|°Capítulo 21°|

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[Flash-back]

Jungkook colgó en su hombro su mochila color azul, miró el reloj en su muñeca y bufó por sexta vez en la mañana. Jungkook solo se preguntaba: ¿Ha llegado a dar clases? Y Jungkook se mordió su labio inferior.

¿Y si le había ocurrido algo? Jungkook jugó con el dije colgando de su celular rosa. Sintió la preocupación pasar por su cabeza.

—¿Joven Jeon, no piensa entrar a clases? —y Jungkook sonrió dándose la vuelta, tratando de no dejarse llevar y saltar a los brazos de su profesor.

—Perdone profesor, necesito hablar con usted. —el hombre hizo una mueca y miró hacia el salón de clases. Cerró la puerta y devolvió la mirada a Jungkook.

—¿Qué pasa, Jungkook? —preguntó tratando de evitar llevar una de sus manos hacia el cabello de su alumno y acariciarlo tanto como acostumbraba a hacerlo en las tardes cuando se encontraban—¿Está todo bien cariño?

Jungkook asintió y bajó la mirada.

—Solo... hoy no podré ir a tu casa, Takahiro. Kaito y Mei me invitaron a una fiesta y realmente quiero ir.

—No irás. —Jungkook mordió su labio inferior—¿Por qué hablas como si estuvieras afirmado que no irás, Jungkook? Sabes que primero debes preguntarme si puedes ir. —Jungkook sintió un agarré en su muñeca—Irás a mi casa, quieras o no. No te dejaré ir a esa fiesta con Kaito, él solo quiere aprovecharse de ti, bebé. —Jungkook levantó la mirada y soltó un tipo de gruñido.

—Kaito es mi amigo. No eres mi padre para decirme qué hacer y qué no.

—No irás. —apretó aún más su agarre y Jungkook se quejó, soltó un leve gemido de dolor y trató de soltarse—Saliendo del colegio irás a mi oficina y vamos a ir a casa.

—Me estás lastimando Takahiro, suéltame. —se quejó de nuevo, sabiendo que quedaría una marca más en su piel, otra más a la lista.

Jungkook sollozó y esperó a que el hombre se relajara, que se tranquilizara y soltara su muñeca.

Jungkook solo deseaba que pasara rápido, que llegara la noche y tuviera que ir a casa, sintiéndose protegido en el interior de sus suaves sabanas, o con su madre y su padrastro viendo películas en familia, sin tener miedo de enojar a su pareja, de enojar a su profesor.

—¿Está todo bien? —la voz de un chico se escuchó tras que abrieran la puerta del salón de clases. Kaito estaba con el ceño fruncido, observando la mano de su profesor apretar con fuerza la muñeca de Jungkook—Profesor, lo estamos esperando. —informó interponiéndose entre Jungkook y el mayor. El profesor soltó a Jungkook con disgusto y acomodó su maletín entre sus brazos y entro al salón de clases.

Kaito se volteó y tomó la muñeca, de Jungkook mirando al chico con lastima una vez le observó tallar sus ojos llorosos.

—¿Por qué dejas que ese imbécil te trate así, Kookie? —el mencionado negó y apartó la mano de su amigo, ignorándolo y entrando al salón con sus demás compañeros.

Kaito solo volteó a ver a Mei, su mejor amiga –y mejor amiga de Jungkook-. Se compartieron miradas de pena y tristeza.

Jungkook llevaba alrededor de dos años siendo pareja de su profesor de química. Él castaño se había enamorado de inmediato al momento de verle entrar por primera vez a su salón de clases.

Jungkook estudiaba gastronomía y se encontraba en su último año, solo le faltaban alrededor de dos meses para graduarse, solo necesitaba soportar unos pocos días más para salir de allí con un gran título y poder hacer lo que siempre había amado desde pequeño. Abrir un restaurante.

Prohibido (Jikook) [Adap.]Where stories live. Discover now