Capítulo 20 - Un Siglo Sin Ti

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Punto de Vista de Erick.

Me sentía un completo idiota que no merecía perdón ninguno a pesar de que yo no hice nada. Estaba tomado, todo fue una confusión la cual Candela aprovechó para hacer daño y hacerlo bien. No lo entiendo ella quiere con Joel no conmigo, por qué tuvo que escogerme  a mí y sobretodo por que fui tan tonto y no me di cuenta antes de que no era María, dije que reconocería el tacto de sus labios hasta cuando estuviese muerto y ni tomado puedo hacerlo.

flashback.

Entro al baño ese que tiene azulejos blancos con un lavamanos a la izquierda de la entrada y un WC justo al frente, las luces apenas alumbran y a decir verdad es bastante triste. Entro para echarme agua fría en la nuca y en la frente todo me da vueltas, estoy un poco perdido. Enciendo el grifo y me mojo la mano para después pasarla por mi frente sintiendo como las gotas van cayendo sobre mi cara y la froto para quitarlas, sigo sin saber muy bien como estoy pero mejoraré tengo la esperanza. Me miro al espejo y no pienso en nada solo estaba ahí observándome sin hacer nada lógico.

la puerta del baño se abre y no logro ver bien quien es pero por su manera de abalanzarse sobre mí es María, me besa y me toca mientras desabrocha los botones de la camisa blanca que llevo, esto ya o habíamos hecho antes y sé que le encanta hacerlo en lugares públicos desde la primera vez que lo probamos en los baños privados de la universidad. Gime en mi oído y me encanta como gime y mas cuando es mi nombre, siempre deseé que así fuera y ahora que por fin lo he conseguido no pienso  privarme del gusto de seguir escuchándolo. La cargo en mis brazos y la coloco sobre mi regazo y voy besándole el cuello pasando mi mano por debajo de su camisa, es que es tan perfecta. Siento su mano bajar por mi abdomen hasta el cierre de mis pantalones, eso me excita a rabiar.

De repente dejo de besarla y la miro, hay algo en ella que no me cuadra, no siento la conexión de siempre.

La puerta se abre dejándome ver a Maria en ella, y con quien yo estaba encima no era ella, no era mi novia, era Candela.

Flashback

Fui un Idiota, ¿como no pude darme cuenta antes que no era ella?, simplemente Solo tenía que sentirla no era ella, mi corazón no se emocionaba. Frustrado golpeo la pared de mi habitación, me da rabia esto, me doy rabia a mí mismo, ¿por qué yo? Quiere a Joel, no a mi, por qué decidió que debía ser yo.

— ¡Que mierda todo! — golpeo con fuerza la mesita de deberes y se rompe, genial ahora mamá se enfadará.

—¿que pasa que es ese ruido? — la persona nombrada anteriormente entra en mi habitación. Yo estoy sentado en el suelo, sin ganas de levantarme pasándome la mano por el cabello intentando controlarme para no arrancarme la cabeza a mi mismo. Es ese momento que me doy cuenta de que por más que quiera explicárselo nunca me dejará hacerlo, simplemente me odia; no puedo olvidar su cara cuando me vio con la que fue su amiga. Sabía que por dentro quería que fuera una pesadilla y despertáramos juntos en su cama después de una noche de las nuestras, llena de pasión, caricias y besos. Los ojos se me llenan de lágrimas y entonces lo supe, la había perdido.

— La he perdido mamá — ella que se agacha a mi lado en cuanto las primeras lágrimas empiezan a salir y estoy totalmente desolado, como un niño pequeño me aferro a su brazo, mientras desahogo la pena y la sensación de vacío que ahora tiene mi corazón.

Punto de Vista de Maria.

Me juro un amor que no existía, evito que volviera a mi ciudad natal sabiendo que me iba para olvidarle, ahora lo comprendo ese fue su plan desde el principio, utilizarme, enamorarme, humillarme y engañarme. Me arrepiento mucho de haberme vuelto aquel día en el aeropuerto, debí de irme, ahora no estaría así, lo hubiese olvidado. Pero fui tan tonta que le bastaron dos frases para hacerme caer en su juego, su "amor" pero hasta lo que le hizo Hardin Scott a Tessa Young en la novela After se ha quedado en pañales comparándolo a lo que me ha hecho Erick.

En este instante me siento como Tessa cuando se entera que toda su relación con Hardin había sido una apuesta, me siento traicionada y patética, y que no quiero escuchar por nada del mundo las dos sílabas de su nombre.

Las lágrimas siguen rodando por mi mejilla mientras miro por la ventana hacia la calle, no hay nadie es muy tarde, solo queda iluminación por las farolas que hay.

— Toma, esto te hará sentir mejor. — Cris me ofrece una taza con una tila, ella y Andrea se fueron de la fiesta minutos después que yo y Sebas nos trajo a mi casa, Cris no me dejó sola y Andrea menos.

— ¿por qué mejor no duermes un poco? — me dice la novia de Zabdiel y yo niego con la cabeza sin mirarlas, solo observo la ventana y pasó el dedo pulgar por el borde de la taza de café. Solo quería sentir el dolor, la traición, solo así me daria cuenta de la mentira que he vivido durante dos meses.

— He hablado con mi mamá para dormir aquí, y me dijo que Erick ya había llegado a casa, que no sabe que le paso pero que está desolado. — ahora miro a Cris.

— por favor, no le nombres. — ella comprensiva asiente, la adoro, a pesar de ser su hermano la persona que está "desolada" en su casa, está aquí conmigo. Me levanto de la silla y me tumbo en la cama pero me doy cuenta del error que he cometido, mi almohada huele a él. Entierro el rostro en ella y aspiro, vuelvo a llorar.

Así estoy ahora Erick, tú lo quisiste, pero cariño esto no se va a quedar así.

El Que Se Enamora Pierde - Erick Brian Colón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora