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Mal despertó, su humor parecido ser peor que el de su madre cuando el desayuno no estaba listo, pero al verse en el espejo pareció tener aquel frío semblante, se alegraba que Ben había salido antes. ¿Evie la había traído?, ¿Por eso estaba tan rara? Entonces esa era la respuesta a sus problemas, tenía que averiguarlo, hacer que Evie sacara sus dudas y haría todo por eso. Se alisto con aquella autentica ropa de cuero que hacia las curvas de Mal más deseables de lo que alguna vez Zevon soñó. Camino con esos aires, tan ególatras atrayendo la mirada de algunos, no sabía que pensar, las imágenes de CJ tomando de la cadera a Evie le hizo sentir el infierno en su interior, al llegar toco con suavidad mientras que una sonrisa fingida se aparecía por sus jugosos labios color carmín. La miro salir con ese rostro lleno de inocencia que le hizo sonreír marcando aquellos hoyuelos distinguidos de Mal. Tenia que sacar esa respuesta como de lugar, tenia y eso era lo que en su mente coronaba.

- Mal... ¿Qué haces aquí tan temprano? -

-Vengo a hablar contigo. - Evie sintió confusión, ¿Desde cuándo Mal venía a esas horas? Le dio el paso a su perdición, Mal entro cerrando la puerta mientras se recargo en la puerta - Sabrás que hay nuevos niños en Auradon por la iniciativa de Ben - Hablaba con ese tono ronco, Evie se sintió derretir, ¿Por qué tenía tanto poder sobre ella?

- Lo tengo claro, pero... -

- CJ está aquí, es obvio porque ya lo sabes, ¿no? - Alzo una ceja ligeramente confundida, ¿saberlo? Ella estaba maldiciéndose, estaba tan nerviosa de verla caminando por los pasillos del instituto y estaba segura de Mal se la había encontrado, ¿Por qué sentía miedo?

- ¿Por qué habría de saberlo? -Mal dejo escapar una risa sarcástica separándose de la puerta acercándose peligrosamente a Evie, quedaron tan cerca que sus respiraciones se mezclaron.

- ¿No lo sabias...? Estaba lo suficiente segura de que lo sabias, E - Ronroneo alzando una ceja mientras que mordía su labio inferior, ¿Qué hacía?, Necesitaba esa respuesta, no se sentía tranquila de alguien tocando su territorio, su nuevo hogar y a su mejor amiga, si Evie era culpable entonces iba a hacer algo peor, algo que la hiciera arrepentirse de haberla traicionado de esa forma.

- Mal... - su hablar se cortó, un suave e inesperado beso logro callar sus quejas y su habla. ¿Mal estaba besándola? Sus labios eran como los recordaba, tan carnosos y besables, Mal recorría su cuerpo con esa mano tan fría. Se sentía soñar, el primer empujón fue contra la pared. Era la Mal que añoraba, besos sonoros y jadeos era lo que abundaba su habitación todo por una respuesta. Evie correspondía a cada caricia, sentía su sexo tan mojado por el suave toque de Mal, su respiración tensa y sus labios ensuciados por ese rojo de su labial. Aquellas manos frías recorrían las piernas de Evie que se sentía flaquear en cualquier momento, sin duda alguna Mal sabía lo que hacía, sabia como hacer gritar a alguien y hacer que sintiera obsesión por ella

- Me perteneces... - Susurro Mal cerca de ella, se sentía el calor subir por su cuerpo, la habitación parecía ser tan pequeña para ambas, besos, mordidas y gemidos era lo que adornaba.

- Siempre voy a pertenecerte - Respondió bajamente, era lo que quería. A su chica... su gran amor teniéndola contra la pared y...

La alarma sonó, Evie se sobresaltó sintiendo sus mejillas sonrosar y su cuerpo temblar mirando su habitación vacía pero aquella esquina, había sido un sueño, sus piernas se cerraron de golpe y tapo su boca con su mano, Mal... La necesitaba tanto, se dejó caer sobre su cama. Estaba tan metida en sus pensamientos que su mano recorrieron su cuerpo recordando fugazmente ese sueño, la necesitaba, mucho.

[...]

CJ miraba aquel ventanal que daba a la isla, ¿Porque nadie notaba lo mal que estaba? Tenía que terminar esto cuanto antes, seducir a Evie, quitarle la lealtad hacia Mal y llevársela con ella, tenía que hacerlo y ganarle a Mal. Destruirla y dejarla sola como cuando era una mocosa. El enemigo de Mal era la soledad y eso cualquiera podía notarlo tanto que usaría eso a su favor.

- Serás mía Evie... - Musito para poder mirar su reloj de bolsillo. - No importa cuánto me tarde, vas a servirme únicamente a mi -

CJ era consciente, si no lo hacia entonces tendría que huir sin Harry y Harriet a Neverland. Abrió sus ojos cuando los toques en la puerta se escucharon, camino abriendo la puerta para poder mirar a un niño - Mas te vale mocoso no hacerme perder...-

- Uma quiere verte...- Su ser pareció temblar, sus manos sudaron.

Eso sin duda no era algo bueno, ¿¡No tenia avances?! Trago saliva asintiendo. - Entendido...-Aunque su mente pensó, ¿Como podría comunicarse? Uma tenia planes bajo la manga o bajo su tentáculo.

𝙄𝙩 𝙬𝙞𝙡𝙡 𝙗𝙚 𝙤𝙪𝙧 𝙨𝙚𝙘𝙧𝙚𝙩.| 𝘔𝘦𝘷𝘪𝘦 𝘧𝘢𝘯𝘧𝘪𝘤𝘵𝘪𝘰𝘯Kde žijí příběhy. Začni objevovat