Ice and Fire - Traducción

Tregua

P.O.V LAUREN

Continué golpeando la puerta aun sabiendo que sería inútil.

- Detente! Déjame intentarlo - La latina petulante me estiró por el brazo y se metió en frente de la puerta con una mano erguida.

- Eso es inútil, la puerta está hechizada - rodé los ojos.

- Entonces por qué estabas intentando abrirlo? - Llevó las manos en la cintura y me miró incrédula.

- Porque es mejor golpear una puerta hechizada de que tener que pasar la noche aquí contigo! - Observé su expresión cerrándose antes de darle la espalda.

Caminé entre las estanterías en dirección a la parte trasera de la biblioteca.

- Hey, espera! No me dejes aquí sola! - Escuché sus pasos apresurados atrás de mí.

Entonces la princesita tiene miedo de la oscuridad? Interesante.

Continué caminando hasta sentir el cuerpo caliente chocándose contra mi espalda y pegándose en mi cintura... maldita.

- Ya te pedí que no me tocaras! - dije mientras arrastraba la chica que estaba pegada hecho un mono en mí.

- Sácame de aquí entonces - Susurró en mi oído, su respiración caliente golpeando en mi nuca haciéndome parar de andar bruscamente debido a los escalofríos que eso me causó.

- No me provoques - cerré los ojos y respiré hondo.

Como ella tiene la osadía de hacer eso conmigo después de todo lo que pasó? Si ella está queriendo enloquecerme, bien, está consiguiendo.

- O que harás? - Susurró nuevamente de forma provocadora.

Intenté ignorar los escalofríos que provocó con aquel acto y el hecho de tener su cuerpo pegado al mío de aquella forma. Agarré sus manos que estaban en mi cintura y me volteé lentamente para encontrar sus ojos de avellana encarándome intensamente. Llevé mis manos hasta su rostro y fui aproximándome despacio. Cuando nuestras respiraciones ya se mezclaban, ella cerró los ojos y yo me aproximé de su oído.

- Te dejaré sola en la oscuridad - susurré, antes de salir corriendo.

Miré por sobre mis hombros mientras corría y la vi estática con los ojos abiertos. Me escondí atrás de un estante y me quedé observándola. Ella miraba asustada para todos los lados.

- LAUREN, DESGRACIADA! - Gritó antes de correr en la dirección en que yo había corrido antes. - CUANDO TE ENCUENTRE VOY A FREÍRTE LAS NEURONAS - Continuó amenazando mientras me buscaba por los pasillos.

Aguanté la risa, mientras la veía en pánico en aquella oscuridad. Ella paró de repente y dio una risita malvada. Continué escondida, sólo observando sus movimientos. Ella abrió los brazos y en pocos segundos dos bolas de fuego nacieron en las palmas de su mano, iluminando todo el camino.

Joder.

- Vamos a ver si todavía lo encuentras gracioso, Jauregui! - Ella dijo mientras volvía a caminar, tirando los balones de fuego para cima como si fuera una malabarista profesional del mal.

Me aproximé un poco e hice un movimiento con las manos. Luego ella estaba toda encharcada de agua y la oscuridad se esparció por allí nuevamente.

- Cobarde! Por qué no me atacas de frente? - Ella gruñó furiosa y sus brazos volvieron a encenderse.

Sólo que esa vez, el fuego recorrió hasta sus hombros... ella quedó realmente muy enojada conmigo. Si no actúo rápido, ella iría a colocar fuego en la biblioteca entera! Y eso no sería nada bueno.