 2 veces mas, y estaba consciente que apenas y la había dejado dormir, pero era demasiada la tentación de no volverle hacerla suya, porque ahora era eso suya y de nadie mas.
La forma en la que su cuerpo se amoldaba al suyo cada que le hacía el amor le hacia creer que estaban predestinados a que fuera así, a estar juntos para siempre desde un principio, ella había sido mucho muy receptiva y aunque la primera vez trato de ser gentil, el resto fue un poco mas duro y ella se acoplo sin problemas a el sin quejas, en cambio parecía estar a merced del moreno y el al notarlo se volvió loco y lo estaría si ella alguna vez le dejara.
-Me dejara- tenia que borrar ese absurdo pensamiento pues la simple idea lo mortificaba, porque si bien es cierto ella le había entregado su cuerpo y su virginidad, su corazón y su alma aun no le pertenecían, temía que ya se los hubiera entregado a otro hombre porque no podría vivir con ello, porque el siempre la amaría a ella pero ¿ella también lo amaría a el?.
La duda, la maldita duda no lo dejaba dormir, el reloj marcaba las 4:37 am y a las 5:00 am se tendría que levantar para ir a trabajar al rancho, suspiro cansado, no podía conciliar el sueño y aunque así fuera 23 minutos no harían la diferencia, así que se levanto, se dio una ducha fría para mantenerse despierto, se coloco sus boxers, su pantalón de mezclilla y botas, así como una camisa a cuadros y su chaleco café, no sin antes dar una ultima mirada a su bella esposa que se encontraba aun descansando bajo las sabanas.
Al llegar al rancho su capataz Kakashi como cada mañana le indico respecto de los pendientes que tendrían que llevarse a cabo.
El día se le había hecho eterno, no solo por la duda que lo carcomía por dentro respecto de si ella lo amaba o no, si no porque con solo cerrar sus ojos le traía los recuerdos tan vividos de aquella noche, ella bajo su cuerpo, gimiendo su nombre con cada estocada y vaivén, con solo recordarlo su pene comenzó a ponerse erecto y de no ser por los gruesos pantalones de mezclilla, podría formarse una enorme tienda de campaña.
-Creo que sera todo por hoy Kakashi, tengo cosas pendientes por hacer, te veré mañana -anuncio el moreno mientras subía a su camioneta para llegar a casa.
Era cerca de las 3 pm cuando Sasuke abrió la puerta principal, dejo las llaves en el porta llaves que estaba colgado tras la puerta, cuando escucho a su dulce esposa cantar, se acercó al estudio en donde la vio sentada rosiando los bonsáis tan concentrada que no reparo en la presencia del moreno, Sasuke sonrió de medio lado y mientras la miraba pudo imaginarse eso, una vida plena a su lado disfrutando de su presencia, de la calidez de su hogar, porque ella lo cambiaba todo y haría lo que fuera por estar así por siempre.
Habían pasado 1 semana desde que estuvieron juntos, Sasuke no quería que su esposa se dedicara todo el día al hogar (además de que ella le había anunciado de que regresaría a trabajar al preescolar)así que contrato a una mujer para que les ayudará con ello, su nombre era Shizune, era amable, graciosa, mayor y parecía congeniar muy buen con la pelirrosa, Sasuke había notado que Sakura pasaba la mayoría del tiempo sola y pensó de cierta forma que también le haría bien una compañía, por supuesto que fuera femenina, al menos hasta que estuviera seguro de que ella le amaba.
-Entonces... Pasare por ti a las 3??? - pregunto inseguro el moreno, mientras observaba recostado en la cama a su esposa que se estaba cambiando para acudir a su primer día de clases como maestra del segundo B, se había puesto un vestido amarillo floreado de tiras y falda con vuelo, zapatos en color naranja que combinaba con las flores del vestido y el listón que había colocado en su cabello en una alta coleta, lucia guapísima, justo el tipo de maestra de la cual todo mundo se enamoraría, cada bimestre tenia que tener junta con los padres de familia, siempre solían asistir las madres de los pequeños pero cuando los padres vieran a Sakura, estaba seguro que acudirían ellos y no sus esposas, cerro los ojos y se apretó el puente de la nariz, seria un completo problema, porque Sakura era gentil y los bastardos podrían malinterpretar ello.
-Si tienes que trabajar hasta tarde puedo pedirle a Tenten o a Ino que pasen por mi -comentó la pelirrosa mientras colocaba un poco de brillo sobre sus labios, Sasuke negó y se puso de pie, colocándose a escasos centímetros de ella.
-De ninguna manera, pasare por ti a esa hora - el azabache se acercó y beso a la joven, quedándose el con la mayoría del brillo labial y ella un notable sonrojo - te esperaré en el Mercedes - anuncio y salio de la habitación.
Una vez que llegaron al jardín de niños, Sasuke salio del vehículo y abrió la puerta del copiloto ofreciendo su mano para que bajara su esposa.
-Te veré mas tarde - se despidió el moreno dejando un casto y rápido beso en sus labios, ella asintió y se dirigió al preescolar, no sin antes darle una ultima mirada y una tímida sonrisa a su esposo.

Mientras te mirabaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora