Poles Apart | JJK [+18][✔] ©

|Cap ₄₀|Decisiones.

La lluvia no había cesado desde ese instante. Las gotas de agua reventaban contra mi ventana, causando un bochornoso ruido en mi oscura y a la vez solitaria, habitación. Me encontraba cubierta por todas las frazadas y cobertores de mi cama, hasta tapar mi nariz. Sentía la necesidad de dormir, sin embargo, antes de caer, la imagen de Jungkook se reflejaba en mi mente, impidiendo cerrar los ojos, pues cada vez que aquello sucedía, mi vista se volvía borrosa y las lágrimas se aproximaban.

Merecía este dolor, merecía más que esto, lo tenía claro. A pesar de ello, necesitaba a Jungkook, me sentía horrible, él ha sido la única persona con la que me había aferrado últimamente, y que de un día para otro ya no se encontrase en mi vida, dolía.

Dueles, Jungkook.

—___, ya son las ocho de la noche. Ya he ido a buscar la moto a la clínica, la he traído en la camioneta —entró Solar a mi habitación.

—Vamos a comer, linda. ¿Sí? —apareció Hwasa.

—No... No quiero... —hundí toda mi cabeza bajo las frazadas.

—¿Qué pasó con Jungkook? —Solar caminó a mi lado, para pronto sentarse en la cama.

—Nada, nunca pasó nada, tampoco pasará —salí de mi escondite para mirar a mis dos amigas, las cuales se encontraban sentadas a los lados de la cama. Expectantes a escuchar mis próximas palabras.

—¿Estás embarazada? —cuestionó la morena.

—No lo estoy... El resultado había sido erróneo.

—¿Qué te dijo él?

—Nada, ya no importa.

—¿Te sientes bien? ¿Ya no tienes fiebre? —Solar tocó mi frente.

—Me duele la cabeza... Tal vez si no se hubieran demorado una hora en darse cuenta de mi cuerpo tirado en el jardín... Estaría mejor.

—Oh, bueno, debiste llamarnos por teléfono —dijo la pelinegra.

—Dejé el móvil en mi habitación, hoy por la mañana.

—¿Y tu pie?

—¿Hablan del pedazo de yeso que tengo como nuevo amigo? —abrí el cobertor, destapando mi cuerpo y dejando a la vista el yeso en mi pie.

—Oh, fue una lesión grave... —hizo una mueca la rubia.

—Saltar el muro no fue la mejor elección... Pero si no lo hubiera hecho, estaría muerta de hipotermia.

—___, el muro mide seis metros, menos mal que no te lesionaste otra parte más del cuerpo... —regañó la morena.

—Tal vez tienes razón, de hecho, no tengo idea de cómo escalé el muro —ladeé la cabeza, un poco desorientada.

—Cuando te mejores podremos salir a realizar nuestro próximo robo, ¿verdad?

Jungkook ya no se encontraba en mi vida, sin embargo, sus últimas palabras se convirtieron en una advertencia. No me quería ver nuevamente en otro delito, sino, no tendría piedad. No otra vez.

—Claro... —respondí, sin hacerle caso a mis pensamientos. Sólo di la respuesta mas estúpida e insensata.

•••

Las muletas se habían convertido en mis enemigas, las odiaba. Si salía de mi cama, tenía que andar con esas estorbosas cosas, que a la vez me ayudaban a caminar.

Mi periodo me había llegado hace una semana, hoy era sábado y me encontraba en casa sin hacer nada. Aburrida de lo cotidiano y viendo películas con mis amigas como las últimas dos semanas después de aquel día. Hablando de Jungkook, no lo he visto desde ese día.