Draco Malfoy y el mundo mágico

No basta maldecir

Le insistí a Severus para ir primero a la tienda de madam Malkin. Quería retrasar lo mas posible mi encuentro con los Weasley.

Entre a la tienda de túnicas solo, Severus me habia dejado un momento para ir a la tienda de calderos. Durante el primer año, recibir los cursos avanzados de pociones, habia hecho que desgastará mi caldero, se había formado hoyos en el fondo y se estaba descascarando, Severus me tuvo que comprar dos calderos para seguir cumpliendo con las practicas y las clases.

-oh, querido, quítate la capucha! -exclamo madam Malkin sorprendida -casi me matas de un susto

-Disculpe madam -dije con vergüenza, me quite mi chaqueta con capucha.

Pude ver el rostro sonrojado de madam Malkin y su ayudante.

-Un gusto de volver a verla -dije educadamente

-oh, querida... usted es? -dijo nerviosa madam Malkin

-Soy Draco Malfoy, madam, no se acuerda de mi? -sonrie con amabilidad

-oh! el hijo de lord Malfoy -dijo sobresaltada la señora -Disculpe mi rudeza anterior

-No importa, madam. Vengo por unas túnicas nuevas para el colegio

-claro! claro!  pase al taburete -me señalo el pequeño banquillo frente al espejo

Subí al banquillo y mire mi imagen, mi cabello había crecido mas largo, pero no tanto como para llegar a la cintura, mis ojos tenían un brillo húmedo, mis labios rojos, mi nariz pequeña como un botón, todo gritaba inocencia y a la vez habia cierto toque femenino. Eso me habia hecho saltar en mi corazon. 

Madam Malkin demoro unos momentos y trajo unas tunicas, las coloco encima mío y empezo a trabajar con su aguja. En ese instante sonó la campanita de la puerta, mire de reojo a los reciente llegamos, era un pequeño niño de cabellos marrones y ojos castaños, su rostro era redondo y tenía un toque tímido en sus actos, una ayudante se acerco a los recién llegados y luego envió al niño al taburete junto al mío. Veo por el espejo a la mujer mirandome con un furioso sonrojo y a un niño pequeño con clara timidez y una chispa furiosa de admiracion hacia mi persona. 

Miro al niño a mi lado, al parecer estaba muy nervioso, miraba a todos lados y luego a mi. Parece que se movió por la sorpresa y exclamo un "auch"

-querido, quedate quieto -dijo la ayudante de madam Malkin. Sonreí divertido

-Estas nervioso? -pregunte al niño a mi lado. 

El niño me miro muy tímido pero asintió

-Eres nuevo, verdad?

-s-si...

-Eres de nacidos magos o no magos? 

-m-mis padres son normales, no tienen magia -asentí en compresión -t-tú... eres de padres mágicos?

-Asi es -dije mientras madam Malkin traía otra túnica y la ponía encima de mi -pero eso no es importante. Dime, has oido hablar de hogwarts?

-Claro! -dijo el niño un poquito mas alegre -me sorprendí cuando me llego la carta

-me imagino... cual es tu nombre?

-Colin, Colin Creevey

-Bueno Colin, espero que tu estadía sea buena en Hogwarts. Dime, en que casa te gustaría quedar? -pregunte. El niño pareció meditarlo

-Creo que Hufflepuff pero no estaría mal gryffindor -dijo algo sonrojado

-Que hay de las demás casas?

-Ravenclaw y Slytherin? -el niño lado la cabeza -pues creo que Ravenclaw es para las personas inteligentes, yo soy algo perezoso -dijo Colin con vergüenza -en cuanto a slytherin -frunció el ceño -he escuchado que todos los magos malvados salen de esa casa