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Las mentiras no eran su fuerte, Evie parecía temblar mientras que tenía una mirada expectante, esa mirada verde que parecía clavar cuchillos.
— Es Doug, mira...— Eso fue un error que cuando le enseño la pantalla ese nombre pareció adornar toda la pantalla sin darse cuenta.
— Doug...—
— ¡Mal!, ¿Cuando habrá otro baile? Estoy ansioso de degustar más de los banquetes que traen los Oceanne — bromeo Jay mientras que se colgaba del hombro de ella
— Pronto — pero su mirada no se despego de Evie.
La tensión se sintió cuando Carlos y Jay se dieron cuenta de cómo Mal la miraba, esa mirada frívola y retadora no se había esfumado aún con el pasar de los meses. Mal nunca dejaría sus raíces y esos ojos neon que se encendían cuando sentía... ¿Enojo?
— Mal...— Evie artículo una palabra cuando Mal se había levantando mientras que sonreía forzada y abría sus ojos un poco haciendo una mueca después.
— Iré a dormir, creo que Ben está esperándome — musitó.
Se sabía que los ahora reyes compartían habitación, aún con esa pequeña barrera de almohadas que algunas veces Ben rompía por alguna razón.
— Descansa...— dijeron Carlos y Jay al unisono mirándola irse.

Evie comenzó a sentir... ¿Que sentía? Se levantó en seco mientras que sonreía tomando su bolso, no era un bolso, era su vida.
— ¡Nos vemos después chicos! —
— Y allá va...—
— Detrás de la doncella, llévate un poco de pan de mermelada seguro me dará hambre en la madrugada — sugirió Jay.

Mientras más caminaba su corazón se sentía explotar, ¿Mal estaba enojada?, ¿¡Por qué le importaba tanto si ella se iba!?
— Mal... ¡Mal! — corrió un poco pero se detuvo quedando frente a ella, Evie sintió sus piernas flaquear en segundos.

— ¿Se te ofrece algo? — cuestionó
— Solo... Vamos, ¿Por qué habrías de estar enojada? — bromeo torpemente mientras que reía nerviosa, ¿Acaso se encelaba de Doug? Eso hizo que parte de ella diera cosquillas.
— ¿Estoy enojada? — dijo con esa sonrisa socarrona — Creo que deberías contestarle a CJ — Murmuró pero entonces cayó en cuenta de por qué sus ojos brillaron tan intensos cuando miraba la pantalla.

» Oh no...«

— ¿Qué? Acaso creíste que no me daría cuenta que tú la trajiste aquí. A veces creo que eres demasiado torpe — Mal comenzó a caminar en dirección a su edificio
— ¿Acaso pienses que yo lo hice? — hizo hincapié en la palabra provocando que su sangre hirviera, ¿Entonces ella no confiaba?
— Tómalo como quieras — alzo sus hombros mientras que sonreía egocéntrica
— Entonces no confías en mí, ¿No? — Evie comenzó a dar pasos lentos mientras que la ponía contra una de las paredes su mirada pareció denotar esa molestia creciendo en su interior
— Trajiste a alguien con olor a pescado a mí territorio, ¿Debería hacerlo, morita? —
— Escúchame una vez... Por... Primera vez...— Y ahí estaban, sus respiraciones estaban tan cerca y sus ojos se conectaban.
— Evie... Aléjate — amenazó
— No. — y la tomo de las manos mientras que sus mejillas ardían en ese color carmín
— Hazlo, espera no...— Y ahora Mal se sentía tan acorralada. ¿¡Desde cuándo habían cambiado los papeles?! — E-Evie — balbuceo cuando sintió sus labios chocando contra los suyos.

Nadie pasaría por los pasillos... ¿O sí? Eso no pareció importarle a Evie, sus labios se movían con tanta necesidad que por primera vez Mal quedó atónita. ¿¡Estaba besándola?! Parte de ella no se molestó incluso quiso tomarla del cuello y atraerla pero su parte conciente obedeció aún más provocando una mordida en los labios ajenos.

— Basta...— Mal se aparto de inmediato mientras que la miraba sonrojada y huyó, como parecía hacerlo muy amenudo.

[...]

CJ esperaba ese mensaje, parecía un cachorro yendo de un lado a otro haciendo sonar las botas contra la madera. Dió un gruñido al no recibir respuesta tanto que su estómago a gruñir de hambre, ahora sabía que tenía que llevar comida.
— Maldita sea. — gruñó tomando su móvil y una sudadera que al parecer era de regalo. Salió mientras que miraba constantemente su celular

No sabía que conseguir primero, ¿A Mal o a Evie? Tal vez su orden era tener a uno para llevar a Mal a la isla pero a su vez podía obligarla con cualquier secreto que tuviera en sus manos.
Hizo una mueca, parte de ella ansiaba conocer ese mundo, tal vez viajar y conocer las maravillas de los siete mares, ¡Tal vez podría por primera vez tocar el mar y la arena sin temer ser comida por los tiburones!
Las esperanzas de tal vez incumplir ese trato comenzaban, no era mala idea en Auradon después de todo.

Tal vez...— pero termino, cuando dobló la esquina se topo con cualquier cosa que quisiera ver menos eso. Evie la tenía contra la pared, los labios que ella anhelaba besar los tenía ahora ella otra vez. Se sintió en cólera cuando Mal la separó de golpe y Evie se quedó mirándola tan embobada.

¿Que tenía Mal?
¿Que tenía que ella no?
Se escondió cuando la vio huir, era una costumbre de Mal únicamente huir.

— Mierda — se asomo pero al verla ahí, parada mirando la nada mientras que tocaba sus labios con tanta atención. Tomo aire y comenzó a caminar, el tacón resonaba en el piso, el cazador se acercaba a su presa. — Evie — una sonrisa se apareció por sus labios provocando que la peliazul inmediatamente saliera de sus pensamientos

— CJ — sus ojos se abrieron tanto que olvido lo que miraba, se alejo inmediatamente mientras que reía secamente. — ¿Necesitas algo? — cuestionó

A ti...— susurro inaudible pero se acercó aún más, la noche parecía ser el contexto perfecto para CJ. — ¿Me podrías mostrar el comedor? — tenía la oportunidad perfecta

Ahora necesitaba castigarla, necesitaba hacer que Evie supiera que era suya.





[..]

Okay, intento actualizar más rápido.
Necesito que me digan con quién debería quedar Evie.

CJ

Mal

Me ayudarían bastante.
Por favor olviden votar

Aviso 2: estoy pensando en hacer un fic Dotchell [ Mitchell x Dove ]
O tal vez otro Mevie.
¡Ustedes digan para empezar!

También, las que gusten de Jelsa tengo una historia que podría gustarles.👀

¡Suerte en su cuarentena!
Bonita noche.

𝙄𝙩 𝙬𝙞𝙡𝙡 𝙗𝙚 𝙤𝙪𝙧 𝙨𝙚𝙘𝙧𝙚𝙩.| 𝘔𝘦𝘷𝘪𝘦 𝘧𝘢𝘯𝘧𝘪𝘤𝘵𝘪𝘰𝘯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora