Capítulo 3

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—¿Por qué lo has hecho Kaia?.—Preguntó mientras se arrodillaba frente a mi quedando a mi altura.

—Señor déjeme hacerlo a mi.—Comentó el guardia asignado para hacer mi desentierro,Raguel se levantó bruscamente y yo cerré mis ojos dejando que lágrimas cayeran una y otra vez por mi mejilla.

—Lo haré yo.—Sus palabras salieron bruscamente haciéndome mirarlo.'El no por favor' rogaba dentro de mi porque no sería capaz de verlo hacerme eso.Negué mientras le rogaba mentalmente que no lo hiciera.

—¿Está seguro señor?.—Preguntó el ángel mientras Raguel me miraba y yo negaba suplicando.

—Lo haré yo.—Repitió.

El ángel le dio las armas las cuales el utilizaría para arrancarme mis preciadas alas.Raguel sin dudar las tomo en las manos listo para comenzar su trabajo.Raguel se incorporó detrás de mi una vez el ángel se había marchado dejándome atada con unas cadenas en mi muñecas para que no escapara.Mis rodillas comenzaron a doler por el piso sin terminar de hacerse.Mis ojos se cerraron al sentir las manos de Raguel tomando una de mis alas y acariciandolas.

—Todavía no puedo creer lo que has hecho.—Acaricio una de mis plumas suavemente.

—No creíste en mis palabras.—Susurré entre aquel nudo que tenía formado en mi garganta.

—Como voy a creerlas si tú misma confirmaste ir a ese lugar.Si necesitabas un lugar yo pude haberte dado uno para que pudieras estar sola y llorar.—Eso fue un pequeño golpe para mi corazón.—Te hubiera dado lo que me pidieras con tan solo pedirlo por tal de verte triunfar y verte feliz.

—Lo siento.—Agaché mi cabeza mientras dejaba escapar más y más lágrimas.Raguel sin previo aviso arrancó una de mis alas haciéndome soltar un grito de dolor.Más lágrimas caían pero estaba vez en alta voz gracias al dolor que sentía justo ahora para luego volver a gritar al arrancarme la siguiente ala.

Sentía la sangre caer por mi espalda,sentía mi espalda arder como si me hubieran pegado una vela en ella.Las lágrimas salían sin para al igual qué uno que otro gemido de dolor pero el dolor era más fuerte en mi alma y mi corazón.Sentía como mi diminuto corazón terminaba de romperse,sus manos lo hicieron,el lo hizo.¿Por qué?,¿Por qué el?.
Sentí un pequeño corretaje para luego ver unas fuertes manos levantar mi rostro para que lo mirara a los ojos.

—¿Qué has hecho?.—Preguntó Miguel hacia Raguel al verme.Sus dedos comenzaron a limpiar las lágrimas que caían sin secar para luego darme un pequeño abrazo.

—¿Qué haces tú?.—Preguntó Raguel en forma molesto.

—¿Por qué lo has hecho tú?.—Miguel se separó de mi para incorporarse rápidamente cerca de Raguel.

—Quise hacerlo yo.—Respondió Raguel molesto.

—La has destrozados por solo ser tú.—Mire rápidamente a Miguel captando su mirada para pedirle que no lo haga,que no se lo diga.

—Ella..—Miguel lo cayo.

—Acaso sabe quien es ese hombre por el cual ella no pudo estar con nadie más.—Habló Miguel sin apartar su mirada de la mía.

—No..—Pedí en apenas un susurro.Miguel miro a Raguel cambiando la mirada a una totalmente molesta y decepcionada.

—¿Por qué sacas ese tema?.—Preguntó Raguel y Miguel respiro profundo antes de decirlo.Decir esas palabras qué desee que el nunca supiera,esas palabras que hicieron que no pudiera mirarlo nunca a los ojos.

—Eres tú Raguel.—Soltó.—Eres tú de la persona que ella esta profundamente enamorada.—Repitió.

—¿Qué?.—Sentí su mirada en mi.

KAIA.[✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora