Capítulo 28

83 5 0
                                    

Llevamos a los policías a otra edificación, una fábrica vacía y enorme. Daryl se había topado con otro policía. Ahora teníamos a tres rehenes, suficientes para intercambiar la seguridad de mi hermana y Carol. Noah y Rick planeaban el siguiente paso mientras los demás guiábamos y cuidábamos de los rehenes

- ¿Como se llama su amigo? - preguntó la señora, nadie le respondió - necesito hablar con él, su plan nos matará a mis amigos y a mi

- Vamos a hacer que funcione - respondió Sasha con simplicidad

- Funcionaría si tuvieran a otro policías para ofrecer - nos detuvimos y la miramos confundidos - Dawn está echando a perder el hospital, algunos queremos echarla, y ella lo sabe. También seguro sabe que queremos a Lamson en su lugar

- Dawn no sabe eso - dijo el nuevo rehén, un hombre grande, calvo pero indefenso en el momento

- Tal vez si y es lista. Así que es muy probable que este trato no funcione, y acabemos todos muertos - nos miramos unos a los otros - Pero si nos dejan ir, nos encargaremos de Dawn nosotros mismos, luego liberaremos a sus amigos y esto se habrá acabado

- No, no haremos eso - dijo el oficial al que le pegué, Lamson si no me equivoco

- ¿Quieres morir? - le preguntó su compañera

- No, solo quiero que te calles ya mismo - nos volvimos a mirar confundidos - Pueden hacerlo funcionar pero tiene que saber convencerla

- Noah nos explicó bien como es - contesté

- Llevo ocho años con ella - respondió - conozco a esa mujer, lo único que deseo es resolver esto de manera pacífica, no morir y dormir en mi cama esta noche. Así que, por favor, permítanme ayudarlos. Por favor 

Tyreese y yo nos miramos, este tipo se había puesto raro de golpe pero Lamson parecía un hombre que decía la verdad. Sasha subió su arma y Daryl se dio la vuelta

- Rick, ven a escuchar esto

Rick se acercó hacia nosotros junto a Noah, Daryl susurró algo a su oído. El jefe hizo una seña para que llevaran a los otros, los hermanos se hicieron cargo de ir a dejarlos, los seguí. Amarraron pies y los hicieron descansar contra un poste

Tenía un poco de tiempo libre, empecé a darle vueltas a mi lanza entre mis dedos, fingir que golpeaba algo con vueltas y tiros directos sin dudar. Sabía que los dos policías me estaban viendo pero no me importó

- ¿Quien te enseñó a hacer eso? - preguntó el policía nuevo

- No les interesa - dije sin detener mis movimientos

- Escúchame - dijo la mujer, no lo hice - su plan no funcionará. Necesitan de nuestra ayuda, se que podemos solucionar esto

Me había cansado de oírla, tengo más secretos de mi padre y aquí va uno, alguien que esta en problemas es capaz de hacer y decir lo que sea con tal de salir vivo. No iba a creerles pero eso no significaba que tendría que escucharlos libremente

Me acerqué a la señora y le apunté con mi lanza, ella alejó su cara un poco y se calló. Me incliné un poco sobre ella y vi como entendía la indirecta. Quité mi arma de su cara y retrocedí sobre mis pasos

- Reconozco esa medalla - dijo, me detuve y la miré confundida - ¿es una chapa de militar no es cierto?

Miré a mi pecho y noté como el collar se había escapado de su lugar, revisé el alrededor y vi que nadie nos estuviera poniendo atención. Tomé la chapa y la metí debajo de mi ropa, me quedé viendo a la señora con enojo, por un accidente mío ella sabía algo de mi

Unidos En El ApocalipsisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora