Choque Térmico

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P.O.V CAMILA

El mundo pareció desaparecer por algunos segundos.

Yo sólo podía ver el verde y él parecía quemar sobre mí. Pero el aire que provenía de ella era frío... muy frío. Era cómo desfilar desnuda por el Alaska. Mis instintos calientes me alertaron del peligro con todas las fuerzas, pero era casi imposible desprenderme de ella. Era intrigante... misteriosa... y extrañamente familiar. Mis instintos gritaban para que me alejara inmediatamente, pero un movimiento rápido me sacó del trance. Ella giró y se sentó sobre mi cintura, sus largos cabellos negros cayendo como cascada y rozando ligeramente mi rostro.

- No te enseñaron a mirar por dónde caminas, princesita? - La voz ronca vino cargada de burla.

- Sólo olvidaron de enseñarme cual era el camino correcto, cubo de hielo – respondí de la misma forma, girándome sobre ella y controlando la situación nuevamente.

- El camino equivocado puede ser peligroso... – giró sobre mí nuevamente, prendiéndome por los pulsos.

Aquello ya estaba quedando repetitivo.

- Yo no tengo miedo – susurré pausadamente, mirándola directamente en los ojos ahora azules casi grises.

Ella se aproximó lentamente de mi oído, su aliento helado alcanzándome en lleno...

- Pues debería – susurró amenazadora, erizando cada pelito de mi nuca.

Ella levantó su cabeza para mirarme y casi me asusté. Sus ojos estaban completamente blancos, de las esquinas algunas venas rebeldes saltaban. En poco tiempo comenzó a llover sobre nosotras. El contacto contra el agua helada me hizo temblar, ya que el agua me debilitaba miserablemente. La sonrisa que pendía en la esquina de sus labios estaba irritándome profundamente.

- Puedes parar con esa mierda? - dije irritada, debatiéndome inútilmente debajo de ella, intentando desviar de los chorros de agua.

- No que no tenías miedo? - Arqueó una ceja y la maldita sonrisa de esquina permaneció allí, intimidándome.

- Y yo n-no tengo – respondí firme a pesar de haber tartamudeado por el frío, ella no iba a conseguir intimidarme.

La lluvia se hizo una ventisca, mis dientes comenzaron a tiritar ligeramente. Mis huesos estaban doliendo y mi cuerpo entero temblaba, pero aquella sonrisita y mirada divertida me llevó al extremo de la rabia. Liberé mis brazos del aprieto y golpeé el suelo con fuerza, apretando el césped mojado entre mis dedos. Un leve temblor ocurrió en el suelo bajo nosotras y enseguida llamas de fuego se levantaron a nuestro alrededor, como si una inmensa hoguera estuviera envolviéndonos. Sostuve su mirada - que ahora era de espanto - y abrí una sonrisa victoriosa y un tanto cuánto burlón.

Pero a ella ni le afectó... La nieve continuó cayendo sobre nosotras, siendo consumida por las llamas que yo producía. Podría incluso decir que lo que ocurría a nuestro alrededor, traducía perfectamente lo que nuestros ojos querían decir en aquel momento.

- Lauren... Ya basta – una voz femenina sonó en medio del caos.

Ella sostuvo la mirada por más algunos segundos y entonces ella sopló sobre mi rostro... y juro haber visto algunos copos de nieve brillar en medio al soplido. O realmente me estaba volviendo loca. No fue un soplido para hacerme tener frío como antes, fue lo suficiente para hacerme sentir su hálito de menta y hacer con que los mechones de mi cabello se balanceen levemente.

- Intenta andar por la sombra, princesita del verano – ella dijo con su voz raposa

Será que ella piensa que puede vencerme así?

Ice and Fire - TraducciónWhere stories live. Discover now