Harry Estefan Riddle Prince

Capitulo 17

Al siguiente día Severus había vuelto con ellos, lo cual había mejorado mucho el humos dentro de la mansión, la reunión era más que nada para coordinar el comienzo del nuevo siclo escolar y dar informe por la desaparición de Harry Potter. El desayuno fue hecho por Tom en compañía de Harry para darle una sorpresa al tercero cosas muy sencillas pero con mucho amor, comieron con muchos ánimos pues ese día sería muy movido, faltaban ya solo dos semanas para comenzar de nuevo el colegio lo cual entristecía a Harry en parte porque Tom se quedaría en casa solo mientras ellos estarían en Hogwarts.

Tenían un día ocupado por delante, primero se reunirían con Sirius Y Remus en el caldero chorreante para la reunión que ellos mismos pidieron, estaba emocionado de volver a verlos después de tanto tiempo, luego irían a una tienda de túnicas especialista donde buscarían un encarga para la noche en que se presentaría frente a todos los mortifagos que aun estaban en libertad, por ultimo deberían ir a una tienda en la cual se cerraría un "buen" negocio que sería muy beneficiosos.

De eso no le habían dicho mucho, solo le aseguraban que se divertiría mucho con ese negocio y que era de su interés, por lo mismo no pidió mucha explicaciones, lo único malo de todo es que sería una aventura padre/hijo, ya que su papá estaba trabajando en una poción para restaurar a mente y de esta forma contrarrestar los efecto de los dementores lo cual no era tarea sencilla pues a mente humana era muy compleja, si contar con el hecho de que un hombre lobo y un animago que es un perro tal vez podría reconocer los aromas a pesar de llevar un disfraz.

El día prometía ser estupendo por si solo, por otro lado ya había avanzado en ocluancia y Legeremancia, podía usar la técnica para colar en trayectos cortos y el hechizo cortante creado por su papa le salía a la perfección aunque no planeaba usarlo contra la personas, ya podía utilizar la lengua parsel como si hubiera nacido hablándola y el conocimiento que había adquirido o ponían un año por encima de sus compañeros, sin duda seria su año más interésate en Hogwarts.

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El caldero chorreante estaba para variar completamente lleno, el movimiento de las personas en esas fechas era mayor por el comienzo de las cases y entre las compra de último minuto, alguno que había dejado la lita para comprarla hasta el final y que siempre se dejaban algo.

Harry miraba en todas direcciones en busca de un rostro familiar entre las personas pero sin éxito, la chimenea se volvió a activar de ella salió un hombre con el rostro cansado y cicatrizado pero aun así muy feriz en compañía de un enorme perro negro que parecía muy excitado de estar afuera, mirando a todas direcciones en busca de un único objetivo.

Fue inevitable, apenas se vieron se precipitaron uno contra el otro, Sirius se soltó de la manos de Remus por el repentino tirón de a correa corriéndola directamente los brazo de su cachorro, quien o esperaba con os brazos abiertos cayeron ambos al suelo entre la risa risueña del menos y los ladridos de alegría del perro lamiendo toda la cara del joven, fue ahí cuando Tom se dio cuenta de que no importara si Harry hubiera permanecido a su lado el chico siempre seria un Gryffindor de corazón y eso no se podía cambiar y no molesto en lo absoluto al contrario lo alegro de cierta manera ya que no habían lograron corromperlo con todo lo que le lanzaron encima y sin duda seria mucho mas fácil para el dominar a esa casa si aprendía hacer mas con las serpiente.

Noto como Remus se acercaba a él rodeando al par que aun seguía en el suelo jugado como lo que eran un niño y su perro, estirando la mano para poder saludarlo como correspondía cosa que hicieron con agrado y volvieron a mirar la alegre escena que se desarrollaba delante de ellos, por unos momentos más.

- Bueno Harry ya levántate – dijo yendo a recogerlo – o terminaras empapado nuevamente.

Todos se sentaron se una esa alejada de la algarabía del día y intentando pasar desapercibido entre la multitud, Harry estaba sentado entre la pared y Tom para ocultarlo lo mejor posible, mientras conversaba con la emoción de un niño de cinco de todas las cosas que había hecho en la mansión, a pesar de a risa e el rostro del hombre lobo se podía ver a amargura en sus ojos entristecidos, era obvio que querían ere los que deseaban der le todo eso al menor.