Modern Love - Luimelia

El espectáculo musical

Noviembre de 2018

Ese día, Amelia tiene una prueba muy importante para un espectáculo musical que se va a estrenar la temporada que viene. Desde que terminara la carrera en junio, se ha dedicado a seguir formándose. Sabía que iban a lanzar este espectáculo y quería conseguir un papel como fuera. Luisita, por otra parte, trabaja a ratos en el bar de sus padres y lleva un par de meses estudiando un máster en guion de cine y televisión. Está decidida a escribir y dirigir su propia serie de televisión.

Luisita le ayuda a prepararse y a relajarse. Ambas están en la habitación de Amelia, mientras esta se viste.

— Cariño, cálmate. Te lo has preparado un montón y eres buenísima en esto. Confía en mí. Y en ti, claro.

— ¿Sabes lo que me ayudaría, Luisita? — Amelia deja de abrocharse los botones de la camisa para acercarse a Luisita con una sonrisa pícara. Esta no puede evitar que se le vayan los ojos a la parte del cuerpo que queda descubierta. — Bueno, tú ya sabes lo que más me relaja en el mundo, ¿no? No hace falta que te lo explique. — Empieza a besar a Luisita muy lentamente. La rubia la empuja suavemente hacia atrás.

— Como te pongas así, llegas tarde, que lo sepas. Te pones muy chulita, pero sabes que como empiece, no paro. — Dice aguantándose la risa.

Amelia la mira divertida.

— Pues por eso. — Sonríe mientras se muerde el labio y levanta una ceja.

— Amelia, tienes exactamente 30 minutos para terminar de vestirte y llegar allí, y estás a 10 minutos andando. Así que por favor, termina.

— Solo necesito 3 minutos. — Vuelve a acercarse y esta vez empieza a empujarla con suavidad agarrándola por la cintura con una mano mientras la besa hasta que la pared les frena y Luisita queda apoyada sobre esta. Su novia empieza a besarle el cuello. Sabe que es su punto débil.

— Joder, Amelia. ¿Estás en serio?

— Y tanto. — Dice como puede mientras empieza a desabrocharle el pantalón. Cuando siente el tacto de Amelia, Luisita responde como su novia ya sabe que lo haría. Lanza un pequeño gemido y le corresponde metiendo la mano por debajo de la falda, teniendo prisa por llegar al borde de su ropa interior. Después de 4 años, Amelia y Luisita saben muy bien qué tienen que hacer para que la otra estalle. Eso no tarda mucho en ocurrir. Se quedan abrazadas unos segundos, todavía apoyadas en la pared, y Luisita deja caer la cabeza un momento sobre el hombro de Amelia. Vuelve a levantarla y mira a su novia mientras intenta recuperar el aire. Amelia le sonríe.

— ¿Ves? 3 minutos. — Dice como puede, volviéndose a colocar bien la falda y terminando de abrocharse la camisa. Luisita no dice nada. No puede. Sigue intentando recuperar la respiración. La mira con cara de enfado y diversión al mismo tiempo y ve cómo su novia desaparece por el pasillo en dirección al baño.

***

Amelia entra en El Asturiano, el bar de los padres de Luisita, con una sonrisa de oreja a oreja. Luisita sabe que eso solo puede significar una cosa. Se levanta de la mesa donde está subrayando unos apuntes y va hacia ella corriendo.

— Te han cogido. — Amelia le planta un beso.

— ¡Sí!

— ¡Dios, lo sabía! — Luisita le da un abrazo, emocionada.

Amelia aprovecha el abrazo para decirle al oído:

— Que sepas que lo que hicimos antes de salir de casa ha sido mi amuleto. — Susurra. Luisita tiembla al tenerla tan cerca. Sí, aún sigue haciéndola temblar de esa forma. Se separa al acordarse de que están en medio del bar y le da un golpecito en el brazo.