┃❛𝐕𝐖 ━ 𝐒𝐡𝐚𝐝𝐨𝐧𝐢𝐜⎧𝐌𝐞𝐩𝐡𝐨𝐧𝐢𝐜❜┃
Todo el mundo se enteró de las criaturas sobrenaturales que asechaban a sus poblados, los reyes tomaron decisiones y firmaron acuerdos contundentes que prevalecieron hasta cierto tiempo.
Un siglo después...
−Je, no eres tan malo niño *retrocede un poco y vuelve a atacar*
−*La esquiva*
−¡Pero no lo suficiente! −de un rápido movimiento saltó e intento perforar su costado, el chico solo cerro los ojos con fuerza, esperando el impacto.
Recapitulemos un poco.
El grupo fue transportado a las cavernas sumergidas al interior del bosque boreal; el echidna y erizo verdoso cayeron --literalmente-- de hocico abajo, el albino sujetándose de una rama cercana, el de vetas turquesa levitando hasta tierra firme, y el oji-rubí cargando al menor. Examinaron por un rato el lugar hasta que decidieron continuar con el camino, aunque claro, no admitirían que estaban perdidos y remotamente solos.
Para su suerte, al cabo de unas horas la gata violeta logró encontrarlos, primero que nada revisando al cían y segundo preocupándose por los de la realeza. Según por su ubicación el paraje de los "Ent" no quedaba muy lejos, y podrían llegar a hacerles una visita; hablaron por unos momentos sobre lo que debían decir adecuadamente para no causar mala impresión con los demás seres que visitarían, y hubieran seguido charlando de no ser por un ataque de flechas y lanzas comenzado por seres desconocidos.
Los vampiros fueron rápidos y atraparon todas las flechas antes de que alguna le diera a los demás, todos desenvainaron sus espadas y se colocaron en posición de ataque, esperando la presencia ajena. Pronto se dejaron ver a seis cíclopes de horroroso aspecto avecinarse, seguidos de cinco individuos cubiertos por capas largas y capuchas que cubrían su rostro. Se miraron fijamente por breves segundos y luego determinaron que no podían ser aliados, sino enemigos; atacaron sin dudarlo y para su sorpresa, los no identificados tenían las características justas de un vampiro, así que igualaban a los gemelos y a la minina.
Los werehogs se encargaban de las bestias y los cuatro restantes de los colmilludos, iban igualados, así que no perdían nada con seguir luchando. La fémina se encargaba de dos mellizos que portaban una mascara escondiendo sus facciones; Shadow del mayor de ellos, por altura y a grandes rasgos de edad; Mephiles del intermedio que era demasiado bueno en el combate físico y con su hacha de arma; Sonic de la única hembra que iba entre ellos. Aunque para el susodicho le era algo difícil mantener el ritmo de la guerrera no se dejaría vencer tan rápido, así que evito a toda costa un ataque a su persona y tratar de inhabilitarla.
Y ahí es donde los sucesos anteriores ocurren. El cobalto cerro los ojos esperando el impacto, pero sus reflejos le ayudaron a sacar y lanzar una daga oculta entre su manga izquierda y dañar momentáneamente a la chica, dándole ventaja de levantarse y atacarla hasta conseguir que se alejara lo suficiente de él.
−Oh, eso hubieras querido −susurro a su oreja, pasando la hoja de su espada por el cuello azulado.
−¡Sonic! −el de vetas rojas se alerto de inmediato y fue hacia ellos, atacando a la mujer y sosteniendo al chico por un brazo.
−Hmph... −rió bajo e iba a retomar su lucha pero el hermano del contrario la desarmo en un parpadeo.
Los seres mayores cayeron en un ruido sordo al suelo, la oji-miel había acabado con los mellizos, solo quedaban tres de aquel grupo, así que idearon una retirada mágica.
−Nos volveremos a ver, Sonic −fue lo último que dijo, sonriendo de lado y desapareciendo en humo negro.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
−¿Te encuentras bien? −pregunto soltando al de tez durazno.
−Claro... −bajo las orejas, desvió la mirada y se cruzo de brazos, vaya que un remolino de sentimientos se le presento ahí mismo.
¤ ▪ ¤ ▪ ¤ ▪ ¤ ▪ ¤ ▪ ¤ ▪ ¤
−¿Sigue ahí?
−Sí, no se ha movido desde tres horas, a mi se me hace raro... Sonic jamás hizo o sabe hacer un entrenamiento mental...
−Paciencia, déjenlo solo y verán lo que pasa *Observando al cían*
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Después del atentado, descansaron en una zona segura para recuperarse y practicar entre ellos; cada quien tuvo un contrincante de distinta especie para mejorar sus habilidades, salvo el azulino, quien prefirió irse de ahí sin que ellos se dieran cuenta.
Al notar su ausencia fueron en busca de él, y lograron encontrarlo hasta en un rió cristalino, estaba concentrado y empuñando su espada, lo dejaron seguir con lo suyo hasta que decidiera acabar. Pasadas algunas horas se les hizo inquietante que el menor no mostrara alguna acción o reacción, seguía igual por completo; por petición de la chica nadie fue a sacarlo del trance, pero su semblante cambio al ver como el agua empezaba a moverse irregularmente.
−(No puedes seguir siendo débil... Tus hermanos... Tus padres... Tus amigos... Tu reino...) −apretujaba más su agarre, sintiendo como el aire se intensificaba y el sonido de las aves salir de los arboles y volar aceleradamente interfería en sus tímpanos; sintió como en el agua empezaba a hacerse un remolino feroz, salpicando sus prendas y mojandolo por completo, abrió sus ojos y solamente observo oscuridad, luego dos círculos diminutos de color rojo acercándose poco a poco a él. Se sobresaltó y perdió la concentración, cayendo de espaldas y parando el movimiento del aire y agua.
−¿Son? −levanto con cuidado a su pequeño, mirándolo preocupado y con intriga.
−Ahm...perdón...que-quería entrenar solo... −limpio las gotas que llevaba por el rostro, caminando de vuelta al bosque, sin dirigir la palabra a nadie.
−¿Qué le pasa? −pregunto el oji-reptil.
−Quiere hacerse fuerte para sobrepasar sus límites, pero está asustado.
