Su Amor, su dolor.

😢T E N😭

La tarde pasaba, Chile y Perú aún compartían con Argentina esas mismas horas para poder animarlo. Aún no decía cuáles eran aquéllos problemas que tanto lo atormentaban y sinceramente el biceleste no estaba preparado para contarlo. Solo habían pasado seis días de aquélla traición y cuatro años de tanta tortura para sus hijos.
Por su cabeza paso la imagen de Malvinas y Soledad para luego distorsionarse a la imagen de Chubut y Santa Cruz, de verdad... ¿hace cuánto que no los iba a ver? Ya tenía tiempo de no hacerlo. Se paro de aquella silla que lo hacía parte de la convivencia con aquél duo que ya muchos conocían, simplemente se retiró del comedor, más Perú no tardo en levantarse e irse atrás de él cómo si fuera un imán.
Perú, por su lado, estaba dispuesto a darlo todo por estar al lado de su amor casi imposible; Argentina, sin percatarse que Chile hacía lo mismo por él.
Chile sentía un profundo odio hacía el Argentino, ¿por qué tiene que ser él? ¿por qué Perú no se da cuenta lo aquél tricolor tanto da para estar cinco minutos a su lado? Era injusto, pero no podía hacer nada, absolutamente nada. Perú siempre iba a estar enamorado de Argentina no importaría si habría alguien en medio, su amor por él lo haría fiel a él aunque no estuvieran juntos.
El de aquélla estrella en parche moría de celos por dentro, aquél pequeño Peruano nunca se fijaría en él a no ser que ese Argentino desapareciera o lo rechazará de forma cruel, y no es que quisiera ver llorar a su niño, claro que no. Porque dentro de esa cabeza había otra idea que seguro resultaría si tuviera exactamente la ayuda necesaria.

Mientras tanto en el hogar de aquélla potencia fría, se encontraba México aterrizando con su mascota puesto que tenían una importante reunión y asuntos que atender con Russia, no estaba dispuesto a verlo luego de todo el engaño que su querido Sol dorado había sufrido por aquél poste de hielo.
Todavía no se ha declarado, pero si es consiente de lo que siente por aquél biceleste, solo necesita una idea increíble para poder enamorarlo. Conocerlo un poco más, llegar un poco más a su corazón con algún detalle que solo a Argentina le encantará.
Sería difícil averiguarlo, pero valdría la pena hacerlo con tal de tenerlo a su lado.
Mientras tanto, Russia averiguaba cada paso que su querido Argentino estaba dando, ya sabía que estaba con Chile y con Perú en su casa gracias a un informante anónimo que había pagado más también tenía en cuenta lo que estaba pasando con Santa Cruz y Chubut, era la situación perfecta para poder recuperar a su ex novio a toda costa.
Allí, en esa misma ventana, el mundo se encontraba frente aquél del portador de Ushaska. La puerta de aquélla enorme oficina se abrió, uno de sus asistentes llegaba para informar.

ㅡсэр, Мексика прибыла [Señor, ha llegado México.]

ㅡСделай это... [Hazlo pasar...]ㅡ Russia estaría dispuesto hasta incluso a romper tratados con tal de volver con su amado, pero para ello, tendría que deshacerse de un obstáculo:

México.

Y lo haría sin importar el coste, solo tendría que jugarle una muy mala pasada para que cometiera el único error que haría que Argentina lo alejara de su vida, para siempre. Con eso hecho, él aparecería de nuevo para recuperarlo, era un plan bastante ingenioso. Pero necesitaría ayuda y sabía a quién conseguirsela.

ㅡRussia...ㅡ La voz del latino norteamericano lo saco de aquélla imaginación que hasta entonces era posible.

ㅡМексика... ¡Bienvenido!ㅡ Exclamó Russia con una sonrisa bastante alagadora y simpática.

México estando con su portafolios solo tomó asiento en la silla de frente al escritorio del dueño de aquélla oficina enorme y espaciosa con detalles amplios de madera rústica de aquél país de nueve meses de invierno.
México parecía ser bastante distraído, pero no era ningún tonto al que podían tomarle el pelo, no, por supuesto que no.
En su mente ya estaba con la idea de que Russia no solo lo había llamado para consultar sobre alguno de sus tratados o contratos, si no, que era algo más allá. Aún así, tenía que mantener su postura firme y decisiva, sea lo que fuera a pasar pasaría y él daría el NO asegurado para Russia. Jamás caería en sus trucos.

ㅡ¿Alguna vez oíste de la venta de Soledad y Malvinas? Hoy día se han de llamar las gemelas Falklands.ㅡ Dijo Russia mirando de lleno a México.

Se sorprendió; ¿Era Argentina capas de vender a aquéllas niñas que tanto lloraba por su ausencia?

ㅡRussia, por favor... ¿yo que tengo que ver con eso?ㅡ México trato de desviar la conversación. Aunque no lo podía evitar, la curiosidad comenzó a invadirle la cabeza. ㅡAdemás, Argentina jamás haría eso, sí no...ㅡ

Russia lo interrumpió de forma amable, esa sonrisa "triste" ante aquélla mentira tan vil.
Más solo tomó los papeles que él mismo había hecho, el tricolor vertical caería en aquélla trampa.

ㅡ¿Quieres apostar por la venta de Santa Cruz y Chubut? Es decir...ㅡ Rió de forma amarga, cuál protagonista dolido en novela. Ese sería su papel. ㅡPatagonia fue arrebatada de Chile, vendió a Soledad y Malvinas, también le quitó hijos y parte de su gente a Paraguay... solo piénsalo.ㅡ

México miro esos archivos, Santa Cruz y Chubut estaban en contrato de pertenencia, más un papel que le llamaba la atención.

"Zona centro, Aguascalientes. Tierra Mexicana a la venta."

México estaba... enojado, furioso, confundido.
En esos papeles figuraba firmas de Argentina, las lágrimas se veían. Ya estaba cerca de un colapso.

Mi querido México... si tan solo supieras la mentira que te haz tragado.

ㅡApuesto por ese maldito traidor, ¡NADIE ME QUITA A MIS HIJOS!ㅡ Fue la sentencia final de México.