My Petersburg (+18)

2.3K 106 88
                                    


Disclamer: Ni Marvel, ni Disney, ni Anastasia el musical me pertenecen. Solo la historia y los personajes que no reconozcan.

(Este es un AU donde no pasaron ni Civil War, ni Infinity War ni Endgame y Bucky no mató a los Stark).

Diálogos en cursiva son flashback y en negritas son diálogos en ruso.

Como respuesta a eso, el Soldado del Invierno la tomó por la cintura estampando sus labios contra los de la Viuda Negra, besándola como no lo había hecho en años, y como se moría por hacerlo desde el primer día en que la vió y la reconoció completamente.

La pareja de espías rusos se dejó llevar por la pasión, convirtiéndose en un amasijo de prendas de ropa y caricias. Recorrieron los aposentos de James tratando de encontrar un lugar donde apoyarse, hasta que encontraron la pared. Natasha estaba extasiada por tener a James de nuevo a su lado, luchando por quitarle la playera que usaba como pijama. Los labios de James recorrían el cuerpo de Natasha con un fervor casi desesperado, tenía miedo de abrir los ojos y darse cuenta de que eso era solo un sueño. La Viuda Negra se dió cuenta de esto y sabía qué tenía que actuar, porque sino James nunca se libraría de las cadenas de culpa que lo acosaban.

— Mírame, James — exigió Natasha tomando con sus pequeñas manos la fuerte mandíbula del moreno. El hombre obedeció a su esposa y la miró, ojos azules se toparon con verdes, como una colisión entre un árbol y el mar.

— Aquí estoy, mili mol, no estás soñando — James suspiró ante las palabras de Natalia, ella siempre sabía que decirle.

La rusa tomó el control y continuó besándolo con fervor mientras el soldado la tomaba de los muslos rodeando sus delicadas piernas en su cintura para llevarla a la habitación. Bucky necesitaba estar dentro de ella, estaba desesperado por follarla. Incluso en los peores momentos de su tortura la tenía a ella como punto de paz y ahora estaba de vuelta. Solía hacerle burla a Steve Rogers por llevar el compás que contenía la foto de Peggy Carter todo el tiempo, pero estaba seguro de que él haría lo mismo si tuviera algo de Natalia a lo que aferrarse. Pero ahora la tenía a ella, que era mejor que cualquier fantasía o imaginación.

— ¿Recuerdas cómo decían en las viejas canciones que el mejor hogar era el que se sentía alegre como Petersburgo en las Navidades? — dijo de pronto Natasha en su oído, para después morder su lóbulo, haciéndolo gruñir de placer.

James solo pudo asentir con la cabeza, no entendía a que venía todo eso justo cuando estaba más excitado, después de años de no tocarla. Le diría que entendía el Coran si fuera necesario para complacerla.

— Bueno, pues, tu eres mi Petersburgo, Yasha — el soldado la tomó por el cabello y la besó de nuevo, embriagado de amor por ella. No entendía cómo sentía tanta ternura y tanta pasión por la misma persona, pero lo hacia feliz como nada lo había hecho nunca.

Entraron a trompicones a la habitación del Sargento Barnes, casi cayendo por la necesidad que sentían el uno del otro y no pudieron evitar soltar una carcajada. Eran, por fin libres de amarse tanto y tan fuerte como les placiera. No había necesidad de escabullirse o de ser silenciosos o de pretender que no se conocían después de hacer el amor. James tumbó a Natasha en la cama, atacando nuevamente su cuello. Quería follarla contra cualquier superficie que encontrara pero también quería hacerle el amor. La espía se removió debajo de é, intentando terminar de desnudarlo, pues en ese momento solo había logrado sacar su playera. Bucky se alejó un poco de ella para admirarla, su pijama, consistente en un top y un pequeño short, lo dejó de nuevo sin aliento. Quitó el top y sonrió coqueto al ver que no llevaba sujetador.

Anastasya // BUCKYNAT/WINTERWIDOWWhere stories live. Discover now